Rincones 'clubhouse', un faro para la juventud

La Red Nacional de Rincones Clubhouse de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (Senacyt) celebró recientemente su segundo aniversario enseñando ciencia a jóvenes de entre 13 y 18 años en comunidades vulnerables.

Los rincones clubhouse se erigen como un espacio luminoso que empodera a los jóvenes al facilitar el aprendizaje de disciplinas Steam (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemática) en entornos seguros fuera de las aulas.

La iniciativa clubhouse surgió en 1993 en colaboración con el laboratorio de medios del MIT, en Boston, Estados Unidos, y responde a la necesidad de proveer espacios de desarrollo para adolescentes interesados en las ciencias y artes.

Este modelo de aprendizaje está diseñado para empoderar a la juventud, apuntando a que sean más capaces, creativos y seguros en sí mismos, a través de cuatro pilares fundamentales: aprender diseñando, seguir sus intereses, construir comunidad y nutrir respeto y confianza.

Los rincones clubhouse cuentan con equipos de alta gama para unir la tecnología con la imaginación. En sus laboratorios podemos encontrar computadoras, cámaras digitales y 360°, impresoras 3D, robots, gafas de realidad virtual, producción de sonido, entre otras herramientas.

A Panamá llegaron los dos primeros rincones clubhouse en 2004: Parroquia de Fátima en El Chorrillo y el Fe y Alegría, en El Ingenio.

Más adelante, en 2021, la Senacyt creó la Red Nacional de Rincones Clubhouse con el propósito de expandir de manera sostenible este modelo de aprendizaje. Hoy la red cuenta con ocho rincones clubhouse en el país.

Aunque los rincones clubhouse tienen como principal enfoque el desarrollo de habilidades Steam entre los jóvenes, se le concede igual importancia al fomento de habilidades blandas y sociales.

El énfasis recae en el trabajo en equipo, la comunicación, la resolución de problemas y la gestión de proyectos, competencias esenciales que los participantes adquieren durante su experiencia en los rincones.

Geraldine Pinzón, miembro del Rincón Clubhouse El Valle, cuenta que en su clubhouse conoció a mucha gente distinta a ella, con nuevas ideas que la dejaron asombrada. Destaca que había pintado toda su vida y que gracias a sus compañeros y mentores puede exponer su arte.

Añade que es una “oportunidad grandísima la que brindan los rincones clubhouse ya que te ayudan a conocer personas con objetivos similares en tu entorno, además de promover el crecimiento de tu comunidad y tu desarrollo como individuo”.

Geraldine exhorta a los jóvenes a aprovechar al máximo este proyecto transformador, expresando su deseo de convertirse en mentora para contribuir al desarrollo continuo de otros.

Actualmente, el proyecto de la Senacyt ha beneficiado a más de 300 jóvenes pertenecientes a los diferentes rincones clubhouse. Muchos se han destacado internacionalmente.

El equipo Coding Queens, compuesto por miembros del Clubhouse Fundesteam, fue semifinalista de la división junior de la competencia Technovation Girls, entre equipos de todo el mundo.

A su vez, el Rincón Clubhouse Explora obtuvo el tercer lugar en el World Robot Olympiad (Olimpiada Mundial de Robots) con el proyecto Biobob, un robot pensado para limpiar derrames de petróleo.

Otro caso de éxito es el de Sofía Rodríguez del Rincón Clubhouse El Valle. Sofía irá a la NASA con el programa 'She is Astronaut'. Pasará una semana de inversión académica en el Space Center Houston de la NASA.

En las comarcas, los rincones clubhouse también están presente. Gabriel Contrera de RCH Jakwe Ni Nuäre, ubicado en la comarca Ngäbe Buglé, ganó una beca y se encuentra estudiando agronomía en Brasil.

Por otro lado, los chicos del Rincón Clubhouse Mentes Brillantes completaron el programa de Meta 'Engineer for the Week', en el que aprendieron a programar para generar un impacto real en sus comunidades.

En el RCH Sandbox, los chicos no se quedan atrás. En junio de este año, nueve integrantes culminaron con éxito varias pasantías en diferentes organizaciones de la industria creativa en el país.

Preocupados por el medio ambiente, los chicos del RCH La Chorrera presentaron un proyecto de conservación ambiental gracias al cual ganaron una convocatoria internacional de activismo juvenil.

Y los mentores también brillan. Sara Peña, coordinadora del Clubhouse Fundader, en Panamá Oeste, se convirtió en Micro:bit Champion 2023. Ahora, espera poder enseñar código de manera innovadora a sus alumnos en el clubhouse.

La Red Nacional de Rincones Clubhouse se propone seguir rompiendo barreras educativas con programas gratuitos.

Lisa Cook, directora ejecutiva de la Red Internacional The Clubhouse Network, comparte una visión optimista sobre el futuro de Panamá en las disciplinas Steam.

Para Cook, el impacto de los esfuerzos actuales es “poderoso e impactante” y subraya la importancia de mantener a la juventud a salvo, ofreciendo entornos extraescolares que fomenten su desarrollo personal y comunitario.

Estrategias como esta son clave para combatir problemas comunes a los que se enfrentan los jóvenes, como el pandillerismo y el consumo de sustancias.

Los rincones clubhouse están comprometidos con los adolescentes a nutrir sus intereses, crear espacios seguros y darles guía a través de mentores.

En tanto, Nicole Lasso, coordinadora de la Red Nacional de Rincones Clubhouse de la Senacyt, agrega una perspectiva inspiradora al imaginarse cada rincón clubhouse como un “laboratorio del MIT en Panamá”.

Destaca que, mediante este proyecto, se abren amplias posibilidades para los jóvenes, proporcionándoles las herramientas necesarias para construir el camino hacia sus sueños.