Uno que es el grupo de Bohuslan Big Band fue en el Centro de Convenciones de Ciudad del Saber
En la plaza toca:
Porque Puma Zumix Grupo juvenil que interpreta...
Las túnicas anaranjadas o azafrán de los monjes budistas en el sudeste asiático apenas han variado su estética desde que Buda creó sendas órdenes de mujeres y hombres mendicantes hace 25 siglos. Como era habitual entre los ascetas de la época, los primeros monjes budistas confeccionaban sus túnicas o ‘kasaya' con retazos desechados de tela que encontraban en la calle para exhibir su austeridad.
‘Entonces las lavaban, las cortaban en cuadrados y las cosían para hacer una pieza grande', explica Dhammananda, abadesa de Songdhammakalyani, el primer monasterio de monjas (‘bhikkhunis') en Tailandia situado en la provincia de Nakhon Pathom, colindante con Bangkok.
Dhammananda relata que Buda vio que los monjes tenían parches en de todas las formas en sus túnicas y le pidió a su asistente y primo, Ananda, que pensara en un diseño homogéneo. ‘Ananda se fue a una colina y vio los campos de arroz en Sarnath y diseñó las túnicas de acuerdo con los campos de arroz', afirma la monja, quien precisa que desde entonces las túnicas se diseñan con rectángulos cosidos que emulan un terreno de cultivo parcelado.