La falta de ‘parking' casi trunca un premio Miró

Actualizado
  • 19/10/2017 02:01
Creado
  • 19/10/2017 02:01
Manuel Paz dio vueltas por el Casco Viejo y no encontraba estacionamiento cerca ni lejos del INAC. A minutos del cierre del concurso, cuando se marchaba sin cumplir su misión, alguien lo llamó

El día en que el notario mencionaba su nombre, Manuel Paz estaba celebrando su cumpleaños 42. Eran pasadas las siete de la noche de este lunes. Se propuso mantenerse ocupado todo el día para no pensar en el premio.

No era la primera vez que Paz participaba en el Concurso Nacional de Literatura ‘Ricardo Miró'.

A unos minutos para las ocho, recibió una llamada del dramaturgo Arturo Wong, quien mereció el premio Miró en Teatro y en Poesía el año pasado. Su familia se enteró del premio en ese momento.

Tres días después, Paz recuerda cómo alcanzó a inscribir su propuesta y concluye que fue obra de los ángeles.

‘A mí me llamó el amigo Arturo Wong para decirme que había ganado el premio Ricardo Miró',

MANUEL PAZ

ESCRITOR

El concurso cerraba el viernes 30 de junio a las cuatro de la tarde. Hasta esa hora, los funcionarios del Instituto Nacional de Cultura (INAC) recibían los manuscritos.

Paz tomó su auto y se enrumbó hacia el Casco Viejo con el tiempo en su contra. No era desconocido para el escritor que esta zona de la ciudad tiene escasos estacionamientos.

‘Le di una vuelta a la manzana y no encontré dónde estacionarme. Le di una segunda vuelta y luego, una tercera', comenta a La Estrella de Panamá.

Cuando terminaba un tercer recorrido por la misma área, una persona le dijo que esperara, que ya se marchaba. Así fue como Paz pudo anotar el libro ‘Autopsia psicológica' en el concurso, que este año celebra 75 años de creación.

EL PROCESO

Paz no es de los escritores que escribe un libro en pocas sentadas.

Sus obras parten de una noticia de un diario. A esa idea le va dando forma en su memoria hasta que ya puede ponerla en la computadora.

‘Autopsia psicológica' no es una propuesta de denuncia de los problemas sociales que enfrenta el país.

‘Soy reacio a escribir ese tipo de temas, aunque la temática de los años anteriores tiende a premiar ese tipo de libros', señala.

El dramaturgo detalla que presentó una historia cotidiana, ‘de esas que pasan inadvertidas por la mayoría de la población'.

En cuanto a la creación misma, ésta tampoco tiene un periodo definido para comenzar y concluir una obra. ‘Desarrollo un tema y lo dejo reposar. De la nada lo retomo, y puede ser a cualquier hora del día o de la noche. Por ejemplo, el segundo acto de ‘Autopsia psicológica' lo terminé en una noche', cuenta.

Paz recuerda que desde 2010 se propuso ganar el premio Miró. ‘He mandado como tres propuestas, no todos los años', afirma.

HOMBRE DE TEATRO

Paz inició en las tablas en 2001, con la comedia ‘Julia la Mentirosa' para la compañía teatral de ABA, de la familia Horta.

Al año siguiente, escribió su primera propuesta para niños llamada ‘La princesa y la estrella', obra que luego fue renombrada como ‘El regalo prometido'.

En los años posteriores, se incorporó como actor de teatro y televisión en más de cincuenta proyectos.

Entre las producciones en que participó Paz están:

‘El Coronel no tiene quien le escriba', ‘Experto en mujeres', ‘Locas de remate', ‘Noches de amor efímero', ‘Un cuento de Navidad' y ‘Apostando a Elisa'.

Paralelo a la dramaturgia, incursiona en el movimiento de microteatro, adaptando sus la propuesta ‘Cuentos de terror' a ‘Micro obras de terror'. Actualmente, Paz es uno de los guionistas de Teatro Bambalinas.

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