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Carlo Rognoni: 'Es un sacrificio de $30 millones los que dejamos de cobrar en importación'
- 14/08/2022 00:00
- 14/08/2022 00:00
El gobierno calcula en $30 millones el monto del arancel que dejará de percibir en los próximos seis meses de los productos importados incluidos en la canasta básica en la discusión de la mesa única del diálogo. Además, otros $6 millones serán la inversión en los subsidios de los productos panameños que adquirirá de los productores nacionales, una cifra flexible, considerando el precio de compra y venta. Esas son las cifras vertidas por el viceministro de Desarrollo Agropecuario, Carlo Rognoni al Polígrafo de La Estrella de Panamá. ¿De dónde compensarán ese monto en el presupuesto? El funcionario menciona la contención del gasto que inicia con la reducción del 10% de la planilla invitando a los colaboradores jubilados a acogerse a un plan de retiro con ciertos beneficios para oxigenar las instituciones, además de otras medidas que modificarán los planes iniciales del presupuesto. Sobre la prórroga del subsidio de la gasolina y el diésel a $3.25, explica que es probable su continuidad por tres meses más, pero dependerá de la decisión que se adopte en el gabinete, y lo más importante, la cotización del petróleo en el mercado internacional.
Hay tres fórmulas que utilizamos para lograr la reducción del costo de la canasta básica. En primer lugar, hay 18 productos que tienen el precio regulado, teníamos 8 productos al inicio de año, pero en julio se incluyeron 10 productos más que buscan un precio máximo de venta al consumidor. Ahí realmente el Estado no está haciendo ninguna inversión de subsidio, sino un acuerdo que se llega en base a los precios que se reportan en el mercado, una especie de congelación de precios. La segunda fórmula, que sí implica un sacrificio del Estado, es la eliminación del impuesto de importación de 17 productos y lo que se hizo fue quitar el impuesto y poner un precio máximo de venta. Con esto logramos un sacrificio de $30 millones que dejamos de cobrar en importación proyectado en seis meses para dar un mejor precio al consumidor. Es lo que tenemos contabilizado hasta el momento en base a una encuesta que está haciendo la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco).
El tercer bloque es de los productos Panamá, adquiridos por el Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) a precio de mercado y vendidos a un precio de descuento del 25% del precio de venta. No es el 25% del costo o del valor de adquisición del IMA, sino del precio de venta del mercado. Lo que se busca es ofrecer productos nacionales a los proveedores que nos vendan. Es un programa voluntario. Es decir, el productor va a tener la voluntad de venderle al gobierno con las complicaciones que eso conlleva, como la demora en el pago y la burocracia con la que tenemos que vivir para garantizar la transparencia. Esos productos son 37, sumados a los anteriores son 72 productos de los que estamos hablando.
Va a depender del precio de adquisición y del precio de venta.
Lo que pasa es que hay productos que probablemente no le perdamos plata porque lo vamos a comprar a un buen precio de mayorista y lo vamos a poder vender un 25% menos del precio de venta que normalmente es la utilidad que tiene un supermercado o un establecimiento. Ahora mismo no te puedo decir una cifra. Hemos empezado con siete productos que estamos incorporando a las ferias del IMA de los productos que nos solicitaron en la mesa única de diálogo.
El monto del presupuesto de lo que cuesta el programa de aquí a diciembre si lo tenemos, y son $6 millones recordando que vamos a vender los productos y ese dinero irá al fondo de las tiendas del IMA el cual va a compensar la inversión que se va a hacer. Es un aspecto dinámico, las ferias del IMA trabajan con una cantidad de productos, pero vamos a incorporar otros y en poco tiempo vamos a poder medir realmente cuánto va a costar ese 25%.
Vivimos en un país donde el principio de la libre empresa rige. Nosotros estamos en conversaciones con la agroindustria para buscar un pronto pago. La experiencia que ha tenido el gobierno con las petroleras ha sido muy positiva. Se está pagando en menos de 15 días las cuentas de lo que cuesta mantener el precio del combustible en $3.25 y de diésel. Se está buscando una fórmula a través de un fideicomiso para pagar oportunamente, no solo en este caso a las petroleras, sino también a la agroindustria.
