Gobierno presenta plan estratégico 2025-2029 para el turismo, agro, logística e infraestructura vial

Es una noticia alentadora, ya que el Gobierno anterior tuvo que fajarse con la pandemia de la Covid-19, que afectó a toda la sociedad, especialmente al sector agropecuario que confrontó la falta de alimentos en todo el país.

Logró elaborar y aprobar la Ley 352 PADE, que incluye la legalización de la Extensión Agropecuaria en 15 de sus artículos, que permitirá tecnificar nuestro agro en todos los niveles y un título para legalizar la tenencia de las tierras en uso agropecuario.

Según el INEC, el 40 % de las tierras en uso agropecuario no tienen título de propiedad y sus dueños o sus familiares no pueden acceder al crédito, segregar o vender. En la Anati existen 100.000 solicitudes de titulación.

Las tierras sin titular, según el INEC, están distribuidas así: Bocas del Toro, con 78.307; Coclé, con 67.769; Colón con 91.536; Chiriquí, con 55.026; Darién con 118.431; Herrera con 24,643; Los Santos, con 45.821; Panamá, con 150, 334; Veraguas, con 168.623.

Con la aprobación y sanción de la Ley 352 PADE, se incluyen 15 artículos para el establecimiento del programa de extensión agropecuaria, en sus 91 artículos sobre otros temas importantes. Esto en coordinación con la Comisión de Asuntos Agropecuarios de la Asamblea Nacional y los dirigentes de las organizaciones de productores de todos los rubros agropecuarios que se producen en nuestro país.

La falta de capacitación tecnológica o extensión agropecuaria promueve a los productores hacer el uso indiscriminado de agroquímicos y medicamentos veterinarios que encarecen para el consumidor los productos de la canasta básica alimentaria, como la ivermectina, que tiene residualidad en la carne de res.

En el cultivo de arroz mecanizado también se utilizan enormes cantidades de insecticidas, herbicidas, como el glifosato que, según la Organización Mundial de Salud, es prohibido en Francia y en el estado de California de Estados Unidos. Aquí en Panamá, el productor lo usa como le interesa porque no tiene un técnico que lo visite temporalmente para corregir esa mala práctica de cultivo.

Nuestro país clasificó para participar del Pacto Verde Europeo que entrará a regir a partir del próximo año y tendrá vigencia hasta 2050. El pacto consiste en producir nuestros productos exportables como: frutas tropicales (banano, piña, mango, aguacate plátano, cucurbitáceas, mango) y demás, cuyos cultivos serán financiados y asegurados en el mercado europeo de 500 millones de habitantes por ese organismo, siempre y cuando el país cumpla con las leyes protectoras al trabajador agrícola, no dañe el medio ambiente y haga un uso adecuado de los agroquímicos y otros.

En la ganadería regenerativa, que es el reemplazo de la ganadería tradicional, también se usan en exceso los productos químicos para “controlar las malezas de los pastos”. En el norte de Colombia, por ejemplo, cuyos suelos y pastos son iguales a los nuestros, tienen varios años de estar aplicando la ganadería regenerativa mediante el establecimiento de mangas de potreros separadas con cercas eléctricas que funcionan a base de energía solar.

Todas estas prácticas modernas se pueden aplicar si los técnicos estatales pueden llegar donde está el ganadero o el agricultor y enseñarles con un programa que se denomina extensión agrícola, utilizado en Estados Unidos por más de 230 años.