Darién, el ‘tour’ ecoturístico que vende el Clan del Golfo

Los traficantes, también conocidos como coyotes, están llegando al 70% de los migrantes que atraviesan la selva de Darién, a través de las redes sociales. Están vendiendo la inhóspita y peligrosa travesía migratoria como un tour de ecoturismo. “Lo venden como si fuera un paquete de lujo para su paso por el Parque Nacional de Darién”, cuando existen inclemencias climáticas y de terreno que complican la travesía, explicó Ricardo Sánchez, teniente y oficial de inteligencia del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), durante el primer Foro Internacional de Seguridad, una Perspectiva Global.

Una de las aplicaciones más usadas es el Tik Tok donde pueden encontrarse personas bañándose en los ríos y atravesando la selva sin el menor riesgo, cuando es completamente distinto. A través de las redes, los criminales ofrecen sus propagandas. Esta modalidad del crimen les permite captar a muchos más clientes en todo el mundo y al mismo tiempo preservar su identidad. Quienes están en otros países tienen la capacidad de conectarse con estas personas, sin imaginar que se trata de delincuentes. “Los migrantes no tienen la necesidad de llegar a Colombia para darse cuenta (del supuesto servicio)”, agregó Sánchez.

En las plataformas de Facebook e Instagram también venden sus servicios. “Cruce por Darién”, por ejemplo, es uno de los nombres de las cuentas que usan para comunicarse con los migrantes. Se crea una especie de foro donde puede interactuar una parte y la otra.

Los grupos criminales cobran en efectivo el tour que prometen a los migrantes. Son narcoterroristas del Clan del Golfo, una organización de colombianos que los introducen a la selva con un mapa para que continúen solos en el recorrido”, agregó el teniente.

En su paso por la selva, los migrantes se ven expuestos a todo tipo de vejámenes: robos, violaciones e incluso asesinatos. También han generado alrededor de 14 toneladas de desechos en una reserva protegida.

Ante esta situación, Senafront promueve la campaña “Darién no es una ruta, es una jungla” para desincentivar el paso por la selva.

El año pasado, 417.000 migrantes cruzaron la peligrosa selva de Darién, lo que representó un incremento de 52% con relación a 2022 y una crisis migratoria sin precedentes en la historia. Para enero de este año, 40.000 personas hicieron la travesía.

En el “Primer foro internacional de seguridad, una perspectiva global”, que organizó Senafront, se hizo referencia a las amenazas emergentes que pueden ser de corte económico, social, político, ambiental, tecnológico y de salud. También se abordó el cibercrimen, el que se produce en el entorno digital, entre ellos, los engaños a los migrantes a través de las redes.