Este viernes 20 de diciembre se conmemoran los 35 años de la invasión de Estados Unidos a Panamá. Hasta la fecha se ignora el número exacto de víctimas,...
- 27/01/2024 00:00
- 26/01/2024 19:22
El Ancón o el cerro Ancón, se eleva con orgullo en el corazón de la ciudad de Panamá y separa geográficamente la brecha del Canal de Panamá y la ciudad. La elevación de 200 m de altura se erige como un símbolo icónico de belleza natural, significado cultural e inspiración nacional.
La historia del cerro Ancón es tan encantadora como su majestuosa presencia. Tiene un extenso trasfondo histórico que abarca siglos. Para la ciudad, puede ser considerado como un sitio fundacional, al ser el lugar hacia donde se traslada la nueva ciudad de Panamá el 21 de enero de 1673. Su nombre proviene del “Sitio del ancón”, en referencia al ancón (ensenada pequeña en que se puede fondear) que se formaba en la costa del Océano Pacífico. Se decidió reconstruir la nueva ciudad justo al lado del cerro, pues en sus faldas corrían chorros de agua natural, esencial para el establecimiento y desarrollo de la nueva ciudad. Incluso también es el lugar desde donde se retrata las primeras imágenes, grabados y fotografías de la ciudad.
El cerro Ancón ha sido testigo de diversas transformaciones de la ciudad, modelando su paisaje y dejando huella en los alrededores. Con la transformación de la Zona del Canal, el cerro Ancón fue incluida en ella, adquiriendo un simbolismo y un verdor característico de los paisajes complementarios de la ciudad jardín adquiriendo un aspecto selvático y de tupida vegetación. En la cumbre del cerro Ancón ondea la bandera de Panamá desde el 1 de octubre de 1979 cuando entraron en vigencia los tratados Torrijos - Carter. También ha sido inspiración para poetas y artistas cuyas obras son parte del acervo artístico y literario nacional. Reconociendo su importancia cultural y natural, el cerro Ancón fue designado Patrimonio Histórico Nacional, consolidando aún más su estatus como un hito preciado y venerado en la historia de Panamá.
Hoy, el cerro también convoca a turistas, deportistas, locales curiosos, aventureros, entusiastas de la fotografía y la naturaleza a embarcarse en un recorrido memorable hasta conquistar su formidable cumbre. Un sendero donde la tranquilidad de la naturaleza armoniza con el bullicio de la ciudad y donde el encanto del trasfondo cultural de Panamá se despliega en el contexto de un entorno tropical.
El Cerro Ancón tiene una gran importancia ambiental como hito natural de la ciudad, nombrada “Área Protegida y Reserva Natural de Panamá”. Su ecosistema único y sus características geológicas se suman a la biodiversidad general de la región. Alberga una variedad de especies de plantas tropicales que se han adaptado a las condiciones presentes cercanos al ámbito urbano. Sus bosques proporcionan un hábitat para la vida silvestre. En general, la conservación del Cerro Ancón es esencial para preservar el delicado equilibrio del ecosistema y garantizar la sostenibilidad de los recursos naturales. Al reconocer su importancia ecológica, el cerro Ancón también nos recuerda la necesidad de preservar y proteger nuestro patrimonio natural para las generaciones futuras.
El ecosistema del Cerro Ancón alberga una amplia gama de especies que se han adaptado a su entorno poco convencional. Además, en los bosques de la montaña se pueden observar diferentes especies de aves. Por último, también habitan diversos reptiles, anfibios e insectos, contribuyendo a su rica biodiversidad. El delicado equilibrio de especies dentro del ecosistema del cerro Ancón resalta la importancia de preservar y conservar este monumento natural asegurando que las generaciones futuras puedan seguir disfrutando del esplendor de este icónico cerro.