• 18/02/2025 00:00

Big Don y la reapertura de la mina

El tema de volver a abrir para cerrar la mina inconstitucional debe generar credibilidad en el pueblo panameño y en la geopolítica norteamericana...

Independientemente de qué firma encuestadora se use en Panamá, las preguntas sesgadas, la dispersión, la transparencia, el uso de la muestra y el carácter longitudinal de los datos, las encuestadoras foráneas o nacionales coinciden en la percepción negativa del panameño respecto a la actividad minera en el istmo.

A pesar de estos sentimientos del pueblo, los comerciantes y empresarios que mandan actualmente en Panamá insisten en abrir una mina que es propiedad del partido comunista de China Popular y perteneciente a su proyecto insignia: La Nueva Ruta de la Seda (o IFR) y “el futuro común de la humanidad”.

¿Qué sabe Trump y Marco Rubio de las mineras? Una publicación reciente, a cargo de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, encontró que el primer lugar de los sobornos en inversiones en el extranjero involucra a extractivismos, y en las encuestas 2015 y 2016 a los directivos de grandes empresas, realizada por la consultora internacional PriceWaterhouseCoopers, arrojó que el sector del extractivismo más susceptible a la corrupción es la minería.

La minería a cielo abierto es un clásico ejemplo de extractivismo. La definición de extractivismo se define, por un lado, en los grandes volúmenes de recursos removidos, y por el otro, en la intensidad. Al análisis debe agregarse al cálculo la cantidad de agua o energía necesaria para extraer el recurso. En paralelo, la intensidad se refiere al impacto ambiental en la obtención de los recursos. La demanda internacional impone particularidades clave que diferencian los extractivismos de otros tipos de apropiación de recursos naturales. Los extractivismos resultan ser globales, por lo que se extrae se inserta en redes globales de comercio y producción. Es decir, una cantera de piedra que se utiliza para crecimiento en Panamá no cumple la definición de extractivismo.

El tema de volver a abrir para cerrar la mina inconstitucional debe generar credibilidad en el pueblo panameño y en la geopolítica norteamericana: no se puede tener a la segunda armada de China Popular cargando y descargando materiales en la puerta atlántica del Canal de Panamá. Si Donald Trump quiere Groenlandia por las Tierras Raras que abundan para la defensa militar de Estados Unidos, no permitirá que usen las tierras raras de Donoso para las armas del ejército popular de liberación.

Si queremos tener un refuerzo de valores democráticos y una robusta gobernanza para afrontar los proyectos del Canal de Panamá sin la Nueva Ruta de la Seda Digital, debemos adherirnos primero a la iniciativa EITI (por sus siglas en inglés, la Extractive Industries Transparency Initiative) para poder generar la credibilidad del cierre de la mina y así cumplirle a nuestra carta magna.

La EITI es una iniciativa del Banco Mundial con un rotundo llamado a la transparencia, con la esperanza de que con esas medidas se podrán detener las coimas de los extractivismo. Mostremos respeto hacia las instituciones del pueblo y su constitución. La dueña de la concesión minera en Panamá ha firmado la EITI en Zambia, ¿por qué no la podría realizar en Panamá para darle credibilidad a la buena intención de la alianza por rescate a Panamá?

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones