Ciclistas, atletas, patinadores y paseantes de la capital colombiana tienen una cita infaltable desde hace 50 años: la ciclovía de los domingos y festivos,...
- 18/08/2018 02:00
- 18/08/2018 02:00
A mi niña Alessandra Monterrey Santiago
Dicen los aficionados al misterio que fue con la fuerza divina de sus piernas
Y no con sus cabellos que Sansón derribó el templo de los filisteos.
Dicen los filósofos que solo con la ayuda de sus músculos gemelos
Pudo Sísifo mover su roca una y otra vez hasta la cima. Y también se cuentan
Las proezas de los Rarámuris, el pueblo de los pies de aire,
Que corriendo sobre el viento van y vienen a través de la sierra Tarahumara;
Y no olvidemos el gran salto,
El dorado salto de Irving Saladino,
No olvidemos que a pesar de sus misiles
El coyote siempre fue vencido por las patas del correcaminos.
¿Te das cuenta, Alessandrula?, tantos galardones y medallas se les deben a las piernas,
A muchas piernas en el mundo, pero no a las mías.
A las mías les adeudo mi metro ochenta y cuatro de estatura,
El calambre repentino de las madrugadas,
Los pantalones cortos,
Los pantalones largos,
Los goles de chiripa,
El autobús que nunca alcanzo en medio de la lluvia,
La noche que andando sin parar durante horas
Me salvaron de morir de frío en Luxemburgo.
Y también cuando se enredan en tu cuerpo,
Cuando trepan en ti como la yedra sobre la pirámide,
Cuando tiran de ti como las jarcias de un trirreme
Y tu cuerpo cual vela se despliega en la noche
Y un viento de lejanos cerros te va llenando de cocuyos
Y de hojas,
Somos un barco al que le ha brotado un guayacán en medio,
Atravesamos la noche con la luz de nuestras flores,
Somos un faro vagabundo en la tormenta,
La cola de un cometa
Que se va llenando de pájaros hasta que aparece la mañana.
Y es una mañana en Macedonia, Alessandrula,
Hay muchas piernas y barrigas frente al Orhid,
Hay muchísimas palabras en el aire,
Hay una luz tan indecisa sobre el agua
Que me hace recordar los mediodías
En que mis piernas flacas
Continúan enlazadas a las tuyas,
Y somos después de nuestro viaje
Como un pajarito empapado de rocío
Sobre un enorme cable de energía.
JHAVIER ROMERO
Escritor
Poeta, dramaturgo, director de teatro, actor, músico y profesor. Premio Ricardo Miró 2017, sección Poesía por el poemario ‘La brújula del invierno'. En 2015 ganó el Premio Escena en tres categorías.
Ha publicado en México, Venezuela, España, Cuba, Luxemburgo e Italia. Su libro ‘Sensación de la lluvia en los zapatos' (Poemanía) fue publicado en Argentina.
El poema ‘Mis piernas flacas en Macedonia' está incluido en ‘La brújula del invierno', libro presentado el pasado jueves en la FIL Panamá 2018.