El Metro de Panamá detalló que la construcción de la Línea 3 cuenta con un avance del 75%. Aunque aún no se conoce una fecha para la terminación de la...
La Ciudad de Panamá tiene muchos desafíos que resolver, desde la planificación urbana, la falta de espacios verdes para el público, así como la insuficiente oferta cultural, viviendas inasequibles o asuntos más básicos como la carencia de agua potable. Pero el principal problema de la ciudad es la pésima administración que históricamente ha tenido, donde se entiende el municipio como un bastión politiquero y no como un gobierno local capaz de atender las demandas ciudadanas. Dentro ese “laissez faire” de las últimas décadas, el municipio ha formado parte de los cambios de zonificación desordenados. Zonas residenciales convertidas a industriales sin consultar a la gente y degradando la calidad de vida, mientras que en otros casos se han establecido espacios comerciales para beneficiar a allegados al poder sin la debida planificación. Debe existir una armonía entre lo residencial y lo comercial. La Ciudad de Panamá puede alcanzar ese balance si el gobierno municipal pone orden en función de las demandas y necesidades reales de la gente. El alcalde Mayer Mizrachi tiene la oportunidad de hacer las cosas diferentes y los capitalinos aún estamos esperando que ese cambio llegue. La ciudad es una joya de potenciales de negocios, cultura y turismo; cualquier plan que se haga, no puede estar de espaldas a la población.