Panamá ‘necesita’ una ley de gestión menstrual

Actualizado
  • 26/09/2024 23:00
Creado
  • 26/09/2024 17:25
Eliminar el Itbms en los productos de higiene es parte de lo que plantea la norma

De acuerdo con ONU Mujeres, la pobreza asociada a la menstruación hace referencia a no poder pagar los productos menstruales o acceder a ellos, no contar con instalaciones de saneamiento e higiene, ni con la educación o los conocimientos para gestionar la salud menstrual.

En Panamá, las niñas, adolescentes y mujeres padecen de este tipo de pobreza. Durante la pandemia, una mujer manifestó en las redes sociales que la bolsa con alimentos que ofrecía el Gobierno no era suficiente, ya que no contaba con toallas sanitarias. Ella fue objeto de burla y muchos alegaron que el Ejecutivo no tenía por qué suplir esa necesidad.

El Estado sí tiene que ser un respaldo para las mujeres en este sentido. Es por ello que una coalición de organizaciones, en su mayoría feministas, impulsan un proyecto de Ley Integral de Gestión Menstrual.

Según datos del Banco Mundial, alrededor de 500 millones de mujeres y niñas a nivel global experimentan una brecha en el acceso a productos de gestión menstrual y a la infraestructura adecuada. “En Panamá, la situación se agrava por la falta de acceso a agua y saneamiento en algunas comunidades, incluyendo planteles educativos o centros de salud, lo cual impide una gestión menstrual adecuada. Además, factores como el desempleo o la pobreza, agudizados después de la pandemia, dificultan a las familias la compra de productos menstruales”, señala una nota de la coalición que impulsa la iniciativa.

Una norma pendiente

La aprobación de este proyecto de ley representaría un avance en la lucha contra la pobreza menstrual, sostienen. En el periodo legislativo de 2019-2024, la organización Palabras Poderosxs presentó a la Asamblea Nacional de Panamá un proyecto de ley que buscaba, entre otras cosas, eliminar el impuesto de los productos menstruales, asegurar la disponibilidad de productos menstruales gratuitos en instituciones públicas (especialmente en escuelas primarias y secundarias), y la inclusión obligatoria de productos menstruales en los kits distribuidos por el Gobierno en situaciones de emergencia, como desastres naturales o pandemias.

El nuevo proyecto de ley retoma los puntos anteriores y adiciona otros, como la creación de una encuesta nacional de gestión menstrual, la creación de un día nacional de la salud menstrual y la inclusión de la salud menstrual como componente fundamental de los planes integrales de salud.

“Vamos a presentar un proyecto de ley que busca eliminar el impuesto en las toallas sanitarias. Este proyecto también busca que sean gratuitos los productos en lugares públicos, como en las escuelas, hospitales y centros universitarios”, explicó Claudia Vidal, directora de Palabras Poderosxs.

La iniciativa plantea que se incorporen en los currículos la educación menstrual integral para que las mujeres conozcan qué está pasando con su cuerpo y que la menstruación no les tome por sorpresa. Además, incluir un protocolo de salud integral que permita un diagnóstico temprano de la endometriosis u ovarios poliquísticos, detalló la activista durante una entrevista con La Estrella de Panamá.

Existe una burla hacia la menstruación, lamentó Vidal. “No se trata solamente de hacer una campaña; es cambiar la narrativa social, es cambiar la visión y perspectiva que tiene la sociedad acerca de la menstruación. La menstruación es parte de la biología de la mujer y tiene mucho que ver con los derechos a la educación”.

Se necesita que se eduque e informe a la población sobre la menstruación, agregó Vidal, ya que durante las capacitaciones que brinda Palabras Poderosxs, ha visto comunidades en donde las niñas y mujeres creen que orinan y menstrúan por el mismo orificio. “Estas cuestiones tan básicas del cuerpo en el que habitamos. El que no se conozca esta situación tiene mucho que ver con los derechos humanos que no se están garantizando”.

“Conocimos el caso de una chica que ya tenía cuatro años de haber empezado a menstruar y no sabía qué era la menstruación. Su abuela le decía que le había picado una culebra y no le dijo que era la menstruación. Cada vez que menstruaba, no iba a la escuela [...] En todos lados se ve la falta de información y la necesidades de productos, sobre todo en las comarcas, donde hay carencia”.

De alguna forma, el hecho de que una niña no tenga el producto incide en que no asista al colegio. Pero, además de que los mitos siguen presentes, se necesita que se impulse la planificación familiar, de cuidados. “Los mitos se han acentuado porque no hay una conversación sobre el tema. Lastimosamente, no tenemos una sola cifra de cuántas niñas faltan a las escuelas por eso. Esta necesidad se va a incorporar en la ley, ya que se necesitan datos”.

Fomentar la educación

Son 16 organizaciones y/o aliados que participan de la iniciativa y respaldan a Palabras Poderosxs, como es el caso de Amapola Panamá. Vanessa Ramírez manifestó que esta empresa ha decidido apoyar porque es una de las visiones que impulsó la creación de esta empresa. “Sí existe la pobreza menstrual en Panamá. Se necesita que las personas tengan conocimiento acerca de un proceso tan natural como es la menstruación, y también, luego de ver la realidad de muchos lugares, como cárceles, colegios, vemos la realidad de la pobreza menstrual”.

“Es necesario este proyecto de ley. La menstruación es algo biológico, que no se elige como otras cosas. Existen ciertos productos que sí se pueden elegir. También es oportuno que cada ciudadano done a instituciones productos que ayuden a que las niñas gestionen de una mejor manera la menstruación”.

Ese tema no se toca; es un tabú. A la población en general le da vergüenza hablar del tema, consideró Ramírez. “Se debe hacer mucho trabajo en la educación. También se debe dar acceso a los productos de higiene menstrual. Tal vez, tienen acceso a una toalla para una jornada, sin embargo, una toalla se debe utilizar hasta un máximo de cuatro horas”, concluyó.

Durante los últimos años, países como Colombia, México y Costa Rica han avanzado en sus esfuerzos por prevenir la pobreza menstrual a través de leyes que garantizan acceso a estos productos de higiene personal.

La Unicef señala que la higiene menstrual implica que mujeres y niñas tengan acceso a material que absorba o recoja la sangre y que pueda ser cambiado en privado, tan a menudo como sea necesario, durante el período de la menstruación, utilizando agua y jabón para higienizar el cuerpo cuando sea necesario, y teniendo acceso a instalaciones para disponer del material ya utilizado.

Claudia Vidal
directora de Palabras Poderosxs
Conocimos el caso de una chica que ya tenía cuatro años de haber empezado a menstruar y no sabía qué era la menstruación. Su abuela le decía que le había picado una culebra y no le dijo qué era la menstruación”.
Limpia a menudo tu zona vaginal; una buena higiene previene infecciones vaginales y genitales.
Anota en un calendario el primer día de tu período y los días que dura; esto te ayudará a prepararte.
Ten siempre a la mano el producto que prefieras para atender tu menstruación y evita que tu ropa se manche.
Antes y después de usar el producto de tu preferencia, lava tus manos con agua y jabón.
Mantén los paños o toallas sanitarias sin usar limpias.
Para cambiarte, seca el área con un paño o papel de baño y coloca una toalla sanitaria limpia en tu ropa interior.
Al ir al baño, siempre limpia de adelante hacia atrás para evitar que bacterias de heces suban hacia la zona vaginal.
Acude a un profesional de la salud inmediatamente al sentir ardor, picazón o mal olor durante tu período.
Lo Nuevo
Suscribirte a las notificaciones