• 22/11/2024 00:00

Proyecto de ley 163: entre especulación financiera y conflictos de intereses

Frenadeso siempre advirtió que los sectores impulsadores de la privatización de la CSS venían por los fondos y las reservas de la Caja. El proyecto presentado por el gobierno de Mulino lo confirma

Los verdaderos intereses detrás del proyecto de ley 163 de la CSS, que se encuentra en la Asamblea Nacional, buscan hacerse de los fondos de los asegurados, tal como desde hace años venimos denunciando. Son miles de millones de dólares que irán a pagar a manos del sector financiero-bancario, el mismo que negó la moratoria bancaria a la población durante la pandemia. Son los mismos que han obstaculizado que la CSS tenga una cartera sólida para hacer préstamos (personales e hipotecarios) a los jubilados (que hoy pretenden eliminar, artículo 70).

Frenadeso siempre advirtió que los sectores impulsadores de la privatización de la CSS venían por los fondos y las reservas de la Caja. El proyecto presentado por el gobierno de Mulino lo confirma.

Primero, se crea el Fondo General de Reserva de la CSS, compuesto por todos los fondos (Fondo Único Solidario, Fondo de Enfermedad y Maternidad, Fondo de Administración y Fondo de Riesgos Profesionales).

Segundo, se otorga pleno poder al director de la Caja para contratar personas jurídicas (privatización) que podrán administrar (administradoras de pensión) una parte o el total de los recursos del Fondo.

Tercero, la inversión de los recursos del Fondo puede destinarse hasta un 75 % a activos en títulos de deuda (emitidos por Panamá y Estados Unidos), hasta 15 % en instrumentos de crédito emitidos o totalmente garantizados por Estados extranjeros, hasta un 10 % en instrumentos de capital emitidos por personas jurídicas (empresa privada), instrumentos de crédito emitidos o totalmente garantizados por instituciones financieras multilaterales de crédito hasta 20 %. Todo ello en un solo artículo, el leonino y privatizador artículo 65. Pero tiene más, el acápite 7 de este artículo establece que “no podrá hacer inversiones en minería ilegal”, se preparan para la reapertura de la mina (legalizarla), proyecto ya declarado inconstitucional dada la lucha del pueblo panameño en el 2023.

En la propuesta de Conusi planteamos que los recursos fueran invertidos en proyectos productivos que generaran empleo digno, salario justo y por ende cuotas a la CSS. El proyecto es contrario a este planteamiento (ver artículo 66), se destina 15 % del Fondo para Inversiones para la promoción de proyectos nacionales, los cuales pasan a manos privadas (bancos de licencia general). Asimismo, el artículo 67 que establece “otras inversiones”, las promueve en el plano financiero-especulativo, salvo el acápite 1 que hace referencia a bienes muebles o inmuebles que requiere la Caja para la prestación de sus servicios.

Tal como advertimos querían el 100 % de los fondos y se lo llevan de prosperar este proyecto. Querían las reservas, proyectadas por la OIT para el 2095 en casi 200 mil millones de balboas y se las llevan. ¿Quiénes son los grandes beneficiarios con este proyecto? Los mismos de siempre el capital financiero-bancario, los especuladores. Otra vez se favorece la mafia financiera.

Por otra parte, como denuncia Frenadeso, 13 veces aparece en el proyecto de ley 163 “conflictos de intereses” como causal de despido al director, miembros de la junta directiva y altos funcionarios de la CSS, pero quienes elaboraron el proyecto presentan intereses directos con aseguradoras (Dino Mon), bancos y administradoras de fondos de pensiones (Felipe Chapman). Claramente, ello representa conflicto de intereses.

Conusi en esta etapa de lucha está preparada para enfrentar y derrotar este nefasto proyecto y exigir respeto al carácter público y solidario de la salud y la seguridad social. Exigimos la no privatización de los fondos de los asegurados, que devuelvan las cuotas robadas por los empleadores a los asegurados, adecentar la institución enfrentando las mafias enquistadas en la CSS (como la farmacéutica). Rechazamos las medidas paramétricas como el aumento de la edad de jubilación y las cuentas individuales, proyecto fracasado en todas partes del mundo dada la baja cobertura y pensiones que imponen.

En este escenario de lucha en defensa de los intereses de la clase obrera, recordamos que, en 1995, al calor de la lucha contra las reformas al Código de Trabajo, nació Conusi. Felicitamos a todos los compañeros y compañeras que forman parte de la Confederación Nacional de Unidad Sindical Independiente, organización que nace formalmente el 21 de noviembre de 1998, y que hoy celebra sus 26 años de fundación bajo el lema “Firmes y combativos”.

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