‘Hay que eliminar la discrecionalidad en el Municipio’

Involucrar a la empresa privada en el desarrollo urbano y eliminar la discrecionalidad en la tramitología suenan a la estrategia que distinguirá la gestión del alcalde electo, Mayer Mizrachi. El instrumento para implementar esto se basa en la tecnología y el patrocinio de cosas tan sencillas como la tapa de un hueco en la calle, un basurero inteligente, una parada de bus o un estadio. La idea, dice, es trabajar con la mitad de la planilla, actualmente conformada por más de 6 mil funcionarios, y brindar un servicio eficiente al ciudadano con la mitad de la planilla existente. La mente joven parece traer modernización a la alcaldía, que sea un hecho conllevará un verdadero reto para el nuevo alcalde. Las ideas están sobre el tapete.

Hay tantas cosas por hacer que no puedo parar, para sentir, tengo que hacer. El tiempo corre y hay mucho por hacer. Las expectativas son altas y quiero superarlas. Ahora estamos entendiendo el monstruo desde adentro, tengo acceso a cierta información de adentro y estamos tratando de entender cómo vamos a agarrar la batuta sin frenar las cosas que están andando porque el mecanismo del gobierno debe seguir, sin importar quién esté al mando.

Lento.

Exactamente así. No estoy sorprendido de nada. Es lento, lleno de permisos y procesos y a todos les pregunto por qué es así, pero nadie tiene la respuesta. Simplemente reciben órdenes los funcionarios. Si para mí, como alcalde electo me hace ruido la burocracia, imagínate cómo es para el contribuyente que tiene que hacer un trámite y si no hay un porqué de las cosas es peor. A nivel de permisos, mi éxito será que de aquí a cinco años nadie tenga que levantar un teléfono para que las cosas pasen, eso significa que hice mi trabajo.

Sí. Por eso la digitalización es crítica, porque organiza el proceso y no permite la discrecionalidad en el orden de atención. Las solicitudes deben atenderse por orden de llegada, mientras que hoy en día es por conexiones, si conoces al hombre de adentro tienes acceso, sino no.

Sí, mientras que el Ministerio de Comercio e Industrias, si tu cierras una empresa te dan el visto bueno, pero en el Municipio puede tardar más de un año.

Bastante trabajo por hacer. Hay muchas cosas que se resuelven con simple voluntad y otras con responsabilidad fiscal. Creo que una cosa es manejar tu propio presupuesto, pero cuando los fondos son de otros la responsabilidad es gigante. Velar por el bienestar económico y el responsable uso de los fondos públicos es una prioridad para nosotros.

Igual a las del gobierno central, empobrecidas, endeudadas y a riesgo de tener que usar un balance de la creatividad, la innovación para generar nuevas fuentes de ingreso con servicios de valores agregados. En campaña hice un perfecto ejemplo con los basureros inteligentes, grandes, que les cabe más basura y la compactan, se pueden volver plataformas publicitarias. Ahí tienes un nuevo ingreso. En el tema de las alcantarillas, si queremos ayudar a tapar los huecos, la empresa privada puede pagarnos por poner su nombre en las alcantarillas y decir: esta empresa es la que contribuye a tapar los huecos. Es una forma en que involucras a la empresa privada en la responsabilidad social empresarial.

Para nada.

La información que tenemos es variada. Mi enfoque en estos días ha sido rodearme de un equipo que nos permita hacer una transición más fluida. Solo no puedo hacer nada. Ese equipo de directores, que presentaremos próximamente, nos van a ayudar a homologar con las partes en la Alcaldía para hacer la transición más expedita y efectiva. Ahora mismo la información que tengo es parcial. Cuando iniciemos el proceso formal podremos tener un panorama más claro, no desde el 1 de julio, que es el cambio de mando, sino desde el 1 de junio, cuando mi equipo pueda iniciar la transición. El proceso no es soltar una rama y tomar la otra, sino que entremos y mientras que estemos en operación el alcalde actual pueda ir soltando mando en forma progresiva.

La planilla, no hay que esconderlo, todo mundo lo sabe. Hay personas de ministerios, de la Asamblea, de las juntas comunales nombradas en la planilla municipal. El problema es que cuando la mayoría de esas personas no están trabajando y cobran. Eso no será un reto para nosotros, sino una obligación. Para ellos será un reto conseguir un nuevo empleo sin una carta de referencia que sustente su labor, porque si no trabajaron, cómo los podemos referir. Número dos, creo que es una responsabilidad que tenemos con la ciudadanía de cuidar el dólar de su contribución. Si bien es cierto, la planilla se ha incrementado enormemente, el servicio ha empeorado. Cómo me explicas que tenemos más personas trabajando para la ciudadanía , pero la experiencia del usuario es peor. Los tiempos son demorados, y simplemente si no tienes un contacto dentro del Municipio, no resuelves.

