Roberto Pinnock: Mulino es consciente que no tiene la fuerza que tenía cuando fue ministro

El presidente José Raúl Mulino arrancó su mandato con alta expectativa de algunos sectores y poco espacio para maniobrar. El propio mandatario reconoce el desgaste político de las instituciones y de los “números rojos” en las finanzas del Estado.

Proyectos emblemáticos como la construcción de la vía ferroviaria Panamá-David o problemas polarizantes como la reforma al sistema de pensiones en la Caja de Seguro Social, son desafíos que requieren un gobierno fuerte y estable. Condiciones con las que no cuenta en este momento Mulino, a juicio del sociólogo y analista político Roberto Pinnock.

El también docente del Departamento de Sociología de la Universidad de Panamá, explicó este jueves en Portada de La Estrella de Panamá que en el contexto de la actual crisis del país, la nueva administración requerirá construir y mantener consensos con sectores diversos. Uno de esos grupos de poder, el más evidente, es el representado por el expresidente y líder del oficialista partido Realizando Metas, Ricardo Martinelli.

“Mulino está atrapado entre varias fuerzas, una de ellas es lo que representa Martinelli. Lo que vamos a ver es a un presidente que va intentar satisfacer a todas las distintas fuerzas”, sostuvo. Pinnock considera que propuesta como el tren Panamá-David buscaría lanzar puentes a otros grupos dominantes fuera del esquema transitista que concentra los recursos en el área Metropolitana, para sumar a grupos empresariales del interior del país.

Los resultados del pasado 5 de mayo, analizó Pinnock, expresaron una dispersión tanto del voto como de la confianza de la ciudadanía en varios opciones electorales, en el que solo el 34% dio el visto bueno a Mulino para gobernar. Esa realidad, dijo, se expresa en lo institucional con el acercamiento de Mulino a las distintas bancadas de la Asamblea Nacional, pero fuera las instituciones también estaría en búsqueda de acuerdos con otras fuerzas dentro del poder empresarial dominante del país.

“El hecho de decir que es un gobierno 100% empresa privada, ya nos dice de que lado va estar bateando. Entonces todo eso que ha ido poniendo (en su gabinete) para buscar la unidad, está en esa misma línea. Si miras cada uno de de ellos (los altos funcionarios designados) se corresponden con algún sector de las grandes inversiones en este país”, dijo.

Dentro del análisis Pinnock destacó que Mulino se ha presentado “sin demagogia” sobre el carácter “100% empresarial”, que revela “de que lado va estar bateando”.

“Si miras cada uno de de ellos (los altos funcionarios designados) se corresponden con algún sector de las grandes inversiones en este país (...) creo que está tratando de contentar a todos, de que aunque no estén en el gobierno, si estás en la vía de un gobierno 100% empresa privada, vas a encontrar algún nivel de satisfacción ”, dijo.

Pinnock mostró su preocupación de que dentro de esa coalición de intereses “no estén” representados los sectores populares ni sus organizaciones. No descarta que frente a posibles imposiciones de medidas antipopulares rápidamente la situación devenga en un estallido similar al de 2023.