El calvario deportivo de la provincia de Veraguas

La provincia de Veraguas ha sido a lo largo de su historia, en diferentes y variadas disciplinas, una fábrica de excelentes deportistas, aunque en los de combates es donde mayormente han brillado.

Los luchadores Eduardo Campbell, Herminio Hidalgo y Alvis Almendra y la judoca Kristine Jiménez, todos medallistas en juegos Panamericanos, son la prueba más palpable.

Sin embargo, tampoco hay que olvidar a los muchachos de la halterofilia, la mejor y más abundante representación que, en la actualidad, tiene este exigente deporte a nivel nacional.

Entre ellos están Mariadni Batista, Kelly Aparicio, Jorge Medina, Ronnier y Juan Martínez, todos ganadores de medallas internacionales, sin olvidar a Rocío Navarro, quien diera muchos triunfos a Panamá.

La lista es mucho mayor porque hay otras actividades, pero la idea era solo mencionar algunos de los más representativos.

Pese a ello, la provincia caracterizada por ser la única con puertos en los dos océanos, sufre del mismo mal que la mayoría de las regiones del país, no cuenta con instalaciones deportivas.

Sus principales estructuras están siendo habilitadas o restauradas desde mucho antes que azotara la pandemia, y aún no hay fecha definitiva para sus entregas.

El instructor de fútbol Ramón Romero, coordinador del comité pro rescate de las instalaciones deportivas en Veraguas, explica en detalle, el vía crucis por el que se pasa desde hace algunos años.

“Las autoridades se han hecho invisibles, porque todas las instalaciones deportivas de la provincia están en un deterioro total, tanto así, que hemos creado este comité para unir a la provincia”, señaló.

Romero, exfutbolista e instructor de este deporte, dijo que el problema viene desde el gobierno de Juan Carlos Varela, y ha seguido con el de Laurentino Cortizo, porque tampoco ha dado respuestas.

“Es lamentable, porque el gobierno de Cortizo en vez de auxiliar al deporte, lo que hizo fue terminar lo hecho por Varela, al dejarnos moribundos”, sostuvo.

Explicó que los trabajos de restauración, remodelación o construcción tienen entre siete u ocho años y aún no tienen avances significativos por razones burocráticas, políticas o falta de compromiso.

Destacó que los trabajos iniciados en los distritos de La Mesa, La Palma, San Francisco y Calobre tienen unos siete años, en tanto que los de Santiago (Toco Castillo, Omar Torrijos y Eduardo Campbell), un poco más de tiempo.

Romero contó que en el corregimiento de Santiago hubo un proyecto de 12 minicanchas, donde la empresa constructora entró, tomó un adelanto del 20% del trabajo y, literalmente, destruyó el área y luego se fue.

También se contrataron empresas en los distritos de San Francisco, La Mesa y Las Palmas para trabajar en tres canchas de fútbol, tomaron el adelanto correspondiente e igual que la otra, dejaron los terrenos inservibles y se fueron.

“Eso ahora mismo parecen pistas para la práctica del autocross”, dijo.

“Muchas de las empresas fueron ficticias, creadas solo para cobrar los adelantos tras presentar los permisos de construcción. Así se manejaron las cosas durante el gobierno anterior”, recalcó.

Romero precisó que al entrar el actual gobierno hubo un impase por el asunto de la pandemia, pero después de la misma poco se ha hecho y tanto canchas como coliseos, siguen sin poder utilizarse.

Llamó la atención de que ningún gobierno hasta ahora ha tomado en cuenta al atletismo, que utilizaba la pista del Toco Castillo, y la natación, cuya piscina está tan deteriorada que se le caen los azulejos y ornamentales.

“El atletismo no ha sido tomado en cuenta para ninguna construcción y en el Toco, donde practicaban, se desapareció la pista, y ahora entrenan en pésimas condiciones alrededor de la Escuela Normal”, dijo.

“No es que no haya lugar para construir, porque enfrente del parque Santiago Apóstol hay once hectáreas, donde fácilmente se podría levantar una ciudad deportiva”, matizó.

Seguidamente explicó las condiciones y avances en que se encuentran algunos de los trabajos.

“La remodelación del gimnasio Eduardo Campbell estuvo a cargo de una empresa a la que hubo que cambiar por incumplimiento, luego los funcionarios de Pandeportes se encargaron y lo que hicieron fue un total desastre”, aseveró.

En cuanto al Toco Castillo tiene avances del 48.37% después de ocho años de trabajos, y tiene una adenda de extensión refrendada para entregar el proyecto completo el 26 enero de 2024.

Tienen prevista la entrega del tanque de agua de reserva y la pintura exterior para este 15 de octubre, la culminación de techos y graderías para el 31 de octubre próximo, y la de otro sector de palcos y graderías para noviembre.

“Lo más probable es que la empresa no pueda entregarla para enero de 2024. Si usted pasa por allí, observará que hay muy poco personal y así no se puede avanzar”, dijo.

“Desde el inicio de este gobierno, se les pidió que cambiaran a la empresa encargada del Toco Castillo porque no era responsable, pero la mantuvieron y allí está sin cumplir, aduciendo una serie de problemas”, abundó.

Romero también apuntó otras instalaciones, que deben entregarse a mediados del próximo año, pero eso será posible si las autoridades locales y nacionales están pendientes de que las empresas cumplan con el calendario.

En esa línea están proyectos en Calobre, Santa Fe, San Francisco, Cañazas y La Mata, mientras que dos complejos deportivos en La Mesa y Las Palmas, esperan su continuación, el primero, y una empresa interesada en el otro.

En Soná, la Dirección de Asistencia Social del ministerio de la Presidencia, inició unos trabajos en el campo de pelota, pero en el de fútbol contrató a una empresa que lo dejó a medio camino y hoy la cancha se deteriorara, porque se usa sin control ni mantenimiento.

“Aquí nos preguntamos por qué nuestras autoridades y diputados no han hecho algo por nuestro deporte, pero se acerca la política y por aquí los volveremos a ver”, concluyó.