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Actualizado
- 24/07/2024 00:00
Creado
- 23/07/2024 19:39
Empresas tecnológicas son las primeras en tomar en cuenta a personas de la tercera edad en sus equipos de trabajos, mientras que diferentes estudios demuestran que no existe una relación entre la productividad y la edad
El sector de la tecnología le abre las puertas al mercado laboral a la población mayor de 50 años y le dan valor a su talento y conocimiento tecnológico. A diferencia de lo que se cree, la atención de las compañías latinoamericanas que conforman este ámbito se encuentra en las personas adultas, y con diferentes iniciativas en donde capacitan y aseguran plazas de trabajo para estos están haciendo la diferencia en la transformación tecnológica.
Una de estas es SilverTech, programa realizado en Argentina que cuenta con más de 2.000 personas en formación y más de 60 personas que han logrado mejorar su situación de empleo así como más de 1.300 que han podido afianzar sus capacidades digitales gracias a esta iniciativa.
Con el lema ‘más talento, menos prejuicios’, este proyecto del BID Lab, Eidos Global y Diagonal Asociación Civil, cuenta con socios donantes como Accenture, Microsoft, Red Hat y Salesforce, cuatro de las compañías de tecnología más influyentes en la actualidad, y que también le da la oportunidad a estas personas de incorporarse a sus equipos de trabajo tras terminar los cursos de SilverTech, si cumplen con lo requerido por estas empresas.
Actualmente, el programa cuenta con ocho cursos que las personas pueden escoger, desde Emprender en la era de la inteligencia artificial” hasta “Introducción a la programación”. Todos son completamente gratuitos y online, pensados en potenciar las habilidades digitales y dar una oportunidad a este tipo de personas a incorporarse a los equipos de trabajo de empresas que requieran de estos servicios.
Además, a través de la comunidad que forman las personas y las compañías involucradas en SilverTech, servirá para crear una diversidad etaria en el mundo corporativo y organizacional de la tecnología, integrando a talento con 50 años o más a puestos de trabajo de estas empresas.
¿Qué dice la ciencia?
Para las empresas de hoy en día, la edad es uno de los factores cruciales en la búsqueda de talentos. De hecho, se cree que entre más joven es mejor pensando en la capacidad de producción promedio de las personas, sin embargo un estudio publicado en el New England Journal of Medicine señala que el potencial productivo de los seres humanos está al tope entre los 60 y 70 años.
Este mismo estudio destaca que la segunda etapa más productiva es desde los 70 a los 80 y la tercera entre los 50 y 60 años. Para determinar esto se tomó como referencia a ganadores del Premio Nobel, que sumaron una edad promedio de 62 años, así como los presidentes de las compañías más prominentes en el mundo, con una edad promedio de 63 años.
A pesar de los resultados, también se señala en el estudio que estas son sólo estimaciones y no tienen “un rigor absoluto”.
También, cabe recalcar que es en la tercera edad cuando pueden empezar a surgir enfermedades que deterioran el funcionamiento del organismo y el estado cognitivo de las personas, además, es durante estos años que la lucidez de las personas empieza a aminorarse.
Un artículo de la revista Science, plantea la pregunta: ¿cuándo alcanzamos nuestra plenitud intelectual? El mismo destaca que el cerebro desarrolla mejor el procesamiento de la información entre los 18 y 19 años, la memoria a corto plazo alcanza su cúspide a los 25 años pero otras habilidades como comprender las emociones ajenas, el vocabulario y la comprensión de causa-consecuencia no llegan a su pico hasta los 40 o 50 años.
Por otro lado, el científico Joshua Hartshorne estudió este fenómeno a fondo en una investigación durante el 2015, en la cual evaluó a más de 48.500 individuos mediante encuestas.
El experto llegó a la conclusión de que hay habilidades relacionadas a la inteligencia que tienen su punto máximo después de que las personas culminan la secundaria, mientras otras se quedan estancadas en la juventud; no obstante, también halló que hay capacidades que no llegan a su límite hasta los 40 años o después y muchas otras que no aparecen hasta la tercera edad.
De esta manera, la inteligencia fluida tiene un punto máximo en las edades de la juventud pero la inteligencia cristalizada, se adquiere a través de los años, es lo que determina Hartshorne.
Por esta razón las habilidades de una persona no solo deben ser determinadas por su edad, pues existen diferentes características que pueden ser desarrolladas en las distintas etapas de la vida.
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