Integrantes de la caravana migrante en el estado de Chiapas, en el sur de México, denunciaron este jueves 21 de noviembre que las autoridades les bloquearon...
- 02/11/2014 01:00
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En 1880, al ver que Lesseps iba en serio, surgió una gran preocupación en los Estados Unidos. Al llegar Lesseps a New York aquel año, la prensa ignoró su nombre en relación con el canal, llamándole simplemente ‘el ilustre huésped’.
Y mientras visitaba el puente de Brooklyn, en construcción, el Presidente Rutherford B. Hayes, en su mensaje especial al congreso, el 8 de marzo, sostenía: ‘La política de esta nación es un canal bajo el control americano. Estados Unidos no puede consentir en la entrega de este control a cualquier potencia europea o a cualquier combinación de potencias europeas. Si los tratados vigentes entre los Estados Unidos y otras naciones, o si los derechos de soberanía o propiedad de otras naciones se sitúan en el camino de esta política... deben darse los pasos adecuados por negociaciones justas y liberales para promover y establecer la política americana’...
Ese mismo día, 8 de marzo de 1880, el Comité Selecto de Canales Interoceánicos de la Cámara de Representantes, presentó un informe, que según Miles P. Duval, incluía una resolución con los siguientes puntos: 1.-que cualquier forma de protectorado u otro intento por cualquier gobierno europeo, de controlar un Estado independiente en este continente, era contrario a la Doctrina Monroe y peligroso para la paz, prosperidad y seguridad de los Estados Unidos; 2.-que los Estados Unidos afirme y mantenga su derecho de poseer y controlar cualquier medio de comunicación artificial a través del Istmo; y 3.-que se le solicite al Presidente tomar medidas para la cancelación de cualquier tratado que esté en pugna con esta declaración. (H. Rep. No. 390 (46th Cong., 3d. Sess.), pp. 8-9; citado por Miles P. Duval Jr. Ob. cit.).
Es evidente, a la luz de esta resolución, que la vigencia del Tratado Clayton-Bulwer representaba una de las principales preocupaciones del Gobierno de los Estados Unidos. El problema, por supuesto era Inglaterra, con los derechos que le reconocía el Tratado y su poderosa flota, capaz de hacerlos valer.
EL PROYECTO DEL CANAL RANCÉS
Los trabajos efectivos del Canal Francés se iniciaron en 1882. Lesseps calculó el costo de la obra en $168 millones y la duración de la construcción en 12 años.
Lo que ocurrió después es harto conocido. La mala administración del proyecto y sus grandes dificultades técnicas, especialmente la tenacidad con que Lesseps mantuvo su decisión por el canal a nivel, así como la obstinada y cerrada oposición del gobierno de los Estados Unidos, explican el fracaso de la obra del Canal Francés.
El final fue el célebre ‘affaire Panamá’ que en su conjunto afectó más a la historia de la III República Francesa que al canal. El Tribunal Civil de Seine declaró la disolución de la Vieja Compañía del Canal de Panamá, al encontrarse comprometida financieramente, y la colocó en manos de un liquidador con poder para transferir sus haberes y derechos a una nueva compañía que continuó las obras a un ritmo lánguido sobre un plan modesto que aspiraba, en realidad, a traspasar sus derechos a los Estados unidos.
Con este fin obtuvo una nueva prórroga de su concesión en 1900, valedera hasta 1910: La intervención del Gobierno Francés ‘En una ocasión -apunta Miles Duval- después del fracaso de la vieja compañía, el gobierno francés en 1889 intentó ayudarla ofreciendo garantizar sus bonos; pero el Senado de los Estados Unidos, en una sesión ejecutiva, aprobó una resolución que declaraba: ‘que el gobierno de los Estados Unidos contemplará con seria preocupación y desaprobación, cualquier conexión de cualquier gobierno europeo con la construcción o control de cualquier canal de barcos a través del istmo de Darién o a través de América Central, considerarán estas clases de enlaces o controles como perjudiciales a los justos derechos e intereses de los Estados Unidos, y como una amenaza a su bienestar”. (S. Doc. N° 471, 63d long. 2d. Sess., p. 14; citado por Miles P. Duval Jr., Op. Cit).
