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Actualizado
- 23/01/2015 01:00
Creado
- 23/01/2015 01:00
El fabricante de teléfonos inteligentes más grande del mundo no quiere arriesgar la nueva producción y opta por usar sus propios circuitos
Samsung Electronics Co. usará sus propios microprocesadores en la próxima versión del teléfono inteligente Galaxy S, abandonando su utilización de un chip de Qualcomm Inc. que recalentó durante las pruebas de la empresa coreana, dijeron personas con conocimiento directo del tema.
Samsung, el fabricante de teléfonos inteligentes más grande del mundo, probó una nueva versión del chip Snapdragon de Qualcomm, conocido como el 810, y decidió no usarlo, dijeron las personas, que pidieron no ser identificadas en razón de que el tema no ha sido discutido públicamente. Las acciones de Qualcomm cayeron.
La decisión constituye un golpe para Qualcomm, el fabricante más grande del mundo de semiconductores utilizados en teléfonos, que viene abasteciendo a Samsung de chips que funcionan en los teléfonos más vendidos de la empresa.
La compañía surcoreana, el segundo fabricante de chips más grande del mundo, está tratando de ser autosuficiente e impulsar su propia división de fabricación de procesadores en tanto invierte $15,000 millones en una nueva fábrica en las afueras de Seúl.
El nuevo Galaxy S estará equipado con los chips más avanzados de Samsung, dijo una de las personas. Un portavoz de Qualcomm se negó a hacer declaraciones. Samsung no quiso hacer comentarios en un correo electrónico.
‘Samsung puede lanzar el próximo Galaxy S ya en marzo, y no puede correr el riesgo de usar cualquiera de los chips en cuestión para su modelo más importante’, dijo Song Myung Sup, analista con sede en Seúl en HI Investment Securities Co.
CHIP DOMINANTE
Los procesadores de aplicaciones son el principal componente de los semiconductores en los teléfonos inteligentes, en tanto hacen funcionar todo, desde el sistema operativo hasta los juegos y la cámara. Qualcomm también es el mayor proveedor de módems que convierten la señal celular en voz y datos.
Los procesadores Snapdragon de Qualcomm, combinados con sus chips de banda base de celulares, han dominado el mercado para los teléfonos inteligentes y convirtieron a la empresa con sede en San Diego en una de las mayores beneficiarias de la explosión del uso de Internet móvil.
En su último año fiscal, las ventas de su división de chips alcanzaron $18,700 millones, un aumento de 12% respecto del año anterior.
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