Aunque parezca extraño para algunos, hubo un tiempo donde se podía hablar de playas ubicadas en la Ciudad de Panamá. Como lo recogen las páginas de 'La Estrella de Panamá' en sus publicaciones de inicio del siglo XX, no hacía falta salir de la urbe para disfrutar espacios de ocio, entre el mar y la arena, con pequeñas playas en las zonas de San Felipe. , Bella Vista y Amador. Han pasado muchas décadas de eso y algunas de esas playas se perdieron. La falta de visión de las autoridades del Municipio capital y del gobierno central, queda manifiesta con la grave contaminación que existe en las costas de la ciudad. Los desarrollos urbanísticos sin regulación en las zonas contiguas al mar, así como la falta de políticas claras con resultados en el saneamiento de la Bahía, son evidencia de ello. Y no se trata de construir obras faraónicas de playas artificiales con dudosa transparencia, sino que, quienes gobiernan deben empezar a incorporar proyectos de rescate de playas. Las de Veracruz y Kobbe, son un ejemplo de playas con grandes posibilidades en turismo, comercio y disfrute público. Ciertamente, la ciudad tiene prioridades más apremiantes, pero si hablamos de un futuro más sano y sostenible, este debe contemplar que la Ciudad de Panamá deje de vivir de espaldas al mar ya su potencial en el sector turístico.

Entrelíneas del 5 de octubre de 2024

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