El Cemis, otra vez

Parece un caso de nunca acabar, pero así es la justicia panameña. El caso Cemis es considerado uno de los escándalos de corrupción más grandes de la historia del país. Por la presión pública el caso se reabrió, pero los magistrados de la Corte lo enterraron. Ahora hay una vista fiscal que pide el llamamiento a juicio a un expresidente y la Corte lo vuelve a frenar con leguleyadas. Así no camina la justicia. No podemos tener un sistema judicial que mire a conveniencia los casos. No se trata de decir que Martín Torrijos es culpable o inocente, sino de que llegó el momento de tomar una decisión y, sencillamente, la Corte volvió a evadir su responsabilidad. Y en el Ministerio Público, ni hablar. ¿Qué decir de la Asamblea Nacional? Menos. En pocas palabras, este caso se va a cerrar sin una decisión clara, afectando nuestra imagen como país. Y está claro que así pasa con los otros escándalos. Solo se reflejan en los medios, porque en la justicia no pasa nada. ¿Cómo podemos avanzar como país si esto está pasando en la justicia?