El barrio de Chualluma en Bolivia, es único en la ciudad de La Paz ya que todas sus paredes están pintadas de colores que resaltan los rostros de las cholas,...
Difusión: clave para la inversión en ciencia
- 22/10/2016 02:01
- 22/10/2016 02:01
La tarde del jueves, en el marco del XVI Congreso Nacional de Ciencia y Tecnología, se llevó a cabo una mesa redonda titulada ‘¿Cómo atraer nuevas fuentes de financiación para la ciencia en Panamá?
Para iniciar, el actual Secretario Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, Jorge Motta, ofreció un marco histórico acerca de la inversión en ciencia en el país, para luego retratar la actualidad.
Algunos desafíos que enfrentan los investigadores actuales son la irregularidad de la inversión, —proyectos a largo plazo de repente se quedan sin dinero—, y el hecho de que el aumento en el producto interno bruto nacional no se vea reflejado en los fondos destinados a la investigación y desarrollo (I+D) por parte del estado.
Para Eloy Fisher, de la Contraloría General de la República deben existir métricas de la efectividad del financiamiento a la ciencia desde el sector público, pues el estado debe ser capaz de entender y contabilizar claramente lo que se hace en I+D.
‘Debemos darle una voz más alta a la Senacyt en la administración pública panameña, para que pueda decir hacia donde van las ciencias en Panamá', señaló Fisher.
LA EMPRESA PRIVADA
Por otro lado, la carga de la inversión en actividades de ciencia y tecnología la lleva el gobierno, lo cual, según Motta, no es sostenible en el tiempo. En países más desarrollados, un gran porcentaje de esta inversión lo aporta la empresa privada.
Con esto coincidió Galileo Solís, de la división de competitividad y desarrollo del Banco Interamericano de Desarrollo. ‘Tiene que entrar el sector privado en la política de inversión en educación, ciencia, tecnología e industria', expresó.
Para él es necesario convencer a este sector de que invertir en I+D es rentable. Sin embargo, para ello se deben presentar evidencias.
‘Las empresas que invierten en I+D tienen un éxito diferencial, pero pocos empresarios conocen esas estadísticas', expresó el empresario Diego Eleta en este sentido. ‘No tenemos la educación en ciencia para apreciar el valor de la inversión en I+D'.
Por su parte, Carlos Ordoñez, profesor de física de la Universidad de Houston propuso la creación de centros regionales como una posible avenida para captar fondos internacionales.
Una de sus sugerencias fue el desarrollo de un centro de investigación avanzada y formación en el análisis cuantitativo en Panamá. Este podría satisfacer las necesidades del país y la región en temas que requieren de matemáticas aplicadas. Por ejemplo, la oceanografía, el cambio climático, la ingeniería civil y geofísica, redes, computación o biomedicinas, entre otros.
‘Hay potencial para un centro de este tipo y sería mucho más fácil captar fondos internacionales, pero pensándolo como sociedad', destacó.
DIVULGACIÓN
El tema en el que concordaron la mayoría de los especialistas fue la necesidad de divulgar el trabajo que hacen los científicos locales. Esto permitirá que la sociedad comprenda el valor de invertir en la investigación y lo exijan a los líderes.
Motta mencionó una encuesta local en la que alrededor del 60% de las empresas expresó que no era necesario innovar.
‘Todos deben hacer la tarea de comunicador, sobre el impacto diferencial que puede tener la investigación y el desarrollo en la competitividad de las empresas', agregó Eleta. Para él, el nivel de conciencia asociado al tema se reflejaría en dinero invertido.
En este sentido, Julio Escobar, ex Secretario Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación, dijo que aunque se logre aumentar las fuentes de financiamiento, la comunidad debe estar consciente de la importancia de la ciencia.
‘Si la comunidad no logra convencer al estado panameño de que en la ruta del desarrollo para el siglo XXI debe haber un componente de I+D para poder competir, y logremos que el estado invierta un monto razonable en ello, no vamos a conseguir que el sector privado panameño se tome el riesgo sin haber visto casos de éxito', concluyó. Para ello, es fundamental ilustrar los casos de éxito ya existentes.