El raspado: una tradición que refresca el alma panameña

Actualizado
  • 25/01/2025 02:39
Creado
  • 24/01/2025 19:06
Con una historia que trasciende generaciones y una fuerte presencia en las calles de Panamá, el raspado no solo alivia el calor, sino que evoca memorias y conecta a comunidades. Entre relatos de vendedores y clientes, descubrimos por qué esta tradición sigue siendo un pilar en la cultura panameña.

En las cálidas calles de Panamá, el raspado no es simplemente un postre; es una tradición que despierta emociones, une a las personas y enriquece la cultura del país. Para entender su impacto, conversamos con un vendedor de raspados en el Casco Viejo y con cuatro clientes habituales, quienes compartieron sus perspectivas sobre esta delicia helada.

Un origen antiguo y helado

Los antecedentes del raspado se remontan a las antiguas civilizaciones. En Mesopotamia, hace más de 4.000 años, los habitantes ya recolectaban nieve de las montañas para mezclarla con frutas y miel, creando un postre rudimentario que marcaba las ocasiones especiales. De manera similar, en el Imperio persa se preparaba un manjar conocido como “faloodeh,” una mezcla de hielo, jarabe y frutas, que podría considerarse uno de los precursores de esta tradición.

En China, durante la dinastía Tang (618-907 d.C.), los emperadores disfrutaban de nieve mezclada con jarabes frutales y leche. Marco Polo, el famoso explorador veneciano, habría llevado esta idea a Europa tras sus viajes al Lejano Oriente, introduciendo la cultura de los postres helados en el continente.

El viaje a América

El concepto del raspado llegó a América con los colonizadores europeos. En México, se popularizó con el nombre de “raspado” debido al método artesanal de raspar hielo con un instrumento metálico para luego bañarlo con jarabes de frutas. Durante siglos, este postre se convirtió en una tradición popular, especialmente en zonas cálidas, donde se vendía en las calles como un refrigerio refrescante.

El raspado tomó diferentes formas y nombres en todo el continente. En Puerto Rico se le conoce como “piragua”, en Colombia como “cholado”, en Venezuela como “cepillado” y en Hawái como “shave ice”, una versión heredada de los inmigrantes japoneses.

Un momento feliz en cada bocado

Cuando se les preguntó a cuatro panameños qué sienten al comer un raspado, sus respuestas coincidieron en algo esencial: felicidad y fresco.

“Sabe bien”, expresó un infante.

“Es agradable, es fresco”. respondió una consumidora anónima.

“Con este clima en Panamá, excelente”, respondió una consumidora anónima.

“Refrescante”, expresó la madre del infante.

El vendedor: una vida dedicada al raspado

Se conversó también con un vendedor de raspados, Luis, que lleva 25 años atendiendo a locales y turistas en el Casco Viejo. Su historia es tan refrescante como el hielo que raspa a diario.

Cuando se le preguntó por qué eligió este oficio, respondió con una sonrisa: “Soy oriundo de Santiago de Veraguas y veía en la Central cómo pasaban carritos de raspados y me motivé a hacer una carretilla, y mi primera era de estufa”.

Se le cuestionó si, de tener la oportunidad de empezar de nuevo, volvería a ser vendedor de raspados. “Sin duda, raspadero 100 %, después del COVID me han motivado muchas cosas”.

Sobre los últimos gobiernos y si estos han afectado su negocio, el vendedor fue claro: “No, me llevo bien con los gobiernos, yo me dedico a mi trabajo y muy honradamente hago mi labor porque la ayuda del gobierno no la tengo.

Finalmente, compartió su opinión sobre el Casco Viejo, donde trabaja. “He estado 25 años vendiendo raspados aquí, soy de San Felipe y por suerte me ha ido bien.

Una tradición que sigue viva

El raspado no solo es un alivio para el calor panameño, sino también un reflejo de la identidad cultural del país. Desde los relatos de clientes que lo asocian con momentos felices hasta la dedicación de vendedores, queda claro que esta tradición sigue siendo un símbolo de esfuerzo, comunidad y sabor en Panamá.

Uno que es el grupo de Bohuslan Big Band fue en el Centro de Convenciones de Ciudad del Saber

En la plaza toca:

Porque Puma Zumix Grupo juvenil que interpreta...

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones