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- 29/10/2022 17:10
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El camino de la igualdad de género en América Latina aún parece un trayecto de espinas. Una montaña en la que, los viejos códigos socioculturales aún pesan. Así lo señaló un informe presentado en septiembre por ONU Mujeres y el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas: “Estamos a siglos de alcanzar una plena igualdad de género”. Esta afirmación, que enciende las alarmas, es también una invitación a evaluar otras posibilidades y espacios en los que, con estrategias e iniciativas se iniciaría la transformación.
El reporte también ahonda en que “al ritmo actual, no se podrá cumplir el ODS 5 —lograr la igualdad de género— para 2030”. Mientras que Sima Bahous, directora ejecutiva de ONU Mujeres, declaró: “Este es un punto de inflexión para los derechos de las mujeres y la igualdad de género a medida que nos acercamos a la mitad del camino hacia el 2030. Es crucial que nos movilicemos ahora para invertir en las mujeres y niñas, y recuperar y acelerar el progreso. Los datos muestran regresiones indiscutibles en sus vidas —en cuanto a ingresos, seguridad, educación y salud— que han empeorado por las crisis mundiales. Cuanto más tardemos en revertir esta tendencia, más nos costará a todas y todos”.
Para Paula Villaseñor, directora de Comunicación Corporativa de P&G para Centroamérica y el Caribe la visión de equidad e inclusión “es crear un mundo donde las oportunidades para niños y niñas sean iguales, donde cualquier persona pueda tener un sueño, y saber que se puede lograr. Eso no se puede hacer si el mundo no es equitativo”.
La ejecutiva con la que platicamos durante su participación en el evento de Real Change with MARC: Reimagining Gender Equity, organizado por P&G y Catalyst -una cita que abordó las implicaciones de las visiones tradicionales de la masculinidad en el ambiente laboral, buscando un trabajo en conjunto para crear una cultura de cambio- considera que es posible involucrar a los hombres en este cambio de mindset, desde el ámbito corporativo.
“Los hombres se han integrado por consecuencia. Ha sido poco a poco, gracias al empuje que viene desde las mujeres y nos hemos dado cuenta en el camino de que los hombres también necesitan herramientas como la creación de espacios donde puedan ser vulnerables y decir: ‘Yo no sé cómo ser un aliado’”.
“Si los hombres no se hacen conscientes de su privilegio, de su rol en la equidad y de su vulnerabilidad, no hay manera de que se suban al tren de la equidad”, reafirma, al señalar, que hace falta mucho más trabajo y más representación de mujeres en posiciones de liderazgo “porque no estamos ni cerca del 50%. Faltan más hombres feministas, que lo sean abiertamente y que entiendan lo que es el feminismo”.
Villaseñor es incisiva al apostar por el feminismo como catalizador. “Sí, es necesario el feminismo, porque es la plataforma desde donde se construye la equidad. Es necesario que haya muchas más políticas que reconozcan la violencia institucional, doméstica y social hacia las mujeres, y la ataquen desde la política pública. También se necesita de prácticas laborales que integren la inclusión de forma consistente”.
“La masculinidad tiene que ser una construcción que venga de la inclusión, que es única y se expresa de muchas formas. Pensar que el hombre es de una forma es la caja del machismo, pero si entendemos la masculinidad como algo inclusivo y abierto, existe un espectro más amplio de la misma y esa es la conversación que nos deja esta charla”, remarca.
En otra línea, la representante regional de P&G analiza la alianza con Catalyst. Todo inició "dando oportunidades a las mujeres, luego incluyendo prácticas de no discriminación por preferencias sexuales, la integración de personas con discapacidades físicas y cognitivas, y la inclusión racial".
"En paralelo, empezamos a pensar cómo, nosotros como empresa, somos una fuerza para el bien hacia el exterior y eso tiene que ver con nuestras marcas, cómo hacemos comunicación a través de ellas. Las narrativas que ponemos afuera, son parte de la cultura de las comunidades donde existimos. Esto lo ponemos en práctica delegando a personas diversas roles como camarógrafos, productores y guionistas, porque si solo dejamos a hombres blancos heterosexuales las narrativas siempre van a dirigirse hacia un lado y lo que buscamos es crear plataformas donde haya personas de diferentes culturas haciendo anuncios desde su construcción de la realidad. Este es el caso de MARC, y la alianza con Catalyst, que tiene como objetivo dar estas herramientas y crear conversaciones. Al traer un evento como Real Change with MARC a Panamá lo que queremos resaltar es que los hombres son una parte de la equidad y la inclusión", concluye.
Desde el documento de ONU Mujeres, reiteran que "la cooperación, las colaboraciones y las inversiones en la agenda de la igualdad de género, incluso a través de una mayor financiación mundial y nacional, son esenciales para rectificar el rumbo y volver a poner a la igualdad de género en marcha".