• 30/07/2023 00:00

Panamá 30x30

“El Panamá 30x30 es una iniciativa clave para el aseguramiento de la vida de nuestros ecosistemas, [...]”

Panamá aumentó el 30 % de sus áreas marinas protegidas en junio del año 2021 y logró cumplir con la meta de la iniciativa climática global 30x30. Esta propuesta tiene como objetivo convertir el 30 % del planeta en áreas protegidas para el año 2030.

Esta meta hace parte de una estrategia para garantizar el sostenimiento de la vida de todas las especies de la Tierra, incluyendo la humana, elaborada por el Convenio sobre Diversidad Biológica (CDB) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).

Panamá se comprometió y avanzó, al aumentar esa protección del 30 % al 54.33 %, con el objetivo de proteger la biodiversidad amenazada por las actividades humanas no compatibles y la desconexión por falta de corredores biológicos, mitigar los efectos del cambio climático, al conservar áreas de captura de carbono que ayudan a disminuir inundaciones, erosión y altas temperaturas.

Hay el compromiso igualmente de garantizar los beneficios para la raza humana ofrecidos por la naturaleza en los ámbitos económicos, recreacionales y culturales. Ante tales compromisos, Panamá lleva adelante un riguroso plan de implementación de esta meta que busca esa conservación y mejorar los esfuerzos de gestión eficiente de las áreas protegidas existentes.

Más allá de los distintos escenarios donde se habla de este modelo de gestión, debemos integrarlo dentro de las propuestas para la recuperación económica, la conservación biológica y el aseguramiento del bienestar de las personas. En términos económicos la base sobre la que descansa la importancia de proteger la naturaleza para una economía próspera en América Latina, indica que “más de la mitad del producto interno bruto mundial depende directamente de la salud de nuestra naturaleza”.

Para un país como Panamá, cuyas principales fuentes de ingreso económico son actividades relacionadas con el Canal de Panamá, el agro y el turismo, la preservación y protección de las áreas naturales se vuelve entonces una tarea importante para la agenda de Estado.

Pero debemos pensar en modelos de desarrollo que incluyan soluciones basadas en la naturaleza, promuevan prácticas sostenibles entre sectores productivos del país y generen conciencia en una sociedad más consciente de los temas de índole ambiental.

También se necesita realizar enormes esfuerzos para que estos enfoques reduzcan la pobreza y la desigualdad, e integren de una manera efectiva a las comunidades que rodean estas áreas naturales. Así, se logrará que sean guardianes de su importancia biológica, pero también beneficiarios de lo que implica tener ecosistemas sanos, así como garantizar los mecanismos para que el conocimiento de las comunidades indígenas sea contemplado, sin dar lugar a la apropiación.

Estamos hablando de modelos que fortalezcan las áreas silvestres protegidas, ¡que les permitan funcionar de forma correcta!

Ante la situación mundial que se vive con la crisis climática y con los efectos devastadores que esta ocasiona, solo tendremos graves consecuencias, si no se actúa de manera urgente.

Estamos viviendo un periodo de alta importancia, que puede significar un espacio importante para la gobernanza ambiental de las áreas protegidas, que nos permita colocar al ambiente en el centro de la toma de decisiones.

Esta propuesta nos permite avanzar y ratificar que la vida de la humanidad depende de la conservación del medio ambiente. Gracias a ello, se producen suelos fértiles para la cosecha de los productos agropecuarios, el agua potable que consumimos, el aire puro que respiramos y otras condiciones necesarias para asegurar el bienestar de la vida humana.

Por eso su protección debe ser parte de una política de Estado con el compromiso permanente de las futuras administraciones. Y ese apoyo entusiasta de todos los sectores permitirá sumarse a la puesta en marcha y fiscalización de este compromiso con la Madre Naturaleza.

El Panamá 30x30 es una iniciativa clave para el aseguramiento de la vida de nuestros ecosistemas, de acuerdo con los compromisos globales asumidos y las grandes intenciones de Panamá por preservar su biodiversidad e impulsar el desarrollo sostenible. Invito a todos a sumarnos a este pacto por la naturaleza.

Educador y promotor social.
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