Empleados y visitantes de la Casa Blanca honraron este 31 de octubre a sus difuntos con una ofrenda del Día de Muertos que estará abierta al público en...
- 14/08/2024 23:00
Todos a la Feria
La lectura es una ruta incomparable para adquisición de conocimientos. Así ha sido desde que se inventó el primer libro en la antigua Mesopotamia, según dicen los historiadores.
Por supuesto, que no solo se ha circunscrito a conocimiento, sino a todas las variantes de comunicación que sean de interés de la especie humana.
La Feria Internacional del Libro de Panamá intenta popularizar un eslogan que es revolucionario: “Panamá sí lee”. Viene a romper esa idea generalizada que los panameños no son dados a la lectura. Las generalizaciones no sirven de mucho, pero, si esto fue verdad alguna vez, ya no lo es.
Al igual que a lo largo de la historia, en Panamá, el hábito de la lectura y el amor por los libros ha transformado la vida de muchísimos y, en buena parte, si pensamos en personajes descollantes a lo largo del tiempo, ha sido gracias a sus estudios y a la lectura que han fraguado sus éxitos.
El esfuerzo de la Cámara Panameña del Libro en la consolidación y crecimiento de la Feria Internacional del Libro es meritorio e impresionante. Durante los últimos diez años y bajo la presidencia de Orit Btesh, quien cual hidalga mujer de la Mancha, asumió por cruzada darle los mejores estándares a la Feria y a todo lo que gira en torno a ella. Junto a un equipo comprometido y al apoyo de mucho voluntariado han logrado que la Feria sume, en sus distintas versiones, más de un millón de visitantes.
Valga mencionar, que la voz de la señora Btesh se levanta quijotesca, cada año, en su discurso inaugural para hacernos reflexionar sobre la importancia de la lectura, la cultura, la educación y el entorno global. A esto se adiciona un programa de eventos y actividades de una riqueza sin igual, para convertir la feria en un gran momento de reflexión nacional.
Este año durante la inauguración la nueva ministra de Educación, Lucy Molinar, se comprometió a redoblar el apoyo a la feria y fortalecer el compromiso con la enseñanza del idioma español. Oportuno mensaje, porque es sabido que una de las grandes debilidades de nuestro sistema educativo es que los estudiantes – en números que aterran -, no entienden lo que leen y muestran dificultades para expresar sus pensamientos.
Este año, el país invitado es España, quienes han desplegado un pabellón estupendo, con quien no solo compartimos el idioma, sino la cercanía en beligerantes temas de interés. El nivel de expositores internacionales de esta feria desborda cualquiera anterior, revisar el programa de presentaciones y conferencias es sorprendente. Manuel Vilas, Sergio Ramírez Mercado, Javier Sierra, Mónica Borda, Jorge Lozano, Fernando Zapata López, José Rafael Fariñas, María Fernanda Mendoza, Rosa de Couto Gálvez y muchos más, que nos honran con su presencia.
A nivel nacional, hay una verdadera explosión de talento, una gran cantidad de autores panameños y panameñas que presentan sus obras, en los más diversos géneros literarios, mostrando que además de leer, los panameños escriben y publican. Hoy día, para cualquier lector empedernido es un verdadero reto seguirle la pista a los libros que ven la luz en Panamá.
Tenemos en el Centro de Convenciones Atlapa un evento de marca mundial, desaprovecharlo sería una perdida personal para todo aquel que pueda concurrir. Especialmente, comprometámonos en hacer que jóvenes y niños vivan esta experiencia.
Me gusta narrar la historia que, durante la Feria del Libro de 2017, haciendo tiempo para participar en un programa de radio, al que me habían invitado el profesor Edwin Cabrera y Guillermo Ruíz. Debido a que las entrevistas estaban un poco retrasadas, esperando conocí y tuve una interesante conversación con un joven senador llamado Iván Duque Márquez, quien presentaba su libro sobre la economía naranja ... un año más tarde era el presidente de Colombia.
Vayan a la Feria del Libro, ocurren interesantes sorpresas.