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Vamos, que agrupa a políticos electos por la vía de la libre postulación, no ha estado exenta de polémicas desde su estreno en el poder en julio de 2024.
Los diputados Betserai Richards y Manuel Samaniego o el propio líder de la agrupación, Juan Diego Vásquez, han protagonizado algunos de los más recientes señalamientos al colectivo.
Pero además del peso de la opinión pública, el comportamiento individual de cada miembro de la coalición ha provocado discrepancias sobre el funcionamiento interno del colectivo, que opera de facto como un partido político, pero legalmente no lo es.
Richards, quien es diputado por el circuito 8-6, vio su lealtad cuestionada por sus colegas de la coalición en medio de una reunión este 13 de enero, donde incluso sugirieron votar su permanencia o exclusión de la bancada legislativa que conforman.
Trasciende que el diputado fue electo por la vía de la libre postulación sin tener relación con Vamos, pero una vez inició su labor en la Asamblea Nacional, se sumó a los 19 diputados que sí lograron su curul a través de la coalición.
Richards puso en duda el compromiso de sus colegas de la bancada con el país, así como sugirió la existencia de dos bandos dentro del colectivo, uno bajo la influencia del líder Juan Diego Vásquez y otro que no, lo que provocó la confrontación.
El también diputado por el circuito 8-6, Manuel Samaniego, fue foco de cuestionamientos de la opinión pública y medios de comunicación por una supuesta relación que mantendría con su suplente, Nayelis González, según InformaT.
La diputada suplente figura en la planilla 002 del diputado como personal transitorio y se le han emitido pagos por el monto de $1.250, lo que ha generado críticas de diversos sectores. Hasta el momento, se desconoce si Vamos se ha reunido para abordar el tema.
La única aclaración la hizo el propio diputado a través de sus redes sociales, cuando publicó una fotografía de su certificado de soltería, emitido por el Tribunal Electoral.
Vamos también tiene presencia en los gobiernos locales y, precisamente, la representante del corregimiento de Juan Demóstenes Arosemena en Arraiján, Raquel Murillo, protagonizó uno de los pocos pronunciamientos de la coalición en contra de sus propios miembros.
La actitud de Murillo como autoridad de corregimiento ha sido fuertemente cuestionada, luego de que se difundiera un vídeo donde aparece negándole la oportunidad de comentar a una ciudadana por el hecho de residir en una vivienda alquilada.
Vamos lamentó “profundamente” la conducta de la representante, indicando en un comunicado que está “lejos de representar los valores de respeto, diálogo y servicio que defienden”.
A pesar de operar como un partido político, Vamos no lo es; algo que puede limitar su accionar respecto a sus propias autoridades electas.
Los exdiputados Juan Diego Vásquez y Gabriel Silva, líderes de la coalición, han reiterado en diferentes ocasiones que no escatimarían buscar la recolección de firmas para interponer revocatorias de mandato a aquellas autoridades que cometieran faltas a los compromisos del colectivo o a la ley.
Para las autoridades de Vamos, electas por la libre postulación pero respaldadas por la agrupación durante su candidatura y mandato, aplican las normas del Código Electoral respectivas a los candidatos por la libre postulación.