Felicidades, Chitré

El histórico y reconocido distrito de Chitré se encuentra de fiesta, ya que esta semana celebra sus 174 años de fundación como distrito parroquial, ubicado en el centro-oeste de la península de Azuero, es la capital de la provincia de Herrera y cuya superficie es de 87.8 kilómetros cuadrados, lo constituyen cinco pintorescos corregimientos.

Fundado un 19 de octubre de aquel año de 1848 por el general Tomas Herrera, este importante distrito se encontraba en una disyuntiva, ya que debido a los movimientos independentistas dependía de la alcaldía mayor de Natá y seguidamente bajo la de Los Santos respectivamente, además de ser un pequeño lugar que era habitado mayormente por indígenas.

Irónicamente, en 1855, debido a la recién creada provincia de Azuero, empieza a formar parte de la región y cambia su denominación de distrito parroquial a distrito de Chitré, es importante señalar que, debido a ciertas incongruencias la Asamblea Constituyente de la época, para 1860 se elimina y se plantea la idea de ser la provincia de Herrera, pero no es hasta 1915, bajo la administración del visionario e institucional presidente Belisario Porras que se crea en definitiva la provincia de Herrera con la cabecera en la desarrollista ciudad de Chitré.

Es así como, repasando los parajes de la historia, muchos grandes ciudadanos son recordados por las presentes generaciones por ser sus fundadores, de los cuales podemos mencionar ilustres caballeros: Blas Tello, José Burgos, Idelfonso Pérez, Carlos Rodríguez y Eugenio Barrera, entre otros.

Se constituye en cinco corregimientos: Monagrillo, San Juan Bautista, Chitré cabecera, La Arena y Llano Bonito.

Adicional a los antes señalado, es imperante reconocer los aportes para el desarrollo de la denominada “ciudad que crece sola” de un importante hombre que significó un pilar fundamental, me refiero, a Sion Enrique Cohen, mejor conocido como Aarón, hombre de espíritu y corazón noble.

Sin lugar a duda, una de las obras más sobresalientes que llevó a cabo fue la construcción de la carretera Divisa-Las Tablas y la circunvalación externa de Chitré, donó los terrenos y puso en marcha la construcción de las escuelas Jardín de la Infancia Juan T. del Busto, el Instituto Panameño de Habilitación Especial (IPHE) y el Centro de Formación del Ifarhu.

Su humilde accionar lo llevó a convertirse en un empresario exitoso que dio un apalancamiento positivo a la gestión desarrollista en materia de generación de empleos a muchos lugareños, ello sin dejar perder la perspectiva de creer en las instituciones con las cuales siempre camino de manos.

Hoy día, su legado sigue vivo, sus familiares les han dado seguimiento a sus actividades empresariales, manteniendo presente la ayuda a los que menos tienen, coadyuvando en el mantenimiento del equilibrio y la esperanza de mejores tiempos, por eso y mucho más, felicidades, Chitré.