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Análisis: sistema costero de espacios abiertos de Panamá
- 17/12/2021 00:00
- 17/12/2021 00:00
La publicación 'Panamá resiliente' contiene la estrategia de cómo la ciudad de Panamá puede ser una ciudad resiliente.
La iniciativa de 100 ciudades resilientes de la Fundación Rockefeller auspició a 100 ciudades alrededor del mundo para, a través de la introspección de sus ciudadanos, estos analizaron cómo llegó la ciudad a ser lo que es, qué desafíos enfrentan debido a sus características de hoy y qué acciones realizarían para ser la ciudad resiliente que quieren llegar a ser.
En el marco de esta estrategia, la cual cuenta con la aprobación del Consejo del Municipio capital bajo el Acuerdo No.7 del 15 de enero de 2019, el cual tiene entre sus considerandos que, “mediante el Decreto Ejecutivo 1101 del 30 de diciembre de 2010, se adoptó la Política nacional de gestión integral de riesgo de desastres (Pngird), que en el ámbito local resalta la importancia de los municipios sobre la gestión local del riesgo” y “que de conformidad con el numeral 9 del artículo 242 de la Constitución Política, es función del Consejo Municipal expedir acuerdos municipales referentes a las materias vinculadas a las competencias del municipio, con fuerza de ley en el distrito”; y bajo este sustento “acuerda adoptar la estrategia de resiliencia como instrumento de gestión, dirigido a fortalecer las capacidades institucionales del Municipio de Panamá, en torno a su capacidad de coordinar y organizar las acciones que permitan incidir en la toma de decisiones para preparar la ciudad ante los impactos y tensiones de índole relacionadas a temas sociales, ambientales y económicos”.
Dentro de los principios de la estrategia está plasmado que el diseño para lograr la resiliencia de la ciudad, debe considerar los ecosistemas y el capital natural, dando prioridad a los peatones y generando sistemas naturales integrales, entre otros.
Basado en la definición de resiliencia urbana plasmada en la estrategia, que define la resiliencia como la capacidad de las personas, comunidades, empresas y sistemas de una ciudad para superar, adaptarse y prosperar a pesar del impacto de eventos catastróficos y tensiones a los que estos están expuestos, con el objetivo de preparar a las ciudades para enfrentarse a cualquier desafío, y fortalecer los sectores más vulnerables, la estrategia de resiliencia en su pilar 3 plantea, en el objetivo redescubrir nuestra ciudad de humedales para repensar la infraestructura que nos protegerá de los efectos del cambio climático, diseño de la acción 'Sistema costero de espacios abiertos (Sea)'.
Bajo esta acción y enmarcados en los objetivos de la estrategia de resiliencia, el Banco Mundial (BM) preparó el informe, 'Evaluación del riesgo de inundación y priorización de infraestructura híbrida para la reducción del riesgo en la cuenca del río Tocumen, ciudad de Panamá'. Este informe es producto de una asistencia técnica contratada por el BM, brindada al Municipio de Panamá en el marco del programa de resiliencia y reactivación del borde costero de la ciudad de Panamá.
Este estudio tiene como objetivo contribuir a materializar las visiones de la iniciativa del Sea del Municipio de Panamá, específicamente para la cuenca del río Tocumen y su costa, de manera que se logren intervenciones innovadoras para la ciudad basadas en soluciones basadas en la naturaleza (SBN) y que permitan medidas de protección contra inundaciones al recuperar, conservar y proteger los ecosistemas de la costa.
Es así como el informe presenta la evaluación de la amenaza y el riesgo de inundación en la cuenca del río Tocumen tanto en el presente como en el futuro, y a partir de ella, brinda posibles soluciones de cómo las soluciones naturales, como manglares y vegetación ribereña, y soluciones híbridas, como intervenciones mixtas, verdes, grises, estructurales y no estructurales, podrían contribuir a la resiliencia frente al riesgo de inundación en el área de estudio.
Posterior a las fases del estudio sobre factores de riesgo de inundación, levantamiento topográfico de canales y estructuras fluviales, análisis de exposición, evaluación del riesgo de inundación en la cuenca del río Tocumen, y priorización de la infraestructura híbrida para la reducción del riesgo de inundación urbana, se establecieron las opciones de restauración del río tomando en cuenta riesgos y oportunidades.
En el caso particular de esta entrega se menciona la evaluación de potencial para soluciones basadas en la naturaleza: ríos y llanuras de inundación.
El estudio indica que existen oportunidades de restauración a nivel de tramos, y oportunidades para mejorar la gestión de aguas superficiales en desarrollos urbanos.
Dentro de las primeras opciones, el estudio señala que reconectar la llanura de inundación y antiguos canales al río trae un gran número de beneficios, aunque es importante indicar que debido a la escala de las obras requeridas, también hay una cantidad de posibles limitaciones.
Los beneficios que señala el estudio al implementar SBN son la reducción de la energía en el canal principal del río que lleva al desarrollo de formaciones de grava y la estabilización de orillas erosionadas de haberlas; la oportunidad para naturalizar la llanura de inundación e introducir hábitats variados de humedal, praderas y bosques con el consecuente incremento en la biodiversidad y la abundancia de especies de invertebrados; la creación de alto flujo con hábitats asociados, como hábitat para peces, al procurarles áreas de reproducción y refugio.
Beneficios adicionales son la creación de hábitats temporales y variados en toda la llanura de inundación, punto crucial para los millones de aves locales y migratorias; la oportunidad para establecer conexión entre los ecosistemas verdes que rodean a la ciudad, por ejemplo, el Parque Nacional Camino de Cruces, Parque Nacional Soberanía, Parque Natural Metropolitano y el sitio Ramsar Humedal Bahía de Panamá, e igualmente, oportunidades para integrar espacios públicos de recreación y caminos peatonales o ciclorrutas al mejorar la capacidad de inundación local.
Entre las limitaciones se señala que la interrupción a corto plazo del transporte de grava hacia la parte baja puede causar perturbación del lecho, pero se acota que es poco probable que resulte en impactos significativos, cuando se realice con la mitigación adecuada.
Adicionalmente, se puntualiza que el riesgo de sedimentación puede ocurrir si el flujo de sedimento se divide entre dos canales, lo que depende de si está conectado al canal principal en su extremo superior o si está desconectado, lo que podría generar que la reconexión pueda no ser posible.
Además, señala que de la posible perturbación a las especies y hábitats durante las obras, hay cierta pérdida de tierra desarrollable, y que la reconexión de la llanura de inundación podría requerir de más estudios.
El estudio hace hincapié en que “los sistemas de aguas de lluvia en la ciudad de Panamá han sido desarrollados siguiendo la filosofía de drenar las aguas superficiales lejos de los sitios desarrollados de la manera más rápida posible utilizando estructuras de ingeniería”. En Panamá, principalmente, el sistema de drenaje se basa en canales abiertos revestidos con concreto y tubos y alcantarillas subterráneas.
El manejo adecuado de las aguas urbanas requiere la utilización de sistemas de drenaje sostenible (SuDS), un enfoque que permite gestionar el drenaje de aguas superficiales y que busca reproducir las formas naturales de los procesos hidrológicos que hubiesen prevalecido antes del desarrollo dado.
La explicación de estos sistemas es materia de nuestra próxima entrega.
La autora es investigadora científica en recursos hídricos e ingeniera civil. También es doctora en ingeniería agrícola con mención en recursos hídricos en la agricultura (Chile).