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- 11/04/2020 00:00
Vacunación contra el coronavirus en dos etapas
Países con grandes poblaciones (India, Brasil, Japón) y viejos programas universales de vacunación contra la tuberculosis (BCG) son hoy accidentalmente, “laboratorios epidemiológicos naturales” que sustentan la vacunación en dos etapas sugerida por el profesor Stefan Kaufmann.
El profesor Stefan Kaufmann, del Instituto Max Planck de Berlín para Infecciones Biológicas, ha traído a la atención mundial que durante el SARS-CoV-1 de 2002-2004 no hubo defunciones en India. En la actual pandemia con SARS-CoV-2, en India (el país más poblado del mundo con 1300 millones de habitantes), han muerto a la fecha cerca de 100 personas, a pesar del hacinamiento incontrolable de sus ciudades, mientras el Gobierno intenta establecer alguna medida de distanciamiento social. Una sola contrastación como ejemplo: Suecia, con excelente sistema sanitario socialista y 10 millones de habitantes, ya sobrepasa 400 defunciones.
No conozco estudio disciplinado que haya explicado científicamente las principales contrastaciones epidemiológicas en torno a la actual pandemia. Algunos han especulado que las condiciones climáticas de la región son la causa de la baja mortalidad, pero frente a correlaciones con otros países dentro y fuera de Asia, no parece adecuada la explicación. El profesor Kaufmann sostiene la hipótesis de que la explicación de dicho fenómeno es la protección inmunológica pulmonar cruzada que produce la vacuna BCG contra otros patógenos, algunos de los cuales son virus. En India el programa de vacunación universal contra la tuberculosis se inició en el año 1948. Programas universales de vacunación con BCG que se iniciaron muchas décadas atrás también son notorios en algunos otros países como Brasil (1927) y Japón (1951). Un grupo de científicos del New York Institute of Technology está presentando una correlación epidemiológica entre programas de vacunación universal contra la tuberculosis y su posible vinculación con la reducción de morbilidad y mortalidad de COVID-19. Aaron Miller et allí consideran que la Revolución Cultural (1966-1976) trastornó el programa de vacunación en China. El metaanálisis incluye otras observaciones interesantes que escapan al centrofirme de nuestra opinión presentada a través de este prestigioso periódico.
El Prof. Kaufmann ha modificado la vacuna BCG y con el nombre de VPM1002 progresa con la fase III de las pruebas que promete estarán listas cerca de junio 2020. Su contrapartida en India indica que la producción masiva podría estar disponible pocos meses después. En los Países Bajos ya se iniciaron ensayos controlados usando BCG en personal médico para verificar si efectivamente se genera una protección pulmonar específica y/o inespecífica, contra el nuevo coronavirus.
Todo esfuerzo complementario a las estrategias de mitigación (i.e. distanciamiento social) debe considerarse seriamente, habida cuenta que no se conoce si habrá ciclos recurrentes de infección con el nuevo coronavirus. Pero más importante aún, hay que entender que los recursos de mitigación son instrumentales, cuasi artificiosos. Un programa de vacunación es una intervención epidemiológica activa que va directamente dirigida a minimizar o solucionar la crisis infecciosa. Los medicamentos tienen limitaciones por toxicidad o contraindicaciones importantes. Cada recurso es importante, pero una ponderación adecuada de todos no deja lugar a dudas sobre que La VACUNACIÓN supera la mitigación y el uso de tratamiento farmacológico.
Sugerimos que el Minsa considere un programa de vacunación voluntaria, AL MENOS, para adultos mayores de 60 años con 0.1ml de BCG (se excluyen personas inmunosuprimidas y embarazadas) A LA MAYOR BREVEDAD POSIBLE.
Si bien no se ha demostrado en humanos, Komine-Aizawa et allí Clin.Vaccine Immunol. 17, 1500 –1506 (2010) demostraron que BCG incrementó las defensas de conejillos de indias viejos contra M. tuberculosis. La información epidemiológica existente sugiere que la vacuna BCG puede incrementar la protección antiviral pulmonar no específica. 12 o 18 meses después de aplicar la vacuna contra la tuberculosis (BCG) para protección inespecífica, la vacuna específica contra el COVID-9 ya estaría disponible y esos adultos mayores, junto al resto de la población, recibirían el beneficio de la nueva vacuna.