Una mirada al abandono histórico de la provincia de Colón

La provincia de Colón requiere en estos momentos de la mayor atención de los gobernantes; en ellos recae la responsabilidad de cumplir con las deudas históricas que en la era posinvasión han dejado muchos de los gobernantes, quitándole a los colonenses el derecho de encontrar la felicidad.

Guillermo Endara, Ernesto Pérez Balladares, Mireya Moscoso, Martín Torrijos, Ricardo Martinelli, Juan Carlos Varela, tuvieron la oportunidad de resarcir, con sus gestiones gubernamentales, las acciones esperadas por los colonenses por más de 25 años. Hoy, se ha logrado acercar a la dirección del país a un hombre representativo de las costas y montañas de esta olvidada provincia, líder político que luchó en demasía para lograr mejores días para los residentes de esas regiones olvidadas del territorio de Juan Materno Vázquez, José Juan Ceballos, Paulino Romero y Julio Góndola, entre otros.

Es evidente que la llegada al poder de Laurentino Nito Cortizo trajo esperanza a esta porción de tierra del país, y consigo, a cada uno de los habitantes de esta bendecida provincia. Lo cierto es que, se encuentra con una provincia lacerada, maltratada, olvidada y vilipendiada, la cual reclama acciones concretas para lograr la plena convivencia pacífica de los colonenses, haciendo eco del discurso pronunciado por el mayor Omar Efraín Torrijos Herrera, cuando estuvo al frente de la zona policial y luego fue ratificada, al estar al frente de riendas de esta nación.

Creemos que se debe validar el derecho legítimo de los ciudadanos al querer concretar la construcción del hospital, el derecho a recibir los beneficios de tener en su territorio el 58 % del Canal, los puertos más importante de la región, el ferrocarril interoceánico, Minera Panamá, las hidroeléctricas y termoeléctricas más competitiva del país, el aeropuerto y la Zona Libre de Colón; todo lo mencionado, ha de considerarse como un valor agregado, los cuales no se permean en los beneficios de la provincia y según nuestro parecer, llegó el momento de exigir el inicio de una mirada positiva a este territorio.

Señor presidente, nos sumamos a aquellas voces que creen en la CONCERTACIÓN, mas no en la INTIMIDACIÓN, de forma tal que comprendiendo usted y su equipo las genuinas exigencias de los colonenses, continúe haciendo las adecuaciones necesarias para lograr lo expresado por el líder del Torrijismo. Tenga la seguridad de que allí tendrá el apoyo de muchos ciudadanos, los cuales estamos consciente de que las fallas fueron encontradas; sin embargo, abogamos a que entre todos encontremos la solución a este emblemático abandono histórico.

Las luchas se ganan en las concertaciones, por lo que hoy se le hace el llamado a aquellas voces, que aún están convencidos, que, con gritos, piedras y acciones desestabilizadoras, lograran resultados positivos. No al vandalismo, a la desidia, desesperación y acciones que no representan a la mayoría de los colonenses; lo cierto es que queda la tarea de hacer lo correcto de parte y parte, y le tocará al equipo gubernamental sanear las afectaciones que han dejado otros gobernantes; y, a la población, decidir si permitimos que la ANARQUÍA enlode nuestro interés de ver mejores días para los colonenses.