El IMA tiene un fideicomiso que se estableció en el año 2007, que es el fideicomiso para la solidaridad alimentaria que hemos estado utilizando. Eso se maneja en conjunto con la Contraloría y con el Banco Nacional de Panamá.
Los 35 productos de que hablamos al principio van a estar en el comercio a nivel nacional. El resto de los productos panameños estarán en las tiendas del IMA y en las ferias. Hasta ahora hemos tenido resultados muy positivos en las comarcas, pero como bien señalas, tenemos que garantizar una buena condición para pagar. Por ejemplo, en el plan Panamá solidario estábamos en emergencia y pagamos oportunamente. Hemos buscado alternativas con la Caja de Ahorros y el Banco Nacional, unos productos financieros para que ellos puedan descontar de inmediato la cuenta mientras pasa refrendo de Contraloría, a un costo muy atractivo porque quien suple al gobierno tiene la facultad de hacer efectivo su cuenta de inmediato y lo que va a costar ese financiamiento del banco lo hace atractivo. Esa es una alternativa a las demoras que pueda tener el Estado.
Uno de los temas es poner puntos de venta en las ferias del IMA para que vengan los productores a vender sus productos directamente a los consumidores.
En esa situación facilitaría un punto de venta. Es algo de lo que se habló en Penonomé, la gran mayoría de los 37 productos se pueden vender en las ferias directamente. Eso va a depender del lugar donde estemos.
El descuento es que lo van a poder comprar al productor a un precio muy inferior de lo que se consigue en un establecimiento comercial.
Yo solicité tres veces en la mesa su presencia y no fueron las únicas, que se permitiese escuchar a más 20 asociaciones y cooperativas que quieren hacer sus aportes a mesa. Incluso el Presidente lo reiteró, que es la posición del gobierno que hayan otros participantes en la mesa porque hay muchos rubros que no están representados y tienen todo el derecho de estar ahí. Por eso hemos tenido mucho cuidado con dos medidas, que eran los 18 productos regulados y se tomó la decisión de quitar el arancel importación y regular el producto de venta. Como decíamos, dentro del principio del programa está la voluntad de vender o no al gobierno.
El compromiso tiene una fecha de cumpleaños de seis meses y eso da la oportunidad de mejorar. Hace rato me hablabas de la disponibilidad del producto, el papel aguanta todo. Podemos poner un precio muy bonito pero si no nos venden el producto no tendrá efecto práctico. Por eso tenemos que escuchar a los comerciantes, al sindicato de industriales, a la Fedecámara y las 20 asociaciones que quieren estar ahí.
Bueno, el miércoles vimos eso y el clamor de los productores y la exigencia era que mantuviésemos las vías abiertas.
Nosotros somos respetuosos del derecho que tienen de protestar…
Tuvimos 21 de cierre, no aguantamos un día más de cierre y ver cómo se estaban perdiendo los productos, sobre todo de los pequeños productores.
Eso va a depender del precio internacional del combustible y es algo que escapa a mi competencia. Es la medida más importante que hemos tomado y a veces se nos olvida el enorme sacrificio que implica mantener el precio a ·3.25, que son $100 millones al mes. Dependerá del ministro Héctor Alexander que le toca ubicar los recursos y cuidar las finanzas. Se va a extender tres meses más siempre y cuando la decisión la apruebe el Gabinete y la cotización del precio internacional del petróleo.
Por ahora está vigente y hay que dejar que cuando llegue el momento, estoy seguro de que vamos a tener la discusión y la decisión dentro del gabinete.
En este momento hay una política de contención del gasto y se están ubicando los recursos por parte de la dirección de presupuesto dentro de las instituciones del estado, lo cual implica sacrificar algunas actividades que se tenían previstas para este año entendiendo que es una emergencia que ha surgido y será atendida.
Las medidas que se anunciaron como reducir la planilla estatal un 10%, eso ya lo hemos estado comentando en los ministerios.
