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- 09/11/2023 10:38
Limpiando la mesa
Panamá está inmersa en la tercera semana de un proceso insurreccional en todo el país, con participación activa de grandes sectores de la sociedad panameña. Estamos en presencia de un gran cambio del modelo post invasión que se agotó. Este cambio viene siendo impulsado por las grandes masas del pueblo que espontáneamente se han lanzado a tomar las calles expresando su inconformidad y profundo malestar acumulado, en contra del modelo actual.
Este modelo de nación, surge después que las fuerzas militares de los EE.UU. impusieron por la fuerza de las armas a los actuales poderes económicos, y políticos que nos han gobernado a lo largo de estos últimos 32 años.
Que ha venido ocurriendo en la práctica, estas fuerzas económicas y políticas instaladas en el poder por una acción de guerra del US Army en diciembre de 1989 traicionaron a sus patrocinadores. Pocas son las empresas norteamericanas que han podido desarrollar sus negocios en Panamá.
La ampliación del canal la realizó una empresa española, la empresa Odebrecht de Brasil ha desarrollado los principales proyectos, las empresas: franceses, chinas, otros países sí han venido haciendo negocios y grandes inversiones en Panamá.
El gran problema es que las empresas norteamericanas no pagan coimas, son penados por sus leyes. Y por esta razón no pueden entrar a competir en Panamá. Mientras que las otras empresas transnacionales si pagan coimas, entran a competir en los grandes proyectos de construcción. Esa es la gran diferencia, la gran corrupción.
El último funcionario del gobierno de Estados Unidos que venía de visita a Panamá era el zar anticorrupción gringo, canceló su visita, esto sucedió al inicio de la crisis.
“Ciudad de Panamá, 23 oct (EFE).- El encargado anticorrupción del Departamento de Estado de EE.UU., Richard Nephew, canceló una visita a Panamá prevista para este lunes, en el marco de un viaje a este país centroamericano y Colombia”.
Estamos en presencia de un proceso de cambios del modelo de nación surgido después de la invasión militar de hace 32 años se agotó. Estamos enfrente a una revolución de octubre de las fuerzas diversas no solo de izquierda, es el pueblo movilizado, pocas veces se ha visto este fenómeno social en Panamá protestan en las calles altamente motivadas por las redes sociales empleando el método de la primavera árabe.
Me atrevo a afirmar que se está produciendo un gran parto de una nueva nación, doloroso, con sacrificios.
Estamos en presencia de la primera parte de un proceso de cambios en desarrollo, que denominó como "La Limpieza de la Mesa", de aquellas fuerzas económicas y políticas que detentan el poder desde la invasión militar de 1989. Hoy esas mismas fuerzas son hostiles a los EE.UU. Que está en guerra no solo en contra de China, están enfrentados a Rusia, al mundo musulmán. Panamá es parte de los anillos de la defensa interna del territorio continental gringo.
Así lo resumió el General Omar Torrijos. “Seguimos estando bajo el paraguas defensivo del Pentágono”.
Esta "Limpieza de la Mesa" es el efecto acumulado del descontento del pueblo donde hay pobreza, rabia, y desesperanzas. Estalló es un proceso irreversible y el contrato minero fue el detonante. La juventud no ve su futuro a pesar de vivir en un país rico.
No observó indicios de un plan del Foro de San Pablo en las calles hay una diversidad de protestas, que no son solo de izquierda, son miles de manifestantes que se han manifestado pacíficamente convocados por las redes sociales con el método de la Primavera Árabe.
Este método lo usó EE.UU. exitosamente para organizar a las masas para derrocar a viejos regímenes en: Túnez, Egipto, Libia, Siria.
Estas redes son administradas por cuadros de panameños que en su mayoría han sido formados en las universidades de los EE.UU. Formados en una orientación de socialismo norteamericano impulsado por los teóricos: Berny Sanders. La campaña política para la nominación presidencial de Bernie Sanders del 2015 marcó el punto de inflexión en el “Socialismo democrático”. Etiqueta Sanders para definir su teoría política, ya que sus principales discípulos están en las grandes universidades gringas.
Esta nueva corriente está en las calles de Panamá ejerciendo su protesta y exigiendo una “Limpieza de la Mesa” de la corrupción.