Panamá nunca antes ha sido tan humillada

Tal como lo ha denunciado Frenadeso, “Mulino se comporta, no como el presidente de un país soberano, sino como el gobernador de una colonia yanqui, lo dijimos, desde antes de la llegada de Marco Rubio, ya se habían bajado los pantalones”.

Sin ninguna legalidad, el Gobierno de Mulino y el enclave oligárquico de la ACP han otorgado a Trump:

1- Una base militar y un campo de concentración con puerto y aeropuerto y visto bueno para la construcción de infraestructura por parte del Ejército de Estados Unidos en Metetí, Darién.

2- Aceptó recibir todos los migrantes que envíe Trump, indistintamente de su nacionalidad.

3- Ricauter Vásquez, el administrador del enclave oligárquico, promete optimizar el paso de buques de guerra de Estados Unidos por el Canal, es decir, lo decide la ACP, no el Gobierno, en un asunto que compromete la neutralidad del Canal y nos convierte en objetivo militar en esta pugna geopolítica.

4- Deciden entregar los puertos del Atlántico y Pacífico a Estados Unidos.

5- Deciden romper relaciones con China.

Sobre este quinto punto, cabe preguntarse ¿tiene Estados Unidos relaciones diplomáticas con China? La respuesta, SÍ. Estados Unidos tiene una embajada en Pekín y cuatro consulados en Guangzhou, Shanghái, Shenyang y Wuhan.

La República Popular China tiene una embajada en Estados Unidos y cuatro consulados en Nueva York, Chicago, San Francisco y Los Ángeles. Entonces, por qué se abrogan el derecho a definir las relaciones internacionales de Panamá.

Mulino no habla con la verdad. Es más, desde un medio de comunicación de España se plantea que Mulino envió un emisario, el vicecanciller, para pedir disculpas a Trump por la carta de Eloy Alfaro al Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas. Tampoco ha sido sincero con el pueblo panameño, de que más entregó a Estados Unidos en su reunión a solas con Marco Rubio.

Panamá nunca antes ha sido tan humillada ni ofendida. Volvemos a 1903. Los gringos exigen operación conjunta de la administración del Canal de Panamá y Mulino está dispuesto a ceder porque él es parte de este complot contra Panamá. Es decir, el Gobierno no hace valer nuestra soberanía ni defiende nuestro patrimonio. Este accionar de Mulino, Trump lo valora como una señal de debilidad, al señalar luego de la salida de Marco Rubio de nuestro territorio, “que no está contento”, exige más, ordenando prácticamente a Mulino que se comunique con él este viernes y anuncia la llegada del secretario de Defensa de Estados Unidos a territorio panameño. Mientras Trump nos agrede, el director de la Policía, Jaime Fernández, violenta ferozmente a una estudiante universitaria en medio de una acción de rechazo a la presencia de Rubio en nuestro país, allana ilegalmente las casas y encarcela a dirigentes estudiantiles y activistas de los movimientos sociales, a los cuales se les ha impuesto medidas cautelares.

Por su parte, la Asamblea que no se ha pronunciado sobre el tema, sigue avanzando en la imposición de nefastas reformas a la seguridad social. A tambor batiente han pasado tres bloques de reformas a la CSS. Son cómplices de Mulino al igual que las figuritas desempolvadas del establishment, partidos políticos tradicionales, seudoindependientes, gremios empresariales, opinólogos, etcétera. Los mismos que se fotografiaban con la exembajadora gringa y que permitían que actuará como procónsul.

Los patriotas seguiremos luchando en defensa de nuestra soberanía, por la abrogación del mal llamado pacto de Neutralidad, por una asamblea constituyente originaria y contra la oligarquía corrupta y sus políticos tradicionales que le roban al pueblo panameño su memoria histórica, así como quieren robarse la plata de la CSS.