Evalúan once puntos para estaciones del teleférico de San Miguelito

El ambicioso proyecto de teleférico que conectará los distritos de Panamá y San Miguelito representa una apuesta importante para transformar la movilidad urbana en estas áreas densamente pobladas.

Este proyecto, declarado de interés público por el Consejo de Gabinete en agosto pasado, tiene como objetivo no solo mejorar el transporte público, sino también facilitar el acceso a comunidades que históricamente han enfrentado dificultades debido al desorden urbano del distrito, la topografía irregular y la insuficiencia de opciones de transporte.

Sin embargo, la complejidad del proyecto exige una evaluación minuciosa de los impactos ambientales y sociales, para garantizar su viabilidad y sostenibilidad a largo plazo.

Actualmente, Metro de Panamá inició el proceso de selección de la empresa responsable de elaborar el Estudio de Impacto Ambiental (EsIA), cuyo costo se estima en $187.650.

Este estudio es fundamental, ya que permitirá identificar y mitigar posibles afectaciones al entorno natural y social antes de iniciar las obras.

Las estaciones previstas estarán ubicadas estratégicamente en los siguientes puntos: Villa Guadalupe (Escuela República de Israel), Samaria (cerca de la Escuela República de Corea), Mano de Piedra (Escuela Martin Luther King), Centro de Salud Cerro Batea, Valle de Urracá (Parada de MiBus y Templo Monte de Sanidad), Escuela General San Martín (cerca de la salida del Corredor Norte), Torrijos Carter/Santa Librada (alrededores de las zonas pagas de MetroBus), Nueva Libia (Tierra Prometida y Nuevo Progreso), El Balboa (Avenida Cincuentenario y Avenida José Agustín Arango) , Estación Sur (Avenida Angélica de Salvat).

Estas ubicaciones configuran el área de influencia preliminar del proyecto, con una extensión estimada de 4,000 m². Dentro de este marco, el estudio ambiental abarcará un polígono de evaluación para determinar las posibles afectaciones. Se analizarán factores como la biodiversidad, la infraestructura preexistente y el impacto en las comunidades locales. Además, se establecerá una franja de 10 metros a cada lado del alineamiento propuesto, con puntos específicos de evaluación cada 150 metros para caracterizar los posibles impactos de las pilas del teleférico.

La empresa que gane la licitación deberá presentar un plan de trabajo detallado dentro de los primeros diez días calendario después de recibir la orden de proceder. Este plan incluirá inspecciones en la zona de influencia, la identificación de aspectos clave para la elaboración de la línea base ambiental, y la verificación de las condiciones físicas del proyecto. Esta fase será crucial para establecer medidas de mitigación adecuadas y garantizar que la obra se ajuste a los estándares técnicos y legales vigentes.

El teleférico está diseñado para atender a una parte de la población de los distritos de Panamá y San Miguelito que actualmente no es servida de manera eficiente por las líneas 1 y 2 del metro ni por la flota de Metrobús. Las características topográficas de estas áreas han dificultado la implementación de otros medios de transporte, lo que ha dejado a muchas comunidades en una situación de aislamiento parcial. Con este teleférico, se espera mejorar significativamente la conectividad, reducir los tiempos de traslado y ofrecer una solución más sostenible y eficiente.

La construcción del teleférico no solo facilitará el acceso a zonas de difícil acceso, sino que también podría tener un impacto positivo en la economía local, generando empleo durante la fase de construcción y potenciando el desarrollo económico en las comunidades beneficiadas.

Además del EsIA, ya se ha contratado la empresa encargada de realizar el estudio de factibilidad del proyecto. Según José Ramón Icaza, secretario de Metas Presidenciales, se espera que este estudio esté listo para el segundo trimestre de 2025. Una vez concluido, se dará inicio al proceso de licitación para la construcción del teleférico. Este cronograma refleja la importancia que el gobierno atribuye al proyecto y su compromiso con la mejora de la movilidad urbana en Panamá.

La propuesta del teleférico fue impulsada por la Junta de Accionistas del Metro de Panamá, encabezada por su director general, César Pinzón, quien presentó la solicitud ante el Consejo de Gabinete para declarar el proyecto de interés público. Esta designación, amparada por el artículo 6 de la Ley 5 de 1988, permite al gobierno priorizar proyectos de gran impacto para el desarrollo nacional.

Con información de Lourdes García