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- 18/11/2023 00:00
- 18/11/2023 00:00
Panamá es uno de los países de América Latina que menos invierte en educación. Aunque por norma debe destinarse el 6% del PIB para este sector, en la práctica esto no se ha cumplido.
Para Eduardo León –empresario, presidente de la Fundación Mentes Brillantes y fundador de Edupan, compañía dedicada a suministrar servicios tecnológicos en temas educativos– la crisis en el sistema educativo no es de ahora y no empezó con las protestas antimineras que cumplen ya 28 días.
“Es algo de arrastre que viene muy fuerte y que tiene que preocuparnos como sociedad. ¿Cuál es el recurso más valioso que tiene un país?, su gente. Si no los estamos formando y le damos la importancia a la educación, estamos condenándonos al fracaso como país”, señaló este viernes en “Portada” de La Estrella de Panamá.
León indicó que a pesar de que Panamá tiene una importante cobertura, especialmente en la primaria, en los niveles superiores existe una alta deserción escolar.
Esto, dijo, tiene que ver con la revisión de la capacitación del cuerpo docente. “Ellos son el motor para transformar la educación. Hay que hacer un trabajo importante tanto en formación de los docentes actuales, como también atraer el mejor talento (para ser futuros profesores)”.
Consideró que el Ministerio de Educación (Meduca) se debe reestructurar con un esquema de “organización” en la que una entidad externa la evalué.
“Tenemos que tener una entidad independiente que evalúe a la comunidad educativa. Sea del Estado, privada o público-privada”, sostuvo
Para León, los docentes también deben evaluarse, aunque existe “resistencia”.
“La calidad de la educación es directamente proporcional a la calidad del docente que tenemos en el aula de clase”, remarcó el fundador de EduPan, quien reconoció que aún persisten problemas con la disposición de recursos y salarios para el cuerpo docente en las escuelas públicas.
Lamentó que en los últimos gobierno no se haya establecido una política educativa que tenga coherencia en el tiempo, tema que dificulta establecer mediciones y continuidad del trabajo que se desarrolla.
“Necesitamos un norte, con decisiones que tengan que ver con nuestra competitividad. Por ejemplo, cuáles son nuestras fortalezas y como debemos enfocarlas”, dijo.