Este domingo 16 de febrero se efectuó en el boulevard Panamá Pacífico el XXV Festival de Cometas y Panderos, organizado por Aprochipa.
El no responder o hacerlo a cuentagotas es un patrón que empieza a observarse en diferentes instituciones del gobierno, que olvidan que se trata de información de carácter público. Esto sin contar lo desactualizada que se presenta la información en los portales gubernamentales. Gracias a notas internacionales hemos podido conocer de los contratos realizados por el Gobierno panameño con firmas cabilderas en Washington para enfrentar la arremetida del presidente de Estados Unidos, Donald Trump. También, por información de agencias noticiosas en el extranjero, nos enteramos de los contratos hechos por la Autoridad del Canal de Panamá con firmas estadounidenses por montos que, en su conjunto, suman al menos $9.5 millones. A lo interno de nuestro país, el silencio parece ser la tónica de la comunicación gubernamental. En un mundo cada vez más globalizado, donde los medios de comunicación y las redes sociales alcanzan un protagonismo sin precedentes, el silencio que guarda nuestro gobierno ante insistentes preguntas en busca de respuestas se interpreta como un “no me importa”. Se olvida de que estas contrataciones se pagan con los impuestos de todos los panameños y que su resultado afectará, para bien o para mal, el diario vivir de los ciudadanos. Para fortalecer la democracia se hace necesario favorecer la rendición de cuentas, la participación ciudadana y la libertad de expresión. Son estos pilaresfundamentales para construir un mejor Panamá.