El futuro del hospital modular: un misterio sin resolver

Hay personas trabajando en el lugar. En el estacionamiento aguardan varios vehículos identificados con el logo del Ministerio de Salud (Minsa) y alrededor de 12 particulares. Se trata del hospital modular, una de las instalaciones de salud más importantes, que surgió con el fin de atender el pico de la pandemia que azotó a Panamá y al mundo.

¿Está en funcionamiento?, ¿será trasladado a alguna comarca o sitio que lo necesite como establecieron las autoridades de Salud? “No estamos autorizados para dar información, debe ser a través del Minsa”, asegura la directora Isis Pérez y la administradora Zeudy Cedeño.

En la entrada está sentado un agente de la Policía Nacional; a su lado tiene una mesa con mascarillas, alcohol y gel alcoholado. Pérez expresa que “para hacer un recorrido, este debe ser gestionado a través del Minsa” y confirma que el hospital continúa abierto y asegura desconocer cuándo y a dónde será trasladada la infraestructura.

Sin embargo, Cedeño comenta que el laboratorio brinda apoyo al hospital poscovid del Figali. Resalta la labor del personal, “no hemos dejado de atender; nunca nos hemos dejado... tratamos bien a los pacientes y en la peor etapa del virus trabajábamos más de 16 horas”, aunque al ser cuestionada acepta que hoy no hay pacientes.

En octubre de 2022, las autoridades de Salud entregaron al presidente de la República, Laurentino Cortizo, la propuesta para desmontar y trasladar el hospital modular, con el propósito de reforzar la atención en la comarca Ngäbe Buglé y el hospital San Miguel Arcángel, de San Miguelito.

“En estos momentos, el hospital cumple su proceso normal de desinfección, no hay pacientes hospitalizados y estamos a la espera de instrucciones superiores, para verificar próximos pasos a seguir”, declaró en aquel entonces la directora.

Para esa misma fecha, la directora encargada de Provisión de Servicios, Norma De Gracia, explicó que el hospítal ubicado en Albrook no está brindando servicios; “si un paciente requiere atención de hospitalización por complicaciones por covid-19, están disponibles las áreas aisladas dentro de los hospitales de Figali, Santo Tomás, San Miguel Arcángel y el hospital Irma De Lourdes Tzanetatos, este último ubicado en el corregimiento 24 de Diciembre”.

Desde junio de 2020 hasta septiembre de 2022, el hospital integrado Panamá Solidario atendió a 2.181 pacientes positivos de covid-19, quienes además presentaron diferentes patologías y requirieron hospitalización. De este total de pacientes atendidos, 949 fueron mujeres y 1.232 hombres.

Aunque la causa principal de ingreso era el contagio por covid-19, también atendieron pacientes con otras patologías relacionadas con el virus, pero que debían ser hospitalizados, como diabetes y accidentes cerebrovasculares.

El hospital está dotado con 100 camas: 80 de hospitalización y 20 de cuidados intensivos. La construcción, que demoró 28 días, se realizó con una inversión de $6 millones 541 mil.

La obra, que fue construida por el Ministerio de Obras Públicas (MOP), se convirtió en blanco de cuestionamientos por sobreprecios y por la calidad de los materiales empleados. No obstante, en julio de 2021, tras una investigación, la Fiscalía Anticorrupción descartó el uso de módulos preutilizados en la construcción.

Una publicación de este diario, en julio de 2021, detalla que los registros de las importaciones y las inspecciones visuales llevaron a la fiscal Anilú Batista a certificar que la empresa Smartbrix Centroamérica cumplió con todos los requisitos que se le exigieron, como certificaciones, material nuevo, experiencia, y el precio más bajo.

Durante un encuentro con los directivos del Grupo Editorial El Siglo & La Estrella de Panamá (GESE), llevado a cabo en junio de 2020, el presidente Cortizo aseguró que si tuviese que tomar la decisión de construir otro hospital, lo haría, al “precio al que se debe construir”.