Agua, energía, recolección, manejo y disposición de desechos

Estamos atravesando una inflación internacional agresiva, donde los principales mercados se están contrayendo. La media de esta inflación y crecimiento económico para Estados avanzados sería: Estados Unidos de América cerca del 6 % y el crecimiento en 1.5 %; la Unión Europea es 5.5 % en inflación y crecimiento de 3.5 %. Mientras que los gigantes de Asia; China con un 1.75 % de inflación y un crecimiento de 5.2 %; India con 6.4 % de inflación y crecimiento esperado de 6.1 % promedio. Sumado a la rigidez monetaria agresiva a los consumidores finales, a los productores, fabricantes y transformadores, esta situación genera un nivel alto de incertidumbre, la recesión actual ha desacelerado el crecimiento internacional que busca la recuperación económica después del COVID-19. Esto genera incertidumbre mundial, especialmente en Estados en vías de desarrollo, con una inminente recesión global para este 2023.

Por nuestra parte, en Panamá, somos un país privilegiado, el pronóstico nos sitúan con 3 % de inflación y crecimiento de 4.2 %.

Los indicadores socioeconómicos son desarrollados con ligeras diferencias entre organismos, en general podríamos mencionar la definición de Cepal: “La División de Desarrollo económico trabaja en el desarrollo de indicadores económicos para la región, como por ejemplo medidas de producto potencial y productividad, índices de tipo de cambio real e indicadores adelantados de la actividad económica. Igualmente, se elaboran proyecciones económicas para cada uno de los países de América Latina y el Caribe, las cuales son un insumo para las publicaciones de la Cepal”.

Tomando en cuenta estas perspectivas de crecimiento e inflación internacional, debemos ser un Estado dinámico, disruptivo con el “statu quo” y paradigmas, y atrevernos a cambiar nuestro porvenir como sociedad.

La producción, abastecimiento y cuidado de las fuentes hídricas; el manejo, recolección y disposición de los desechos y residuos; la producción, distribución y sostenibilidad energética de Panamá se deben reorganizar junto al Ministerio de Ambiente, acorde a la realidad del siglo XXI. Tenemos un retraso tecnológico de más 40 años, salvo situaciones muy precisas, que no son suficientes para bajar esa brecha de tiempo.

La desarticulación de las políticas públicas en estas actividades son áreas de oportunidad. Vale la pena evaluar la creación de un ministerio acorde a la realidad mundial socioeconómica, donde se plantee la organización eficiente y efectiva de los temas energéticos, desechos, manejo de las fuentes hídricas y ambientales.

La Autoridad de Aseo de Panamá tiene más de 25 parches en políticas públicas y apenas dos artículos ambiguos que hablan al respecto en la Constitución Política de la República de Panamá.

La recolección, manejo y disposición de los desechos es una calamidad nacional. El desaprovechamiento de la capacidad de producción energética es una burla a la facturación de los panameños. La contaminación indiscutible a nivel nacional de las capas freáticas, de los acuíferos y playas, la contaminación del aire, la insalubridad y no menos importante la acumulación de los desechos y residuos en diferentes avenidas, ríos y en la bahía, sobre todo en las regiones más vulnerables de la extensión nacional, son un certificado a la pobre gestión pública.

El Idaan tiene más 18 parches jurídicos y fundamentado a medias, sobre la desactualizada Constitución Política de la República de Panamá, basados en más de 5 artículos de diferentes títulos y capítulos de esta, sin claridad ni actualizada con la realidad de lo que es el modelo actual de producción, garantizar las fuentes hídricas, el abastecimiento y garantizar sostenibilidad en la distribución del vital líquido en las regiones más vulnerables y las áreas aledañas donde están las fuentes.

La Ley 43 de 25 de abril de 2011, reorganiza la Secretaría Nacional de Energía. Por otro lado, tiene unos tres artículos en la Constitución donde escuetamente se ve el tema energético. Por otro lado, se nota local e internacionalmente un gran esfuerzo donde se evidencia una serie de políticas públicas impactando las tendencias internacionales, necesidades internas y regionales de este sector. Pero es un esfuerzo sin mayor trascendencia por la falta de decisión por la forma en que está constituida esta importante institución.

Se debe evaluar, con la seriedad que amerite, una propuesta integral completa de agua, energía, ambiente, manejo de residuos y desechos. Un ministerio que nos ayude a llevar estas importantes actividades al nivel y autonomía que se requiere. Esto, concebido de manera armoniosa, generará un manejo eficiente de estos rubros que se traduce en beneficios en: la salud, economía, crecimiento social, combate a la pobreza, generación de recursos sostenibles, baja la contaminación, garantiza impactar economías naranjas y verdes, y sigue la lista, con una modificación adecuada de la ley de micro, pequeñas y medianas empresas hasta generaría riquezas y nuevos empresarios.

La falta de sabiduría, mansedumbre y accionar por llevar a Panamá al siguiente nivel nos tiene atrasados. Necesitamos construir un nuevo pacto social y el firme deseo de que nuestro crecimiento económico permee a todas las capas sociales. Panamá es tierra de valiente y luchadores.