Este fue el último de los esfuerzos, por parte de un gobierno europeo, para construir el canal.
LA COYUNTURA HISTÓRICA Y LOS INTERESES DE LOS ESTADOS UNIDOS
La obstinada y cerrada oposición del gobierno de los Estados Unidos al proyecto Lesseps definen el eje de coordenadas de su engorrosa y perpicaz política de obstaculizar e impedir en el Istmo cualquier avance en las obras de construcción del canal francés. La coyuntura histórica de aquel momento no pudo ser más propicia. A menos de tres años de haberse iniciado los trabajos estalló la revolución de 1885 que condujo al gobierno unitario de Rafael Núñez y a la Constitución centralista de 1886.
Después de las elecciones presidenciales de 1884, las actividades revolucionarias se desarrollaron a lo largo de toda la República.
El 23 de diciembre, semanas antes de los desórdenes en el Istmo, el Ministro de los Estados Unidos en Bogotá recomendó al Departamento de Estado que algunos barcos debían permanecer alerta en Panamá por los disturbios inminentes.
Aprovechándose de la ausencia de las fuerzas nacionales y de la policía de Colón, Pedro Prestán, un mulato haitiano y líder de un grupo radical en Colombia, organizó una revuelta y tomó el control de la ciudad.
El 20 de marzo Arosemena renunció como Gobernador del Departamento de Panamá, y el General Carlos A. Gónima, Comandante de las tropas nacionales, asumió las funciones militares y civiles del Departamento.
El 1 de abril, los rebeldes fueron derrotados, se retiraron a la ciudad y la incendiaron.
Al seguir los trágicos sucesos, el gobierno de los Estados unidos organizó una fuerza expedicionaria de ‘marines’ y marineros y ordenó una concentración de barcos en ambos litorales del Istmo de Panamá.
El 23 abril se le informó al Almirante Jouett que 700 colombianos se aproximaban a la ciudad y que Aizpurú amenazaba con apoderarse de la telegrafía.
El almirante ordenó la ocupación de Panamá al mediodía del 24 de abril, y se preparó la devolución de la ciudad a los colombianos. Después de la ocupación, Mc Calla ordenó el arresto de Aizpurú y lo hizo garantizar las vidas y propiedades de todos los extranjeros. Al aceptar el acuerdo fue puesto en libertad y las fuerzas de los Estados Unidos se retiraron de la ciudad de Panamá a la estación del ferrocarril el 25 de abril.
Se aceptó la rendición incondicional de los líderes revolucionarios y la entrega de sus armas. Las tropas colombianas desembarcaron en la mañana del 30 de abril y la bandera colombiana fue saludada por el Almirante Jouett.
Las fuerzas norteamericanas regresaron a sus barcos y luego a Colón y permanecieron en el Istmo hasta el 15 de julio cuando el Almirante Jouett partió hacia la unión.
¡He ahí un proyecto condenado a morir desde su cuna!
* Tomado del libro Población, Economía y Sociedad en Panamá.. Tomo 2 Vol. I y II…. Contribución la Critica de la Historiografía Panameña…, de José Eulogio Torres Ábrego… Biblioteca de la Cultura Panameña.
Los cálculos económicos del Canal Fránces
Los trabajos efectivos del Canal Francés se iniciaron en 1882. Lesseps calculó el costo de la obra en $168 millones y la duración de la construcción en 12 años.
La mala administración del proyecto y sus grandes dificultades técnicas, especialmente la tenacidad con que Lesseps mantuvo su decisión por el canal a nivel, así como la obstinada y cerrada oposición del gobierno de los Estados Unidos, explican el fracaso de la obra del canal francés.
El Tribunal Civil de Seine declaró la disolución de la Vieja Compañía del Canal de Panamá al encontrarse en baca rota.