Denuncian 3.692 delitos sexuales entre julio 2024 y enero 2025

- 04/03/2025 00:00
- 03/03/2025 17:58
Aumenta el número de delitos sexuales y femicidios. Los menores de edad, las mujeres y la población LGBTQ son los más vulnerables. Por otro lado, disminuye la violencia doméstica, el maltrato a menores y el maltrato al adulto mayor.
Desde el 1 de julio de 2024 a enero de 2025 se han registrado 3.692 delitos sexuales en Panamá, de acuerdo a cifras publicadas por el Ministerio Público. Esto representa 242 casos más comparados con el mismo período del año anterior. En otras palabras, durante la actual administración ha habido un incremento de 6,6%.
Específicamente, se reportaron 1.562 casos de violación (aumento de 12,9%), 178 de violación doblemente agravada (7,9%) y 1.228 “accesos sexuales” a menores entre 14 y 17 años. Al día, se reciben más de 20 denuncias por este tipo de delitos.
Para Priscilla Vásquez, miembro de la agrupación feminista Isadora Panamá, una de las claves es la educación. “Creemos que debe haber una educación amplia, una educación sexual integral. Eso debe ayudar mucho. Pero aquí las iglesias, sobre todo las evangélicas, hacen campaña contra la educación sexual integral”, lamentó.
Vásquez señala que se trata de un problema sistémico, que viene desde las instituciones, el discurso machista, la represión policial e incluso la burla y ataques a instituciones como el Ministerio de la Mujer que brinda recursos a las víctimas como casas de acogida y tratamiento psicológico.
Se trata de una problemática de género. Cerca del 90% de las víctimas son mujeres, de acuerdo a datos del Sistema Nacional Integrado de Estadísticas Criminales (SIEC). Los casos de violación a mujeres transgénero son tipificados como hombres por su sexo biológico, por lo que no se conoce la cifra de víctimas en este grupo de población. Además, muchas víctimas no presentan denuncias por miedo a ser estigmatizadas o revictimizadas durante el proceso.
Los femicidios también han aumentado. Durante este gobierno se han contabilizado 16 casos, 43,8% más que en el mismo período del gobierno anterior. El primer caso del año ocurrió a tres días de iniciado el 2025, cuando una mujer y su hijo de 9 años fueron asesinados en Colón.
“Estamos iniciando la elaboración de un plan nacional de prevención y atención de la violencia contra las mujeres”, afirmó Marquelda Coronado, psicóloga y miembro de la Dirección de Derechos Humanos de la Mujer del Ministerio de la Mujer. “Cuando conocemos un caso, una situación de violencia, debemos promover que la señora busque ayuda. Podríamos hasta estar salvando su vida, con solo decir que hay un ministerio donde pueden ayudarte, hay un equipo multidisciplinario”, acotó.
La violencia doméstica, de acuerdo a una guía publicada por el Ministerio de Desarrollo Social, se define como el empleo de hostigamiento o fuerza física, psicológica, patrimonial, intimidación o persecución contra una persona por parte de cónyugue, excónyuge, familiares o parientes cercanos. Algunas de las señales de alarma son amenazas, gritos, humillación, control del celular, limitar con qué personas te relacionas, revisión de tus pertenencias, pellizcos, jaloneos o golpes para inflingir dolor. Para buscar ayuda, existe la línea de atención 182 que opera los siete días de la semana, las 24 horas del día.
En los primeros siete meses del gobierno del presidente José Raúl Mulino se reportaron 8.775 casos de violencia doméstica en el país. Aunque la cifra es alta, representa una reducción de 1.091 casos comparado con el período anterior, es decir 12,4% menos, lo que evidencia el trabajo realizado por el Ministerio de la Mujer, el Ministerio de Desarrollo Social y las instituciones de seguridad.
“No le echemos toda la responsabilidad a la víctima”, enfatizó Coronado. “No podemos negar que vivimos una sociedad patriarcal, machista, que respondemos a esos patrones, a veces inconscientemente. A veces criticamos, juzgamos, que a la señora le gusta estar allí en ese ciclo de violencia, y hay que tener mucho cuidado, pero es una forma de sobrevivir, es la forma que ella estima, que manteniéndose allí protege a sus hijos, se protege a ella misma. A veces unas necesitan más tiempo que otras para poder empoderarse, poder salir, tomar sus propias decisiones y separarse de la persona que le hace daño”, añadió.
Otro renglón en dónde se han evidenciado mejoras es en el número de denuncias por maltrato a los menores, que bajaron 2,2%, y al adulto mayor, con una reducción de 5,3%.
Un factor clave en la conducta de la sociedad es el manejo del tema en los medios de comunicación. Titulares que describen los femicidios como “crímenes de pasión”, usando frases como “la mató por amor”, terminan convirtiéndose en una especie de justificación.
“Los medios de comunicación no ayudan”, apuntó Vásquez. Algunos medios no dicen que fue claramente un femicidio. Van al tema de que son crímenes pasionales y terminan justificando el acto. Educación es también concientización”, resaltó. “La violencia hacia la mujer no se ejerce solamente en la clase trabajadora, porque eso sí es universal hacia las mujeres, solo que los ricos tapan sus negocios. Nos toca hacer la denuncia, hacer la formación y la información desde donde podamos hacerlo para que haya un cambio”, concluyó la activista miembro de Propuesta Socialista de Panamá.