• 25/04/2024 10:11

El mejor capitán para capear el temporal y ¡vamos!

El periodo electoral lamentablemente no estado exento de descalificaciones, demagogia y populismo

Realmente no hay otro mejor candidato, entre quienes tienen posibilidad de vencer, para gobernar más efectivamente en la coyuntura actual. El capitán quien augura mayor esperanza y tranquilidad es sin duda Martin Torrijos.

Ha sido una campaña intensa, bastante atípica, para quizá las elecciones más importantes de nuestra historia. 9 partidos políticos reconocidos; 8 candidatos a la presidencia, 3 de ellos por libre postulación; poco más de 3 millones de electores (de estos, más de la mitad afiliados a partidos políticos, más de 300 mil que podrán votar por primera vez, y un 48% de electores entre los 18 y 40 años); 885 cargos de elección popular, más de 7 mil quinientas mesas de votación.

El periodo electoral lamentablemente no estado exento de descalificaciones, demagogia y populismo, por parte de casi todos los candidatos. Muy penosa, baja, la campaña sucia preferida por algunos, atacando la vida personal y familiar del adversario; e irresponsables las pretensiones de otros, de ganar terreno en las elecciones presionando a la máxima corporación de justicia para que ésta sacase de la cancha a un candidato debidamente habilitado por la máxima corporación electoral, grave atentado a nuestra incipiente democracia.

El electorado, mediante el voto informado y a conciencia, sabrá elegir mayoritariamente en favor de la mejor opción entre las 8 ofrecidas para el cargo de presidente, y también sabrá elegir bien a excelentes diputados jóvenes independientes a nivel nacional, impulsados sobre todo por VAMOS, pero también de MOCA y otros partidos políticos ¡Enhorabuena por eso! ¡Muy bien hecho, Juan Diego Vásquez y Gabriel Silva!; y muy atinada tu recomendación, maestro Rubén Blades.

Al final imperará la sensatez; estas elecciones se decidirán hasta el último minuto, en muchos casos tras la mampara. Quienes permanecen indecisos, al final en su mayoría estoy seguro decidirán bien; muchos de los jóvenes harán lo propio; también otros al final podrán cambiar su voto por uno más útil y vencedor, considerando la oferta electoral y la coyuntura actual, con tantos desafíos que tenemos como país.

Y es que estamos ante la “tormenta perfecta”; los desafíos en estas aguas turbulentas son de enorme envergadura: El problema de la CSS, del agua y su afectación a la población y al Canal, las consecuencias del cierre de la minera, el impacto negativo ante la pérdida del grado de inversión, endeudamiento exorbitante; desempleo, pobreza y desigualdad; la rampante corrupción que permea no solo en el sector público, la amenaza de los tentáculos del crimen organizado y de la narco política, entre otros.

Pero las oportunidades también son enormes, gracias sobre todo a la capacidad de resiliencia, potencial y vocación de diálogo de los panameños; a nuestra privilegiada posición geográfica, y a tantas ventajas comparativas y competitivas que podemos aprovechar.

Martín Torrijos ha marcado una importante diferencia entre sus adversarios al desarrollar una campaña de altura, sin descalificaciones; con talante de estadista y contando con el mejor equipo de trabajo. Ha demostrado conocimiento y manejo de los temas, y ha ofrecido propuestas sensatas, necesarias, realizables. Ciertamente es una persona que, habiendo tenido la oportunidad, no lo hizo mal, sobre todo si lo comparamos con otros; el país avanzó. Dejó superávit; cuando le correspondió asumir el costo político lo hizo y se resolvió en su momento el problema de la CSS; presidió sobre el proceso de aprobación del proyecto de expansión del Canal, con todo lo bueno que ello representa para el país y los más necesitados; construyendo sobre esa vocación de diálogo que tenemos en este país, convocó a la Concertación Nacional para el Desarrollo, iniciativa que nació en la APEDE y que urge rescatar; también llevó a la realidad otras propuestas apedianas, como fue la firma del Pacto de Estado por la Justicia, y el mecanismo para hacer más transparente el escrutinio previo a la designación de candidatos a integrar la Corte.

Martin es, entre los 8, quien mayor voluntad de diálogo y concertación tiene, y mayor experiencia y efectividad para convocarlo y construir consensos; y esto es algo no menor, pues la persona a quien habremos de elegir gozará ciertamente de legitimidad, pero para contar con la necesaria gobernabilidad tendrá que llamar a los distintos actores sociales y fuerzas políticas. Ya Martin lo pudo hacer antes.

No tengo duda alguna que Torrijos aprovecharía cada minuto durante el corto período de transición, invitando a los mejores compatriotas, para afinar detalles no solo para capear la “tormenta perfecta” bajo su liderazgo como capitán; también para allanar el camino hacia la modernización del Estado, bajo una política de austeridad que incluya también recortes necesarios en el presupuesto de la asamblea, eliminación de “botellas”, “dietas” jugosas, partida discrecional; implantar las bases para una firme y efectiva lucha contra la corrupción; hacer propicio el ambiente para facilitar la inversión directa extranjera y el turismo en las modalidades más apropiadas; asegurar una educación de calidad en función de un sistema de meritocracia ¡Manos a la obra, avanzando hacia puerto seguro!

El autor fue presidente de la Apede y actualmente preside la Red Latinoamericana y del Caribe para la Democracia y el Consejo Directivo Internacional del Pilar de Sociedad Civil de la Comunidad de las Democracias

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones