• 14/11/2017 01:01

¿Y ahora qué?

‘Me pregunto si [...] ¿Se le revierten a los Waked sus propiedades y se les reconoce indemnización?'

Con manos y sienes sudorosas, temblor en todo el cuerpo, los alabarderos de siempre, autodenominados ‘políticos correctos', corrieron a adorar al becerro de oro, símbolo eterno del imperialismo yanqui... Utilizando la unilateral y abusiva extraterritorial Ley Clinton, señalaron a los Waked como lavadores de dinero producto del narcotráfico, financistas de grupos terroristas como Isis y Al Qaeda, y cuanto endiabladamente se les ocurrió... Constituido por Abdul Waked por un lado, y por otro, Nidal Waked, totalmente sin conexión; sin embargo, los presentaron como asociados en la ejecución de acciones criminales. Al prohibirle a empresas norteamericanas desarrollar negocios con empresas de los Waked señaladas en la Lista Clinton, forzosamente se vendieron, cerraron, traspasaron todas las empresas, triturando así muchos años de esfuerzo con arduo y duro trabajo. No pretendemos levantar lástima hacia los Waked, como tampoco hacer defensa de hechos que hoy, luego de juicio en derecho, es evidente que es un caso de abuso imperialista, por decir lo menos, ya que solo un imperio tiene leyes que rebasan su frontera y aplican sin consideraciones legales ni en derecho, vulnerando la soberanía de países ‘amigos', lo que es en realidad lo que me ocupa y motiva estos comentarios. Solo un imperio, retratado en el pasado en novela titulada ‘The Ugly American', se abroga el derecho a sancionar, castigar, penalizar a un ser humano sin previo juicio ni derecho a presentar descargos en su defensa... Tal como reclamaron los abogados defensores, nacionales e internacionales de los Waked. Es más, el Gobierno norteamericano, ejerciendo su habitual prepotencia y arrogancia, negó la presentación de las supuestas pruebas que tenía para condenar a los Waked. ¿Es esto ejemplo de justicia, es esto ejemplo de democracia, es esto ejemplo del respeto que merecemos como país ‘amigo aliado'? Entiendo que contra Abdul Waked no existía siquiera ‘indictment'.

Percibo el Caso Waked como la excusa, la vía y el objetivo a Panamá país. Por razón de nuestras propias faltas, hemos dado pie a que del exterior se nos señale como país corrupto. Lo que fue por años práctica generalizada como las sociedades anónimas y el secreto bancario, de repente recibe el rechazo mundial y nos caen a sombrerazos con los mal llamados Panama Papers y Fonseca Mora. De acuerdo al registro de sociedades anónimas de 37 508 sociedades inscritas en 2010, hoy hay 5282, solo en el 2016 se disolvieron 15 353 sociedades anónimas. Aquí existen firmas de abogados haciendo lo mismo, más antiguas y más grandes que Fonseca Mora y no se les menciona ni ataca... Aquí el secreto bancario operaba hasta en bancos norteamericanos, con abundantes cuentas cifradas, de repente a ‘alguien' con mucho poder económico no le convenía económicamente la existencia en Panamá de tal fuerza económica fuera de su control... Y no me refiero al Gobierno norteamericano sino a los carteles financieros de países poderosos económicamente.

Pero nos estamos apartando de los comentarios y críticas, de lo que percibimos como imperialistas acciones emprendidas por el Departamento del Tesoro del Gobierno de EE.UU. en contra de Panamá y sus ciudadanos.

Tomen nota que por razón de esas acciones unilaterales y extraterritoriales; empresa que construye líneas de transmisión de importante generadora de energía a gas, se vio obligada a pagar 30 millones balboas de más para reubicar línea de transmisión que debió atravesar tierra propiedad de Waked, y con quien tiene impedimento de negociar por implementación de ley Clinton. El embajador Feeley, más que embajador, un metepata liso, hoy rehúsa dar declaraciones a la prensa, cuestionado por el resultado del juicio luego de sus declaraciones pasadas en donde señaló a los Waked como asociados a Isis y Al Qaeda. Impartiendo en conferencia de prensa, con arrogancia y prepotencia, órdenes al Gobierno y justicia panameña. No da la cara, me dicen unos que por vergüenza, otros que por cobardía. Por allí inventará un desayuno con algún político en carnavales, para lavarse algo el descrédito.

Me pregunto si como resultado de la eliminación por parte de la ‘justicia norteamericana' de los cargos a Nidal Waked y la aceptación de este de un solo cargo por supuesta facturación fraudulenta sin afectación económica a entidad alguna, ¿se descarta la ejecución de la ley Clinton? ¿Se le revierten a los Waked sus propiedades y se les reconoce indemnización?

Nos preguntamos... ¿y ahora qué?

Así lo percibo, así lo escribo.

CIUDADANO JUBILADO.

Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones