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- 03/05/2024 19:43
Carta al país
Estos últimos años en Panamá hemos sido testigos del absoluto deterioro de la política, los políticos y las instituciones de nuestro país. El nivel de crisis en el que estamos sometidos es propio de un sistema colapsado que exige un cambio, que puede ser a peor o a mejor a partir de mañana 5 de mayo.
Por ello son tan importantes estas elecciones. Porque, honestamente, el mandato del próximo gobierno será uno de los más difíciles de nuestra historia democrática, por la inestabilidad institucional, el nivel de endeudamiento y la desconfianza internacional que vivimos hoy.
A partir del 1 de julio, quién no tenga la capacidad para acordar, generar consensos o proponer soluciones a los problemas complejos que afronta el país, lo único que hará será hundir más a Panamá. Y por ese motivo, la complejidad de lo que viene para el país exige que sus gobernantes tengan la capacidad, la experiencia y la confianza, tanto en el interior de la República, como en el extranjero.
Uno de los primeros pasos que tendrá que hacer el próximo gobierno es gobernar con el ejemplo, a través de medidas de impacto que eliminen los privilegios que ahora mismo tienen injustamente la minoría al frente del poder. Hoy, hay demasiada gente que ha mejorado significativamente sus condiciones de vida gracias a aprovechar su posición, mientras que la gente honrada, que realmente es quién impulsa nuestro país, no llega a fin de mes.
Esto ha generado una grieta que parece insalvable si el comportamiento de los políticos continúa siendo el mismo. El compromiso debe ser, por tanto, que los servicios y las medidas para una buena vida, vayan para la gente. Que el estado y sus instituciones comiencen a estar al servicio de la gente y de sus necesidades.
Todo lo anterior no será posible ni realizable por una fórmula, ni por su equipo de trabajo. Cambiar Panamá exige que nos unamos todos remando en una misma dirección. Porque en verdad, lo que está en juego no es algo abstracto, no son las ideas grandilocuentes que tanto se repiten en campaña, lo que está en juego es cómo vas a vivir tu día a día los próximos 5 años, están en juego tus derechos y libertades, las de tu familia, las de tus amigos y las de tu comunidad. Panamá tiene grandes problemas como país, es cierto, hay corruptos, ladrones y mucha cantidad de sinvergüenzas. Pero, Panamá también tiene mucho potencial y futuro por delante.
Hagamos que el odio y el miedo dejen de dividirnos y encontrémonos este 5 de mayo en las urnas, como compatriotas que somos, para empezar a reconstruir este país que tanto amamos. Yo estaré ahí, emitiendo mi voto con esperanza, como espero que tú también lo hagas.
Hazlo por Panamá.