Este viernes 20 de diciembre se conmemoran los 35 años de la invasión de Estados Unidos a Panamá. Hasta la fecha se ignora el número exacto de víctimas,...
La ‘Calle de los sombreros’ adorna el Casco Antiguo
- 23/12/2023 00:16
- 22/12/2023 19:13
Incentivar a los extranjeros y panameños a caminar hasta la calle primera del corregimiento de San Felipe para disfrutar de una alternativa visual y pintoresca, es el propósito de la iniciativa ‘La calle de los sombreros’.
Más de mil sombreros originales panameños cubren la vía, formando un techo colorido y un atractivo para los visitantes. La inauguración será el día 29 de diciembre desde las 6:00 p.m. hasta las 9:00 p.m.
“En Puerto Rico y Colombia tienen la ‘Calle de los paraguas’, pero quería hacer algo diferente. A pesar de todas las vicisitudes que hemos tenido los panameños, me atreví y está quedando ‘demasiado bonito’. Además, a pesar de que no hemos terminado la calle en su totalidad, está llena de gente y no dejan de pasar turistas”, relata a este medio Aniel Beltrán, organizador de la actividad.
La iniciativa viene de parte de la empresa Guayacano Hat en colaboración con la Embajada de Francia, que está permitiendo colocar los tensores en los que van los sombreros desde su sede, y el Ministerio de Cultura (MiCultura). La calle está llena de todo tipo de sombreros panameños, incluyendo sombreros pintaos.
“Quiero promover más al sombrero pintao, en vista de que muchos turistas vienen aquí y solo dicen ‘Panamá Hat’, piensan que el tradicional es el sombrero blanco de cinta negra, pero el sombrero panameño no se promueve tanto. Entonces, quiero llegar un poco más allá y que se conozca”, añade Beltrán.
El ‘Panamá Hat’ tiene su origen en la cultura indígena de la región ecuatoriana de Jipijapa. Se popularizó con el nombre que ahora lleva tras una visita de quien era presidente de Estados Unidos en 1906, Theodore Roosevelt. En suelo panameño le entregaron un sombrero para mitigar el calor. Al regresar a su país le preguntaron por la procedencia del accesorio, a lo que respondió: Es un ‘Panamá Hat’.
En cambio, el sombrero pintao es originario de la provincia de Coclé, en el interior de Panamá. En 2017 fue declarado por la Unesco como patrimonio inmaterial de la humanidad. Hay otros sombreros típicos panameños cuyos nombres varían de acuerdo con el lugar y estilo de confección, como el de talco, el pepita de guate, el tumba hombre, el de palma de hilar, entre otros.
El color oscuro de sus franjas se obtiene de la planta chisná, cuyas hojas se hierven junto con las fibras que han de ser teñidas; todo este proceso se lleva a cabo manualmente, empleando técnicas transmitidas de generación en generación.
Por el momento, para tener los sombreros colocados en la calle tienen permiso por tres meses de parte de la Dirección de Patrimonio Histórico de MiCultura, con opción a una renovación. “Pero la intención es extenderlo para que turistas y nacionales puedan disfrutarlo por más tiempo”.
Para el día de la inauguración se está invitando a los asistentes a utilizar sombrero. Sin embargo, para aquellos que no tengan o estén pasando por el lugar por casualidad, se les estarán regalando. La disponibilidad es de 300 sombreros para obsequiar. “Imagínese, ese día estará todo el Casco Viejo lleno de sombreros”.
Numerosos países alrededor del mundo han optado por la decoración de calles con paraguas durante los últimos veranos. México, Emiratos Árabes, Turquía, Portugal, Inglaterra y otros países han experimentado la transformación de sus techos urbanos mediante esta singular elección.
Las razones detrás de esta tendencia son variadas, ya sea enraizada en la tradición de ciertas festividades o simplemente como respuesta a la necesidad de combatir la sensación de calor. “Como ejemplo de ello, a mediados de agosto, el pueblo de Vilanova da Cerveira, en el norte de Portugal, embelleció sus calles con paraguas y sus casas con tapices de ganchillo, dando lugar a una explosión de creatividad festiva”, según reseña el portal giftcampaign.es.
Las redes sociales se han llenado de cientos de fotos que dan testimonio de este fenómeno y de otros casos similares de calles adornadas con paraguas. Incluso en Jerusalén, Israel, se ha adoptado la tradición de colocar paraguas flotantes sobre las calles como atractivo turístico para atraer a los visitantes durante el verano.
Más allá de estos usos decorativos, los paraguas también han adquirido significados simbólicos, como en Hong Kong, donde se convirtieron en un emblema durante las revueltas contra el gobierno en 2014, utilizándolos como escudo contra los gases lacrimógenos.
De acuerdo con el periodista y escritor Martín Bugliavaz, todo surgió en Águeda, una pequeña ciudad portuguesa que está a medio camino entre Oporto y Coímbra. Así lo detalla en su artículo ‘El Solar de French, un lugar histórico de Buenos Aires que luce los famosos paraguas de colores’.
“¿Cómo fue que algo surgido de una humilde ciudad de Portugal terminó expandiéndose de tal manera? La respuesta tiene que ver con el origen de la idea, que fue una iniciativa que la empresa portuguesa especializada en mercadeo Impactplan presentó en 2012 para el festival Agitágueda de la ciudad de Águeda. The Umbrella Sky Project fue el nombre que le dieron a un concepto que tiene como objetivo dotar de color espacios que suelen ser grises, para de esa forma hacer sonreír a la gente”, escribe el periodista.
Agrega que la idea de los paraguas se potenció por haberse desarrollado en una era masivamente digital, algo que sin dudas Impactplan supo aprovechar a la perfección para hacerse conocida en todo el mundo. Sin embargo, los coloridos paraguas demostraron que lo que pensó la empresa portuguesa no era para nada descabellado: la gente pide más colores vivos y menos grises. Y los paraguas, que suelen sobresalir en los grisáceos días nublados, fueron la solución adecuada.
La ‘Calle de los paraguas’ de Boquete
Una calle no muy visitada que se encuentra alrededor del Parque Municipal Domingo Médica de Boquete, en la provincia de Chiriquí, fue acondicionada y convertida en otro de los atractivos del distrito.
En la parte superior se colocaron una serie de hilos desde los que colgaron paraguas abiertos con sus colores blanco, rojo y verde como la bandera de la provincia. La iniciativa se puso en marcha a principios de 2020. Con el tiempo se ha ido adaptando; en diciembre del mismo año fue decorada con luces. En septiembre de este año colocaron telas con los colores de la bandera chiricana.