Los riesgos del fanatismo religioso y político

Con la frase de Juan Pablo II: ‘Hay que dejar de lado los fanatismos religiosos, políticos y deportivos’, inició el programa, conducido por Luis Eduardo Camacho, secretario de Comunicación del Estado, y Rubén Darío Murgas, ‘Analizando opiniones’, de este domingo.

El programa que se ha caracterizado por abordar temas políticos, trató el tema de la intolerancia y los riesgos del fanatismo.

El tema sale a relucir a raíz de la condena a muerte en la horca, impuesta por el gobierno de Sudán, contra la exmusulmana Meriam Yehya Ibrahim, por casarse con un cristiano y convertirse a esa religión.

Rubén Darío Murgas explicaba que así como en la política, en la religión el transfuguismo también es una realidad.

Según Camacho, todo fanatismo es peligroso, pero el que más desgracias y guerras salvajes ha traído a la humanidad, es el religioso.

‘Los fanáticos extremos deben echarse a un lado porque el fanatismo le hace daño al país y no contribuye en nada’, expresó el secretario de Comunicación del Estado.

En ese sentido, Murgas dijo que es importante no caer en fanatismo político en estos momentos.

‘Ahora que estamos en vísperas de cambio de gobierno, no debe existir el fanatismo’, resaltó Murgas.

A esto se suma la preocupación de varios sectores de la sociedad civil y partidos opositores, que esperan que Cambio Democrático permita al gobierno de Juan Carlos Varela gobernar en tranquilidad y no entregue un país convulsionado.