FMI dice que subida de tasas generará inestabilidad financiera e inflación

- 04/03/2025 00:00
- 03/03/2025 17:55
El Fondo Monetario Internacional (FMI) realizó un nuevo estudio donde analiza la relación entre la inflación y la rentabilidad bancaria para comprender diversas que preocupaciones de los inversionistas que se dieron antes y pospandemia, y que incluso pudieron influenciar en la quiebra del Silicon Valley Bank y de otros prestamistas estadounidenses a principios de 2023.
Algunas de esas preocupaciones eran que las tasas de interés y la inflación persistentemente bajas pudieran mermar los beneficios de los bancos, así como la rentabilidad de los bancos cuando, con la reapertura tras la Covid-19, se dispararon la inflación y las tasas de interés de los bancos centrales.
Según el nuevo estudio del FMI, la relación entre la inflación y la rentabilidad bancaria les ayuda a comprender las preocupaciones. Y, la mayoría de los bancos están en buena medida a salvo de las fluctuaciones inflacionarias, ya que la exposición de sus ingresos y sus gastos tienden a compensarse mutuamente. Sin embargo, algunos presentan una exposición significativa a la inflación, lo que podría causar inestabilidad financiera en el caso de que pérdidas concentradas provocaran un pánico más generalizado en el sector bancario.
Afirman que varios bancos centrales importantes están reexaminando sus marcos de política monetaria tras el repunte inflacionario pospandemia, y una comprensión más profunda de los vínculos entre la inflación y la rentabilidad bancaria podría ayudar a diseñar mejores marcos de política monetaria.
Los resultados del FMI indican que los bancos centrales quizá deberían tener en cuenta la estabilidad financiera al fijar su política monetaria para combatir la inflación.
¿Es importante la inflación para la rentabilidad bancaria? Sorprende la escasa atención que se le ha prestado a esta pregunta. Para darle respuesta, combinamos datos sobre balances e ingresos de más de 6.600 bancos de economías avanzadas y emergentes con casi tres décadas de datos económicos del FMI.
La mayoría de los prestamistas parecen estar en buena medida cubiertos frente a la inflación, ya que tanto los ingresos como los gastos de los bancos aumentan con la inflación en grados similares. Los ingresos y los gastos vinculados al endeudamiento y la concesión de préstamos están expuestos indirectamente a la inflación, pues reaccionan principalmente a las tasas de interés de política monetaria, que fluctúan en respuesta a la inflación. En cambio, otros ingresos y gastos —como los derivados de actividades bancarias no tradicionales, servicios, salarios y alquileres— se ven afectados de manera directa por las variaciones de precios.
A escala nacional, el impacto de la inflación en los ingresos y gastos de los bancos varía considerablemente de un sistema bancario a otro. En algunos países, las variaciones en la inflación se reflejan en los ingresos y gastos de forma mucho más rápida que en otros. No obstante, de nuevo, dado que en la mayoría de los países ambos aumentan en grados similares, gran parte de los sistemas bancarios parecen estar, en buena medida, protegidos contra la inflación.
Entonces, ¿debe preocuparnos la inflación? Según el estudio del FIM se logró identificar vulnerabilidades específicas, entre ellas: algunos bancos son especialmente susceptibles a la inflación, debido a sus diferentes modelos de negocio y de gestión del riesgo. Los bancos atípicos, tanto en las economías avanzadas como en las de mercados emergentes y en desarrollo, pueden sufrir grandes pérdidas si se disparan la inflación y las tasas de interés.
Afirma el FMI que sorprendentemente, el 3 % de los bancos de las economías avanzadas y el 6 % de los bancos de las economías emergentes están al menos tan expuestos a las tasas de interés elevadas como lo estuvo el Silicon Valley Bank en el momento de su quiebra. Además, los bancos de las economías emergentes parecen estar más expuestos a la inflación de manera directa, posiblemente debido a una indexación de precios más generalizada.
En un contexto de inflación elevada, el endurecimiento de la política monetaria, aunque necesario, podría acarrear pérdidas significativas para los bancos muy expuestos. En este caso, los clientes y los inversionistas podrían considerar que los riesgos atañen a todos los bancos, lo que podría desencadenar pánico e inestabilidad financiera.
Sostienen que será necesario reforzar la regulación y la supervisión prudenciales, aumentar la gestión de riesgos que se exige a los bancos, mejorar la transparencia y utilizar evaluaciones de riesgo detalladas que tengan en cuenta los factores clave que nuestro estudio destaca para un amplio conjunto de bancos ayudaría a contener de manera sistemática la exposición a la inflación.
Independientemente a estas mejoras, el FMI indica que si las pérdidas en algunos bancos dejan margen para un contagio más amplio, los bancos centrales podrían tener que sopesar las subidas de tasas para contener la inflación a la luz de que ese movimiento pueda provocar inestabilidad financiera.