Primero hay que entrar y ver con el nuevo director de Recursos Humanos. Eso va a ser crítico para analizar en qué fechas se les ha pagado el salario, y para qué tipo de labor. Vamos a tener que hacer entrevistas, porque hay gente muy buena, y hay que rescatar a ese personal que tiene años trabajando en el municipio y que está ganando lo mismo.

Aproximadamente con 3,500 personas, como mucho. El año pasado Elon Musk compró Twitter, lo primero que detectó es que la empresa estaba gorda, llena de grasa y que era lenta. Cortó el recurso humano en un 50% y la experiencia del usuario mejoró. A lo que voy es que se volvió una empresa más eficiente. Creo que nosotros tenemos que aprender de la empresa privada de cómo manejar los fondos y los recursos humanos. Yo no voy a tener chofer, si lo tengo lo pago de mi bolsillo. Eso significa que ningún director tendrá un chofer, si el alcalde no lo tiene pues los directores tampoco. Si lo quieren, lo pueden pagar con su salario, igual que yo. Esta es la nueva ética laboral que quiero traer a la directiva del municipio.

La tecnología nos va a facilitar brindar una mejor calidad de servicio al ciudadano. Los traspasos hoy en día son en papel. En Estados Unidos si quieres traspasar un auto solo pones el correo de la persona, el nombre y apellido, le llega a la persona en su correo, lo aprueban y se traspasa. La tecnología facilita el proceso y minimiza el peso al recurso humano, así puedes enfocar al personal a servir al ciudadano y hacer cosas que no puede hacer la tecnología.

Bueno, más me preocupa la falsificación de documentos que el ‘hacking’ de software. Yo puedo hacer un programa blindado, he creado el sistema de correo electrónico más seguro del mundo, por eso nadie me puede echar cuento en materia de seguridad informática. Le apuesto a la confianza que pueden dar los procesos tecnológicos en comparación con los humanos. Si nos damos cuenta, hoy el mayor problema es la discrecionalidad del servicio que brinda el Municipio. Te tratan de una forma según quién seas. Esa discrecionalidad hay que eliminarla. No puede haber parcialidad o favoritismo dependiendo si eres amigo o que se sospeche que pasan plata debajo de la mesa. Que los tiempos no se alteren, ni dilaten los trámites, eso lo puede garantizar la tecnología.

No puedo detallar ahora formalmente, pero te puedo avanzar que vamos a traer al municipio un equipo de tecnología para avanzar rápidamente en procesos que se pueden hacer digitales, por ejemplo, la renovación de placa y la calcomanía. Esa calcomanía, adiós. No hay razón por la que en 2024, después de haber pasado una pandemia y que todo mundo aprendió a usar un QR, por qué no existe un QR en cada placa y que la persona actualice, pague desde ahí y punto. No hay que hacer fila. Al municipio no le importa que tengas una calcomanía, sino que pagues los impuestos. Eso se puede hacer con tecnología. Vamos a traer un equipo que desarrolle internamente los programas. Eso nos va a ahorrar costos y vamos a demostrar que el capital humano panameño va a echar a Panamá hacia adelante. Tenemos muy buenos programadores en el país que no les dan cabida. Qué más emocionante que haber creado la plataforma del Municipio Capitalino.

Yo no puedo ser el ensacado encerrado en una oficina. Para ello tengo a mis directores, en caso de que lo quieran hacer. Le he dicho lo mismo al vice alcalde, Roberto Ruiz Díaz: tú puedes quedarte en el Municipio, yo tengo que ir al sitio. Me gusta estar donde las cosas están pasando. No quiero perder la esencia de lo que me hace ser Mayer. Quiero estar con los ciudadanos y sufrir sus problemas. Hace poco caí en un hueco en plena cinta costera, rompí dos llantas, un rin y una suspensión. Me quejé, y al día siguiente el Ministerio de Obras Públicas lo reparó. Pero cuántas otras personas han caído ahí y no se les presta atención. Yo tengo que seguir siendo ese ciudadano sin dejar de ser alcalde. Seré Mayer en la calle. Tengo candelilla, no puedo estar sentado en una oficina todo el día. Ahí estará el vice, a quién quiero demasiado, él me dirige por el debido proceso, algo que voy a conocer por quienes tienen experiencia. Eso le digo a los jóvenes que son nuevos en la política, incluyéndome, por más entusiasmo que tengamos nosotros debemos tener los pies en el suelo y asesorarnos. Escuchar a quienes nos rodean.

Pues ese equipo lo anunciaré pronto.

