La gimnasia istmeña trabaja para conquistar el premio mayor

La gimnasia ha logrado en los últimos años resultados internacionales importantes, que muchas organizaciones similares no han podido obtener en toda su existencia o por lo menos en el corto tiempo que tiene trabajando la primera.

Nada ha surgido de la casualidad y todo se debe a un trabajo que se ha consolidado, tras casi tres lustros de arduo empeño por hacer surgir un deporte considerado hasta cierto punto elitista.

Sin embargo, el trabajo por mejorar lo hecho hasta ahora, inclusive la estructura que les sirve de base, aún continúa.

Eso lo tiene claro Carlos Herrera, quien a los ojos del Instituto de Deportes cumplirá su primer periodo al frente de la organización, aunque ya tiene cuatro años a cuestas en ese mismo rol.

Buscará incrementar y desarrollar el deporte en el interior del país, teniendo en cuenta que la mayoría de seleccionados, sobre todo femeninas, son de la capital.

Asimismo, priorizar en la consecución de instalaciones, una de ellas para sede de la gimnasia, y del equipamiento adecuado para las diferentes especialidades.

En efecto, la gimnasia se ha mostrado imparable en su participación en juegos regionales y copas del mundo, pero el premio mayor por alcanzar será, a partir de ahora, desarrollarla y hacerla crecer en todo el país.

Carlos Herrera es reconocido por Pandeportes como presidente de la gimnasia, cuatro años después de lo programado.

Su primera elección se registró en 2018, pero no fue reconocida por la institución deportiva y, a partir de allí, su mandato, trabajo y esfuerzo fueron literalmente ignorados.

Casi que, al mismo tiempo, las instalaciones utilizadas fueron cerradas o derribadas, con el argumento de nuevos y restaurados coliseos para el deporte, pero aún no hay nada.

A pesar de esto su organización trabajó hasta donde el esfuerzo de los diferentes clubes afiliados lo permitió, y hasta dónde el Comité Olímpico de Panamá logró extenderle la mano.

La suma de esos esfuerzos permitió alcanzar medallas en juegos regionales, campeonatos y copas del mundo, cupos en los Panamericanos de Santiago de Chile y con mucha opción de estar en París 2024.

Hoy, luego de su confirmación y reconocimiento, están a la espera de una reunión con el director de Pandeportes para trabajar de la mano, por primera vez, y lograr soluciones para una disciplina nada económica.

Un lugar ideal para entrenar y, en el caso de la gimnasia, con los equipos adecuados, son elementos con los que debe contar cualquier deporte para desarrollarse.

Actualmente, los clubes de Panamá, Veraguas y Chiriquí entrenan en locales privados, en tanto que Herrera lo hace “donde puede y consigue” pagar, y Coclé en una instalación gubernamental multifuncional, lo que dificulta su desenvolvimiento.

Herrera recordó que los gimnasios donde trabajaban los atletas de Chitré y Santiago fueron cerrados para su remodelación en 2017, y al año siguiente les tocó salir del gimnasio Miguel A. Rivas, en Albrook, por iguales circunstancias.

“El gobierno pasado nos sacó del Miguel A. Rivas, en octubre de 2018, para una reconstrucción de 12 meses, y entiendo que a la fecha tiene un 85% de avance, y debe ser entregado equipado”, señaló.

En el caso de Coclé –explicó– el asunto es un poco más complejo, porque sí hay un local, pero es utilizado por otras disciplinas, lo que implica una serie de aspectos a tomar en cuenta a la hora de entrenar.

“Armar el piso para practicar puede tomar más de 45 minutos y otro tiempo para desarmarlo, y la barra asimétrica está dentro de un cuarto donde si el atleta es muy alto, solo puede usar la barra más baja”, apuntó.

Herrera señaló que esta situación, al igual que ocurre en las otras provincias, permite hasta cierto punto que el gimnasta practique, pero no con las condiciones que necesita uno de alto rendimiento.

“Por el hecho de no tener lugares dónde se pueda desarrollar en forma gratuita, el deporte es visto como elitista, pero trataremos de cambiar esto”, dijo.

“Lo principal es mejorar el equipamiento y no solo para la gimnasia artística, sino la aeróbica, rítmica y de trampolín, y establecer una sede principal en la capital, donde sea más accesible llevar a este deporte en todos sus niveles”, anotó.

Herrera, pese a un panorama que no luce alentador, se siente optimista de lo que se pueda conseguir, con la participación de las diferentes ligas, incluyendo a la de Colón, y el soporte del COP y Pandeportes.

“Las metas son muchas para la gimnasia, principalmente, mantener el estándar y los resultados que se han obtenido e incrementarlos, para asegurarnos de crecer el semillero de atletas que llegan a selección”, expresó.

Otra es rescatar la gimnasia masculina, muy débil en comparación con la femenina, un fenómeno que no es exclusivo de Panamá sino que ocurre en toda Latinoamérica.

La gimnasia masculina istmeña cuenta actualmente con cuatro jóvenes en la categoría mayor, y uno en la juvenil.

“Se van a crear comités en cada una de las ramas y asimismo en las otras modalidades que hemos iniciado, que se enfoquen en hacerlas crecer y desarrollarlas”, destacó.

También buscarán, en conjunto con las ligas provinciales, lugares apropiados para desarrollar la gimnasia, un tema a discutir con las autoridades deportivas.

En ese sentido precisó que la intención es sacar a la gimnasia de los locales privados, porque al final todo debe cubrirlo el padre de familia.

“Vamos a tratar de unificarnos y hacer crecer a la gimnasia, y que todos los clubes caminen en la misma dirección”, concluyó.