No sé cuánto impacta globalmente, pero es una medida que implica no crecer, los ministerios estaban creciendo en planilla y tenemos ahora ese compromiso. El otro compromiso anunciado es el establecimiento de un programa de retiro voluntario para los compañeros jubilados que laboran en el estado y se les reconoce en parte el tiempo de servicio y el esfuerzo, pero así también damos oportunidad de oxigenar las instituciones con su retiro.
Uno de los principios nuestros es mantener la seguridad alimentaria y lo hemos visto en rubros que estaban deprimidos como la cebolla o la papa. Hemos visto un incremento en la superficie sembrada por esa confianza que mencionaba. En el caso del arroz, pese a que se ha incrementado el costo por hectárea y que tenemos un tope al precio de arroz de primera de .40 la libra, hasta antes de los cierres vimos incrementos en la cantidad de hectáreas con respecto al año pasado. Los cierres afectaron en la siembra del arroz y tenemos que ver cómo complementamos la producción nacional con importación. Ahora se están descargando 600 mil quintales de arroz en cáscara procedentes de Estados Unidos para complementar la producción nacional.
Nosotros enviamos una nota formal a través de la Cancillería al secretario de Estado y a la oficina comercial de ese país y ellos contestaron. Dijeron que estaban dispuestos a hablar técnicamente de los cuatro rubros que solicitamos. Nosotros no estamos planteando renegociar el tratado comercial. Tenemos arroz, carne de pollo y cerdo y algunos productos lácteos. Estos productos representan el 50% del ingreso del sector agropecuario del PIB y ha sido la posición de hablar sobre los términos y condiciones del programa de desgravación.
Ellos s mantienen de que hay que cumplir el tratado, pero nos dejaron saber que nos íbamos a reunir para ver técnicamente estos temas.
Nosotros explicamos qué pasaría con el sector agropecuario si quedamos al 0% de arancel. Nos destrampan en esos cuatro rubros.
Estamos llegando, eso finaliza en el 2030, en 2025 hay una revisión, sin embargo, nosotros no vamos a estar en el gobierno, entonces la idea es que adelantemos eso y les mostremos los datos científicos que tenemos.
Queremos revisar los cuatro temas y si eso implica algún tipo de renegociación se da la posición nuestra. El embajador de Panamá en Washington está haciendo ese esfuerzo y esperamos sentarnos pronto para poder mostrarles el estudio que hizo el sector privado (Asociación Nacional de Avicultores, Asociación Nacional de Ganaderos) juntamente con el gobierno.
Hay distintas alternativas. Nosotros podemos pedir más tiempo, también podrían tratarse esos productos sensitivos a través de cuotas, se cumple la cuota y no sigue llegando producto al 0%. Es una medida que nos gustaría plantear porque sentimos que les damos acceso al mercado, pero sin perjudicar.
Se tiene la estadística del histórico de las importaciones. Tenemos una cuota de carne de cerdo, pero eso se va a eliminar, va a llegar al libre comercio y es lo que nos preocupa. Con Estados Unidos hay algo interesante, antes del tratado Panamá exportaba $300 millones de productos agropecuarios al año a ese país, hoy exportamos $100 millones. Los números no están saliendo para Panamá.
Bueno, ahora esa es la posición un poco de Estados Unidos, eso hay que entenderlo.
En esa época no sé si recuerdas que a algunos productores los cambiaron de rubro, si sembraban melón, los pusieron a sembrar sandía y así. El presidente (Laurentino) Cortizo, buscando esa soberanía agroalimentaria, hemos definido muy bien los productos sensitivos, eso es lo que tenemos que producir aquí algunos más eficientemente que otros. Pero no podemos dejar de producir arroz ni leche. Para eso es la política de Estado para el sector agropecuario que aprobamos en el gabinete.
Nosotros tenemos un sistema que no está al 100% que sectoriza y mide las hectáreas de siembra. Casualmente estamos trabajando con la AIG, aunque fue una de las primeras cosas que impulsamos, se trastocó con lo sucedido. Se están incorporando otras herramientas a los programas ya existentes para tener la base de datos el otro año.