Es una sopa, un sancocho. Por primera vez llega a la alcaldía un alcalde sin compromiso político y sin deber el puesto a nadie. Estamos valorando a las personas por competencia. Algunos nunca hubieran considerado trabajar en la Alcaldía de Panamá, pero porque Mayer es el alcalde, están dispuestos a acompañarme en el trabajo. Yo creo que eso es importante porque la alcaldía no paga los mejores salarios. La alcaldía compite contra la empresa privada que también recluta a profesionales con buenos salarios y bonificaciones, mientras que en la alcaldía los salarios no son tan atractivos. Esa es la parte complicada, requiere y exige de un alcalde que sepa inspirar confianza y entusiasmo a quienes buscan servir, más que una remuneración económica. Sienten que es una ventana que tienen para cambiar el país.

Hay una parte que es infraestructura y otra que es cultura. La cultura vial en el país es inexistente. Obliga a poner resaltos en las calles en los pasos peatonales para asegurarse que le den paso al peatón. Parece que en Panamá la prioridad la tiene todo antes que el peatón. En otros países es inverso. Primero hay que señalizar los cruces y pedir al ciudadano que los use, y que no cruce la calle en cualquier punto. Por eso es que el cambio cultural vendrá de todas partes, del conductor y del ciudadano. No es el alcalde solo quien va a cambiar la ciudad. Otra prioridad es iluminar la ciudad. Si la iluminas brindas mayor seguridad al ciudadano. Las paradas de buses son otra tarea. Muchas no están iluminadas, tienen el techo roto. Para mí esas paradas son de hace 15 años.

Wifi, iluminación con paneles solares, cargador para el celular y una pantalla que va a decir en cuánto tiempo viene el siguiente bus y las rutas. Aquí un turista no sabe cómo tomar el bus porque por ningún lado dice la ruta. Toda esa información existe, pero no piden la información para conocer el itinerario.

Nada. Eso pretendo que lo haga la empresa privada. Para mí la sostenibilidad es muy importante. La cultura que tengo exige que tenga que hacer algo sostenible. Todo debe ser sostenible. En el caso de los basureros inteligentes, cada uno cuesta como $2 mil. Yo no puedo hacer una licitación por mil basureros, por ejemplo, porque debe ser viablemente financiable. Por eso necesito la publicidad. Al ser tan grande lo convierte en una plataforma para las empresas. De esa forma se paga el basurero y se recoge la basura. Las empresas quieren participar, lo que los tiene molestos es que se trata de robar la plata en el país. Las empresas quieren juego limpio.

Todo se tiene que hacer por licitación, es la forma más transparente de hacerlo. El problema ahora mismo no está en la parte de las licitaciones sino en los proyectos como tal. Hay prioridades. Yo no puedo tirar una licitación para los basureros, por ejemplo, cuando existe un mercado de buhonería que tiene un desorden. Hay que dar prioridad a ciertas cosas. Yo no tengo que encargarme de esos basureros porque la empresa que hace publicidad puede hacerlo, pero que sea auditado y fiscalizado por la alcaldía.

Hay que entender exactamente lo que hay adentro. No puedo decir que hay que auditar porque no he visto los números reales. Hay que entrar en julio. Lo que sí te digo es que en campaña encontramos cosas que nos preguntábamos cómo se habían comprado terrenos pero sin que se les diera uso. No encontrábamos sustento. Probablemente habrá instancias en las que debamos cuidarnos en salud.

Me senté con cada uno de ellos. Antes tenía dirigentes en cada corregimiento, y ellos van a trabajar de la mano con esos representados, no representantes. Quieran o no sus ciudadanos votaron por mí, soy el alcalde y me debo a los ciudadanos, por eso jamás podré poner la política y los egos por encima de las necesidades de los ciudadanos. Les dije que antes de que se formen bloques, quería hacer un brindis entre todos para felicitarlos. Hay muchas caras nuevas y otras no tan nuevas, que se han reelegido a pesar de su partido, no gracias a su partido porque sus partidos fueron unos bultos en las pasadas elecciones. Pero ellos se eligieron y demuestran cierto liderazgo en su comunidad que debe reconocerse. El Consejo no se puede manejar como otra Asamblea más.

Te voy a dar un ejemplo. Yo hice un proyecto de un parque en Paitilla que le gustó a los residentes, pero lo apreció una empresa que tiene una marca de zapatillas muy reconocida, y le propuse que lo pague y ponerle su nombre. Ellos estaban encantados, me dijeron que nunca les habían hecho esa propuesta. Estamos hablando de fondos que se hubieran destinado a cierta zona, ahora pueden usarse para sitios con menos recursos y creas así un nuevo modus operandi en el que traes a la empresa privada al desarrollo urbano. Eso funciona en Estados Unidos, por ejemplo, con los estadios que llevan el patrocinio de las empresas. Eso aliviana el peso sobre el contribuyente y permite destinar los fondos a cosas distintas. No es necesario poner un incentivo fiscal, ellos podrán hacer su publicidad así.