Biblioteca Nacional recibe en custodia, archivo documental de Julio Záchrisson

Actualizado
  • 11/02/2024 00:00
Creado
  • 10/02/2024 15:23
Se concreta así el cumplimiento de la voluntad del pintor, grabador y escultor, quien en vida solicitó que su legado reposara en su natal Panamá

La Sala de Uso Múltiple de la Biblioteca Nacional Ernesto J. Castillero recibió a autoridades del Ministerio de relaciones Exteriores, del Ministerio de Cultura, Ministerio de educación, familiares del fallecido artista Julio Záchrisson, conocedores del mundo del arte y medios de comunicación para hacer del conocimiento del país que esta entidad ha recibido en calidad de custodio, los archivos personales del artista panameño Julio Záchrisson, fallecido en 2021.

La familia de Zachrisson, por medio de su albacea, concretó un convenio que permitió la recepción de importantes documentos en diversos formatos que narran distintas etapas de la vida del pintor, grabador y escultor. De esta forma, detalla un comunicado oficial, “se cumple la voluntad del artista, quien en vida dejó saber que deseaba que su memoria artística y documental reposara en Panamá”.

Para la ocasión, la Biblioteca Nacional preparó una exposición que ofrece un pantallazo general de los documentos recibidos.

Con mucho entusiasmo, los convocados a este evento tuvieron la oportunidad de hojear, con el uso de guantes que garanticen el adecuado cuidado, algunos de los catálogos que dan fe de su extensa vida artística, tanto en Panamá como en el extranjero, así como de interesantes obras como una edición de La Carajicomedia de Fray Bugeo Montesino, poema obsceno paródico y satírico de principios del siglo XVI que el artista fue comisionado a ilustrar -una colección especial de la que solo se imprimieron 120 ejemplares en el año 1975-, así como una carpeta con siete dibujos originales en aguatinta, inspirados en la vida de los antiguos pescadores de la ciudad de Panamá.

Una urna muestra algunos documentos personales como pasaportes, certificados académicos, reconocimientos y medallas que recibió a lo largo de su carrera, tanto en Panamá como en otros países. Se suman algunas fotografías y libretas con bocetos.

Una segunda urna presenta libros cuyas portadas fueron ilustradas por el Maestro Záchrisson como La serpiente de cristal de Tristán Solarte, Lecturas para lectores de César Young Núñez, Bilis Negra de Francisco de Quevedo o Lobos al anochecer de Gloria Guardia, por citar algunos. Muchos de ellos se encuentran dedicados por sus autores, gesto que aumenta la valía de la colección.

Llegó el momento de las formalidades que iniciaron con palabras del presidente de la Fundación Pro Biblioteca Nacional Fernando Sucre Miguez, quien expresó que “cuando recibimos la colección, (...) quedé muy impresionado por la cantidad de obras, libros, fotografías, condecoraciones que hoy van a enriquecer la memoria histórica de este país. El que quiera conocer al Maestro Záchrisson, sin lugar a dudas podrá venir a la Biblioteca Nacional y ahora hacerse una idea y aprender muchísimo sobre la escuela donde estudió, aprender muchísimo de sus sentimientos, porque en su obra se refleja mucho el sentimiento que él tenía y aprender muchísimo de su propia vida. Agradecemos muchísimo a la familia [Záchrisson] por lo que han hecho por Panamá porque al donarlo [este archivo] a la biblioteca, lo están legando a todas las generaciones presentes y futuras”.

Seguidamente, María Magela Brenes, directora general de la Biblioteca Nacional tuvo a cargo los agradecimientos a las instituciones que tomaron parte para que el arribo de la colección llegara a feliz término.

Inicialmente, destaca la directora el hecho de que la sucesión de Julio Záchrisson reconoce que la Biblioteca Nacional es sede del patrimonio hemerográfico de Panamá alberga en sus instalaciones obras literarias panameñas, así como material fotográfico y audiovisual y esta es la razón por la que decide proponer a la Biblioteca recibir el material. “Es reconocer la importancia de esta institución, y por otra parte, se cumple así con el deseo de Julio Záchrisson que manifestó en múltiples ocasiones que él quería que su legado viniera a Panamá”.

Las gestiones, detalla Brenes, “se hicieron gracias al papel importante de la Cancillería de Panamá, departamento de cooperación internacional y de diplomacia cultural; a la Embajada de Panamá en España, en especial quiero reconocer las gestiones iniciadas por el entonces embajador Allen Sellers Lara y luego la encargada de negocios a.i., la licenciada Anayansi Rodríguez. Se agradecen todas las gestiones que se hicieron a través del Ministerio de Cultura en Cooperación Técnica y Dirección de Patrimonio por todo el apoyo que nos dieron para que el envío de este patrimonio llegara a Panamá de forma expedita y en perfectas condiciones. Los costos de transporte internacional fueron cubiertos por una donación de parte del Banco Nacional. Muchas instituciones involucradas en apoyar a la Biblioteca Nacional reconociendo la importancia de este legado”.

Para la Biblioteca nacional, el legado de Julio Záchrisson representa “un compromiso y una gran responsabilidad ya que además de su custodia, somos responsables de su conservación y divulgación a los efectos de contribuir al estudio de Julio Augusto Záchrisson y de su obra”, afirma Brenes.

“Este es un sitio donde se encuentran las manos calificadas, las mentes especializadas para trabajar y proteger cada documento, garantizar su correcto tratamiento y su uso más apropiado”, agregó.

Desde su llegada, el legado Zachrisson ha recibido el tratamiento adecuado en cuanto a normas de preservación, para que este puede perdurar en la memoria histórica de todos los panameños. La presentación de este archivo es un primer paso en cuanto al deber de divulgar este patrimonio, acción siempre irá de la mano de los valiosos investigadores que consultan nuestras colecciones.

“Lo que se ha recibido va a requerir de un trabajo muy delicado, muy largo y muy extenso hasta que todos los documentos estén a disposición”, enfatizó Brenes.

La colección Záchrisson deberá ser registrada y catalogada para que pueda ser consultada. “Todo el material puede ser consultado in situ. Quisiéramos contar con los recursos y lo lograremos para más adelante, digitalizar el material que el convenio permita, por razones de propiedad intelectual, de manera que se puedan consultar a distancia”. Con esto se generará una fuente sumamente rica en conocimientos para investigadores, estudiantes y para investigadores de arte en torno a la obra de Záchrisson, para inmortalizar la obra de Záchrisson”. Para la directora de la institución , “ser los protectores y divulgadores del archivo personal de Julio Záchrisson es una responsabilidad que enaltece la misión de esta casa cuya misión es recuperar, preservar y divulgar el patrimonio documental de Panamá”.

La colección incluye cerca de 2 mil fotografías, en blanco y negro y a colores, libros que destacan el papel del panameño en la escena artística mundial, así como publicaciones que tuvo a bien ilustrar. Se cuenta con una extensa colección de catálogos de las exposiciones en las que participó, así como correspondencia personal, postales, bocetos, dibujos y algunas obras en aguatinta. También tiene material audiovisual en cds, cintas VHS, fotolitos y en otros formatos.

Ida Záchrisson de Castro, hermana del artista, en representación de la familia, agradeció a los presentes. “Gracias por todo. A todos los presentes, estoy muy agradecida y contenta de estar aquí. Muy orgullosa de mi hermano”.

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones