'El SPA es un sistema quebrado en todas las áreas de la justicia'

Actualizado
  • 16/01/2020 00:00
Creado
  • 16/01/2020 00:00
Benedicto De León Fuentes, presidente del Instituto Panameño de Derecho Procesal, reconoce que el nuevo sistema de juzgamiento penal requiere un mayor presupuesto para mejorar su operatividad

La falta de presupuesto ha originado un colapso operativo del Sistema Penal Acusatorio (SPA), que carece de eficiencia y vulnera garantías. Benedicto De León, presidente del Instituto Panameño de Derecho Procesal, está convencido de que el sistema requiere ajustes para alcanzar la efectividad que se necesita para enfrentar la criminalidad.

Profesor de la Maestría en Derecho Procesal de la Universidad Interamericana de Panamá.

Tres años después de haberse implementado el SPA, ¿cómo evalúa su funcionamiento?

En términos generales, es un proceso de juzgamiento moderno, ágil, que ofrece grandes soluciones para la justicia penal. No obstante, en el caso nuestro, hay muchas cosas que hacer para que el sistema rinda los frutos.

Puntualmente, ¿qué hacer para que el sistema rinda esos frutos?

Una de las grandes discusiones aquí y en otras latitudes es el tema de la imputación. En el proceso penal acusatorio existe una primera fase que se conoce como imputación. La segunda es la audiencia intermedia, donde se acusa a una persona, y la tercera, que es la audiencia de juicio, donde un tribunal decidirá si es culpable o inocente. La discusión que se plantea es que si el fiscal considera que una persona ha cometido un delito, se solicita una audiencia. Cuando la persona concurre ante el juez de garantías, se le imputa los cargos, lo que indica que se le investigará como posible autor de un delito.

Pero, ¿cuál es la inquietud?

Que el imputado no tiene derecho a defenderse en esta etapa. Algunos especialistas opinan que para qué citar a una audiencia donde no existe la oportunidad de defensa. Entonces, es mejor enviar eso (la imputación) por correo y yo ya sé que me están investigando. Esta etapa del sistema no se ajusta a las garantías constitucionales ni a las garantías convencionales sobre los detenidos. Por regla general, la detención no resuelve los problemas de la criminalidad, por el contrario, las agrava. Desde ese punto de vista nosotros pensamos que una persona debe estar detenida solamente cuando es condenada o cuando se trata de un furioso que hay que apartarlo de la sociedad. Pero cuando se hace la imputación, aunque el acusado no tenga derecho a defenderse, el fiscal puede solicitar medidas cautelares, incluyendo la detención provisional.

¿Qué otros aportes haría al sistema?

Otra crítica es que existen jueces de garantías que han sido fiscales. Un fiscal tiene un chip muy diferente al de un juez de garantías. El fiscal acusa. Ellos, incluso, hacen récord de las personas que acusan o que logran condenar. Poner a un individuo de esos como juez de garantías no es lo indicado. Un juez de garantías tiene que tener la capacidad para no inclinarse ni para un lado ni para otro, tiene que ser absolutamente objetivo. Considero que es un error del sistema.

Además, el SPA es un sistema que hace referencia a igualdad de armas, pero hay una parte en donde se refleja ese equilibrio.

¿De qué parte estamos hablando?

Con respecto al derecho la víctima. Ella tiene el derecho a tener un defensor de la víctima, que puede convertirse en querellante. Entonces, en una audiencia a usted cómo defensor de un acusado le dan un tiempo para que hable. Pueden ser entre diez o quince minutos, por regla general. Al fiscal, le dan los mismos minutos. Pero, al defensor de la víctima le dan otros diez o quince minutos. Esto quiere decir que el imputado está en absoluta desventaja. Por la otra parte, ¿qué hace ese querellante? Está escuchando al fiscal, anotando para ver qué se le ha podido quedar para posteriormente argumentarlo. Además, el defensor de la víctima potenciará algunos temas del fiscal. En síntesis, el juez de garantías o el tribunal va a ver dos argumentos en contra del imputado versus uno de la defensa del acusado.

El fiscal, titular de la acción penal, es el defensor por excelencia de la víctima. No obstante, la víctima tiene adicional ese coadyuvante, ese defensor de víctimas. Entonces, no hay igualdad de condiciones.

¿Alguna otra crítica?

Sí, el presupuesto. Yo estuve en una audiencia de acusación en La Chorrera. Y la fecha de la audiencia de juicio es para el 2022. Es decir, que esa persona acusada tiene tres años, que cada vez que se acuesta está pensando en la diligencia que tiene pendiente. Y, ¿por qué razón? En ese momento solo había un tribunal de juicio, no sé si habrán nombrado otro. Hace poco conversé con una fiscal, aquí, en la ciudad, y me dijo que tenía 800 carpetas.

¿Cómo puede un fiscal manejar 800 carpetas?

Lo que ocurre es que el sistema creado para que funcione con celeridad está absolutamente atrasado. Pero de tal manera que los nombramientos del presidente (Laurentino Cortizo) para nuevos magistrados, para procurador general, no sé que podrán hacer mucho con esos presupuestos. No tienen el personal ni tampoco peritos especializados para enfrentar la criminalidad.

Mucho menos las infraestructuras...

El tema del personal lo podemos ver de la siguiente manera. Si usted es fiscal tiene que tener la cantidad suficiente de personas para que le ayuden a realizar su trabajo. Otra cosa: si aquí hay diez fiscales, de acuerdo con la criminalidad existente, deberían haber 20 o 30.

Si usted analiza. el SPA y la administración de justicia en general, la conclusión a la que se llega es que se trata de un sistema quebrado. Si lo vemos a nivel de la empresa, en todas las áreas de la administración de justicia.

El modelo es bueno, pero en el país no funciona. ¿Es eso?

Al no tener los presupuestos, los fiscales no pueden tener los funcionarios suficientes ni tampoco se pueden abrir los despachos. Es un sistema que está diseñado para que funcione muy bien, pero con el ingrediente dinero. Porque, además, los funcionarios que trabajan deben conocer la esencia del sistema, que tiene garantías, reglas y principios. Ellos, los jueces, deben conocerlo a cabalidad, para que lo apliquen. Por tanto necesitan entrenamiento y preparación. Pero si usted habla con cualquier litigante en materia del SPA, el consenso es que nos sentimos como si estuviéramos en el sistema viejo.

Existe la percepción de que no se está castigando el delito. Hay muy poca confianza en los resultados del Ministerio Público...

Esa percepción estaría relacionada a los llamados procesos de gente de cuello blanco. Pero también pasa con la gente popular, común y corriente. Por ejemplo, hace poco un taxista agredió a otro conductor porque le colisionó su vehículo. Tengo entendido que el individuo está libre. Y era, de acuerdo a un video que se hizo viral, un individuo violento. Una persona que se comporta así tiene que tener problemas de violencia intrafamiliar.

El caso creo que lo atendió un juez de paz. Creo que la norma penal tiene que mejorarse, pero también existe un tema de interpretación de la tentativa. Un individuo que te golpea con un objeto sólido en la cabeza hasta dejarlo aturdido, y encima lo patea en el estómago, donde hay órganos vitales como el corazón y el hígado, no me van a decir que no tenía intención de causarle la muerte.

El sistema acusatorio no está diseñado para que el delincuente sienta que no hay ley, ¡no! Está diseñado para hacer las cosas bien y rápidas.

¿Qué espera del nuevo procurador?

Yo soy una persona esencialmente positiva. Lo conozco, él trabajó en el sistema. No es una persona que llega a ver qué hace. Él sabe lo que tiene que hacer y espero haga su trabajo. Pero le tienen que poner es plata.

Usted alguna vez aspiró a ser defensor del Pueblo, ¿cuál debe ser perfil de una persona para ocupar ese cargo?

Cuando se eligió el primer defensor del Pueblo en el país, hace veinte o veinticinco años, fui candidato. Hice todas las vueltas que se requerían en aquel momento. Entonces fue nombrado el distinguido doctor Ítalo Antinori, quien considero ha hecho el mejor papel de todos los defensores del Pueblo.

En cuanto a las características que debe tener un defensor del Pueblo, la principal es la independencia.

La Defensoría del Pueblo nace con propósitos muy dignos para que defienda al pueblo.

PERFIL DEL ENTREVISTADO
Presidente del Instituto Panameño de Derecho Procesal Penal (IPDPP).
Nombre completo: Benedicto De León Fuentes
Publicaciones: 'El Contrato de Seguro y sus Cláusulas'
Ocupación: Docente universitario, abogado litigante en la firma De León Fuentes & Rudas Abogados.
Resumen de su carrera: Especialidad en Docencia Superior en la Universidad Metropolitana (Umecit), 2009. Profesor de Derecho Procesal Civil y de Derecho de Seguros en la Universidad del Istmo por más de 20 años. Actualmente, profesor de la Maestría en Derecho Procesal de la Universidad Interamericana de Panamá (UIP).
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