Diseño es todo

El diseño es una disciplina que produce textos, imágenes, envases, perfiles de identidad a través de la planificación de aquello que caracteriza visualmente un concepto, objeto, servicio y hasta la personalidad de un ente o prácticas de organismos de cualquier naturaleza. Constituye un camino entre el arte y la comunicación, que acerca y establece nexos de diferentes tipos entre la gente para difundir información precisa o evocativa.

En aquellos países donde la actividad económica ha impulsado la publicidad y el mercadeo, se consolidó esta carrera, como herramienta anexa a la comunicación y pronto se vio rebasada por un escenario disímil, amplio, que le obligó a renovar sus esquemas, su ingeniería y adaptarse a los cambios. Hoy, ella acompaña múltiples procesos que definen relaciones con formatos diversos en la sociedad.

La ciudad capital ha sido testigo de una exposición, denominada Todo es Diseño es todo, organizado por Panamá Gráfico 2014, un colectivo de profesionales de este quehacer y que reúne en las salas del Museo de Arte Contemporáneo (MAC) una selección de trabajos de artistas de 22 países de Iberoamérica. Además, se exponen materiales dedicados al centenario del Canal de Panamá.

El diseño actual tiene múltiples facetas. Aquel esquema de portadas de libros, revistas y carteles ha sido superado y cada actividad de la vida contemporánea está identificada por la gestión de un experto que concibe creativamente una idea de la forma que va a adquirir y cómo debe ser identificada por la comunidad como algo único, novedoso, útil y sobre todo, con un papel en la cotidianidad.

Por esa razón, el menaje urbano integra componentes o se construye con elementos, a partir de desechos que se reciclan y reingresan a un uso práctico. Un ejemplo, son los grandes cubos que adornan la ciudad y rellenos de envases residuales y lavados que se emplean por segunda ocasión con otro propósito. Igual, materia prima de fibras vegetales que se emplean en la confección de un bauto para hacerlo más artesanal y reducir los precios.

Lo importante de algunos casos, es el objetivo de valorizar los aspectos ecológicos en la confección de materiales de toda índoles, bolsas para hacer el mercado, carguera para infantes o instrumentos varios; para trasladar tablas de surf, guardar utensilios; asientos de uso casero, en diferentes ámbitos; vajillas, juegos de té y hasta la interiorización de textos empleados con frecuencia en las redes sociales, aplicados a la señalización urbana.

Cada expositor tiene sus ideas específicas sobre temas muy variados. Hay la propuesta de un chaleco basado ‘en la musculatura femenina’ y que tiene bolsillos delanteros a la usanza de las costumbres del sembrador de papa andino o bolsas colombianas para transportar comida china y cartón corrugado para exportación de frutas. También se presentan mobiliarios para usos como colocar el pan o cajas de vino para mostradores en bares.

En el segundo piso del MAC están situadas varias exposiciones como aquella sobre la arquitectura del Canal de Panamá, otra de carteles y una idea de cómo organizar el escenario alrededor de las esclusas, que ha permitido concebir metáforas visuales en el contexto de este panorama interoceánico.

La exhibición incluye además un muestrario de propuestas locales en relación a la industria editorial, etiquetas, aplicaciones y objetos de uso tanto doméstico como de apoyo en oficinas, en la campiña y en un sinfín de lugares.

Por esto, los organizadores han concebido a estas estrategias de delinear y proyectar como un campo donde todo puede ser, surgir o ser modelado a partir de la imaginación y de la manipulación de la realidad para ser transformada en un mensaje del que se apropiará la comunidad y se integrará a su propia y enriquecedora cultura.

PERIODISTA