• 29/03/2024 00:00

Celebremos un Viernes Santo

En el Viernes Santo, los cristianos en ambas tradiciones participan en la liturgia de la Pasión [...] Feliz celebración del “Triduo Pascual” y el “Domingo de Resurrección”, no olviden gritarle al mundo: ¡Aleluya! Cristo ha resucitado

El Viernes Santo es una festividad importante en ambas tradiciones: católica como protestante, y que conmemora la crucifixión y muerte de Jesucristo en la cruz. Según los evangelios, Jesús fue arrestado en el huerto de Getsemaní después de la celebración con sus discípulos en esa última cena (Juan18,1-19,40). Ya estaba configurada su traición por uno de sus discípulos, “Judas Iscariote”, quien lo entregó a las autoridades religiosas y romanas.

Interesante es que, durante su juicio Jesús fue condenado a muerte por decisión del gobernador Poncio Pilato y la incesante presión del pueblo reunido en torno al palacio. Fue llevado Jesús, al Gólgota, donde fue crucificado junto a dos supuestos criminales. El Viernes Santo es un día de profundo dolor y luto para los cristianos en ambas tradiciones, ya que recuerdan el sufrimiento extremo e inhumano que Jesús de Nazareth padeció por toda la humanidad.

El Viernes Santo también tiene un significado espiritual más profundo. Según las lecturas bíblicas, Jesús es considerado el Sumo Sacerdote, perfecto y compasivo que puede entender nuestras debilidades y tentaciones (Hebreos 4,14 -16, 5,7-9). Él ofreció oraciones y súplicas con gran clamor y lágrimas, y fue escuchado debido a su temor reverente. Jesús de Nazareth, aprendió la obediencia a través de su sufrimiento y se convirtió en la fuente de salvación eterna para aquellos que le aceptan en sus corazones.

En el Viernes Santo, los cristianos en ambas tradiciones participan en la liturgia de la Pasión, que incluye la lectura de los evangelios y otras lecturas, que relatan los eventos de la crucifixión (Juan 18,1-19,40, el Salmo responsorial, 31:2, 6, 12-13, 15-17, 25. La Segunda lectura: hebreos 4:14-16; 5:7-9 y el santo evangelio según san Juan 18:1--19:42). También se realiza el tradicional “Vía Crucis”, una devoción que recuerda los pasos de Jesús hacia el calvario. Aunque el mismo puede rezarse desde el inicio de la Cuaresma, durante este viernes, los fieles se abstienen también de comer carne para solidarizarse con los más necesitados, los más vulnerables de nuestra sociedad, y, por otro lado, se sumergen en un ambiente de recogimiento y reflexión sobre el sacrificio de Jesús por la humanidad con la característica especial del silencio pronunciado en sus devociones.

El Viernes Santo marca también el comienzo del Triduo Pascual en la festividad cristiana en ambas tradiciones. El Triduo Pascual es un período de tres días que conmemora los eventos centrales de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. Inicia con el Viernes Santo, continúa con el Sábado Santo y culmina en la celebración del Domingo de Resurrección.

Durante el Viernes Santo, ambas tradiciones, recuerdan y reflexionan sobre la crucifixión y muerte de Jesús en la cruz. Es un día de profundo dolor y luto, pero también de esperanza en el amor y la redención que Jesús nos ofrece.

Después del Viernes Santo, llega el “Sábado Santo”, también conocido como el “Sábado de Gloria”. Durante este día, la Iglesia católica vive un tiempo de silencio y espera, mientras Jesús yace en el sepulcro. Es un día de reflexión profunda sobre el misterio de la muerte de Cristo y su descenso a los infiernos para liberar a los justos.

Finalmente, el Triduo Pascual culmina con la celebración del “Domingo de Resurrección”, también conocido como la “Pascua”. En esta festividad, los cristianos en ambas tradiciones celebran la resurrección de Jesús de entre los muertos, su victoria sobre el pecado y la muerte. Es el día más importante y alegre del año litúrgico, ya que marca el triunfo de la vida sobre la muerte y la promesa de la vida eterna.

En conclusión, el Viernes Santo marca el inicio del Triduo Pascual en la festividad cristiana. Es un período de tres días que conmemora la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo. A través de estas celebraciones, los cristianos en ambas tradiciones reflexionan profundamente sobre el amor y la redención de Jesús, y celebran su victoria sobre la muerte en el “Domingo de Resurrección”.

Por lo tanto, deseo afirmar que el viernes es “Santo” en la semana mayor, de hecho toda la semana es considerada santa por la Iglesia y es un recordatorio a todos los cristianos del mundo sobre la pasión y el amor inmenso que Jesús tuvo por la humanidad, así como una invitación a todos nosotros en especial en esta tierra istmeña a seguir su ejemplo y buscar la redención a través de la fe y la obediencia. Feliz celebración del “Triduo Pascual” y el “Domingo de Resurrección”, no olviden gritarle al mundo: ¡Aleluya! Cristo ha resucitado.

El autor es sacerdote
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