Dulce determinación

Ninoska Herrera lleva toda una vida en la cocina. Creció entre dulces y combinaciones de sabores, y siempre supo, que entre otras cosas, su destino era ser chef.

‘Nino’ ha hecho todo lo que ha estado a su alcance para perfeccionar su arte, y lo que no estuvo, lo buscó. Su camino empezó en el l Instituto Técnico Superior de Cocina. Más adelante se topó con el Instituto Nacional de Formación Profesional y Capacitación para el Desarrollo Humano (Inadeh), una entidad estatal que se dedica a la capacitación de recurso humano.

Fue en esas clases donde llegó la oportunidad de aplicar para Super Chef, el concurso que vio en ese momento como ‘una puerta que se abre’.

Ninoska es tímida, pero aunque le tiembla la voz, su determinación no pasa desapercibida, ni los nombres curiosos que le pone a sus platos. ‘Cuando uno ama algo, uno se emociona con lo más pequeño’ y bajo esa óptica, ella mira todo su contexto.

LO APRENDIDO

Si un sabor le dejó el concurso a Ninoska, fue el panameño. Ella cuenta que redescubrió sus raíces en los ingredientes que le revelaban y se veía obligada a utilizar semana tras semana.

El pixbae, la piña, el pimentón, el plátano, el coco, el pescado, los mariscos: ‘¿De qué vale ser chef y no dar a conocer lo tuyo?’, se pregunta Ninoska.

Superadas las cámaras y empeñada hasta el cansancio en continuar participando, la aspirante a chef hoy concluye que ‘si vuelve a suceder, lo vuelvo a repetir’.

LAS RAÍCES

‘Cuando era niña me emocionaba como mi mamá mezclaba... con lo que hubiera ella hacía algo y le quedaba espectacular. Yo algún día quisiera ser así’.

‘Hacía dulces con ella. De nueces, de frutas... yo me crié en ese mundo’, explica Ninoska, quién entre sus proyectos personales también tiene una licenciatura en inglés, la culminación de su fascinación por ese idioma que aprendió escuchando canciones y despejando dudas con un diccionario.

La especialidad de la Super Chef 2014 son ‘los dulces’; la panna cotta: sencilla, de coco, con mermelada y el brownie de gloria: coco, chips de chocolate, dulce y leche condensada. Gusto que le ha ayudado a costear distintas etapas de su formación, vendiendo dulces a domicilio. ‘La cocina es para inventar’, dice y cuenta cómo creó el cupcake/cheescake.

Ninoska no espera que todo termine con el concurso. Ella quiere aprender y enseñárselo al mundo. ‘Ayudar a otros, compensar a Dios todo lo que me ha dado’ con su propio blog de recetas hechas en videos de Youtube.